Los niños son los protagonistas de la magia de la Navidad, pero, ¿qué hacer cuando descubren la realidad de dicha magia?
Cuando los niños son pequeños, todo es magia e ilusión cuando llegan las navidades. Todo se hace por y para ellos, por ver sus caras llenas de emoción en la noche de los Reyes Magos y la felicidad en la mañana del 6 de enero disfrutando de todos sus regalos, después de un año entero portándose bien para este momento.
Pero llega un momento en la vida de todo niño, en el que esa magia comienza a convertirse en curiosidad y de alguna manera, descubren cuál es la realidad de los Reyes Magos.
Muchos padres deciden responder a esa pregunta de forma directa y sincera, y quizá, en función de la edad y de la madurez del niño, pueda ser la respuesta correcta. Pero, ¿qué hacer cuando el niño es aún pequeño o demasiado inmaduro para aceptar la cruda realidad?
En la mayoría de los casos, los niños descubren la realidad de los Reyes Magos a través de otros mediosNo es conveniente mentir a un niño
Dicen los expertos, que nunca se debe mentir a un niño y siempre que este muestre curiosidad, los padres deben ofrecerle una respuesta sincera y acorde a su edad. Pero como ocurre en todos los aspectos de la infancia, cada niño es un mundo y no se debe generalizar en cuestiones de edad.
Si tu hijo de 7 años es muy maduro, muestra interés real por las cuestiones importantes de la vida e incluso, realiza preguntas filosóficas, quizá sea una buena idea hablarle y responder a su pregunta con sinceridad.
Pero lo general es, que los niños de esa edad aún mantengan un alto nivel de inocencia, y aunque se muestren curiosos, quizá no sea una buena idea contar la verdad de una forma real.
En cualquier caso, esta debe ser una decisión de los padres y no debe dejarse al azar. Por lo que es conveniente plantearse la situación con antelación, y así te podrás anticipar a la previsible pregunta de tu hijo.
¿A qué edad hay que hablar con los niños sobre los Reyes Magos?
En la mayoría de los casos, los niños descubren la realidad de los Reyes Magos a través de otros medios y con la duda, llegan a casa a preguntar a los padres. Los niños que ya lo saben lo comentan en el colegio, a través de comentarios e incluso, por su propia madurez comienzan a realizarse preguntas como ¿cómo pueden cargar los Reyes Magos con tantos regalos? O ¿cómo pueden llegar a todas las casas siendo tan grande el mundo?
Llegado este momento, puede ser una buena ocasión para hablar con franqueza y ofrecer una respuesta sincera a tu hijo. Por lo general, hasta los 4 años los niños confían plenamente en la palabra de los mayores y no se hacen preguntas de ese tipo. Por lo que si tus hijos están en esa edad, no tienes que preocuparte por esta cuestión aún.
Por el contrario, a partir de los 6 años los niños comienzan a hacerse preguntas como la ya mencionada y entre los 6 y 8 años, es muy posible que empiecen a tener dudas sobre la realidad de los Reyes Magos, Papá Noel e incluso, el Ratoncito Pérez. Aunque en esta edad, todavía los niños mantienen su inocencia y es posible que sigan creyendo en esta magia.
A partir de los 8 años, los niños desarrollan la capacidad de razonamiento y pueden aceptar de una manera menos traumática la verdad sobre los Reyes Magos, por lo tanto, si tu hijo está entre los 8 y los 10 años, está en un momento ideal para hablar con él.
Cómo explicar la verdad sobre los Reyes Magos a los niños
Que tu hijo tenga la edad adecuada o te pregunte de forma directa, quizá no esté del todo preparado para conocer la verdad de una forma radical. Muchos niños a pesar de ser algo mayores, emocionalmente son demasiado inmaduros para poder afrontar una realidad que les va a suponer una decepción en la mayoría de los casos.
A partir de los 8 años, los niños desarrollan la capacidad de razonamientoPara hacer este momento algo más suave, puedes preparar un relato dulce y bonito sobre la verdad de los Reyes Magos y hacérsela llegar a tus hijos en forma de carta y esta puede decir algo así:
"Querido XXX,
Este año somos nosotros los que queremos escribirte a ti para darte las gracias por pensar en nosotros durante todos estos años. Nos has hecho muy felices con tu ilusión y por este motivo, queremos compartir contigo un importante secreto. Es algo que no debes contarle a ninguno de tus amigos, ni a tu hermano pequeño, porque es algo que nosotros mismos contaremos a todos los niños a su debido momento.
Aunque nosotros somos Reyes y además, somos magos, las personas que se encargan de cumplir tus deseos cada Navidad, son las personas que más te quieren en el mundo. Esas personas que te cuidan cada día, que te conocen mejor que nadie y que premian tu buen comportamiento cada día de Reyes. Nosotros sólo somos sus representantes en el mundo mágico, igual que los personajes de tus cuentos favoritos.
Tus papás son los que cada año se encargan de hacerte llegar todos esos regalos que tanto deseas, porque te quieren mucho y saben lo mucho que te esfuerzas todos los días por ser un buen niño.
No queremos que te sientas decepcionado, al contrario, nosotros seguiremos trabajando en el mundo mágico para que todos los niños pequeños nos esperen cada año con ilusión, hasta que se hagan mayores y puedan conocer la verdad.
No nos olvides nunca, te queremos
Melchor, Gaspar y Baltasar "
Esta es solo una idea que puedes utilizar como inspiración, redacta tu propia carta y así la podrás adaptar a la personalidad de tu propio hijo.
Algunos consejos para contar la verdad sobre los Reyes Magos a los niños
- Evita hablar con tu hijo en Navidad. Aunque empiece a tener dudas, es preferible que mantengas durante un tiempo la magia, al menos hasta que pase la Navidad. Después de todo el año pensando en este momento y después de escribir su carta a los Reyes Magos con toda su ilusión, saber la verdad ahora puede ser demasiado traumático.
- Comprende su decepción. Es posible que tu hijo se sienta engañado, por lo que debes hacerle comprender la diferencia entre mentir y guardar un secreto. Procura hablar con calma y explícale a tu hijo en qué consiste la tradición de los Reyes Magos, incluso puedes contarle las tradiciones de otros países.
- Utiliza tus propias palabras. Evita utilizar términos rebuscados que confundirán aún más al niño, habla con sinceridad y si lo crees necesario, incluye en tu relato algo de magia sin caer en la falsedad.
- Explícale el valor de los regalos. Esta puede ser una gran ocasión para que los niños comprendan el valor de los regalos. Puede que se sientan confundidos ya que durante toda su vida, se les ha dicho que debían portarse bien para que los Reyes Magos les dejasen regalos bajo el árbol de Navidad.