La alimentación infantil es el caballo de batalla de la mayoría de padres de hoy en día. Al igual que ocurre con los adultos, la dieta de los más pequeños debe de ser variada y equilibrada para aportar una cantidad importante de nutrientes a su cuerpo. El problema de ello se debe a que los propios adultos no siguen un tipo de alimentación saludable y optan por dietas ricas en grasas y en azúcares.
Es por ello que son los propios padres los que deben dar ejemplos a sus hijos y optar por una dieta lo más saludable posible. Son muchos los estudios que indican que cada vez hay más niños con sobrepeso a causa de una mala y pobre alimentación. Para evitar dicho problema, es importante concienciar a los padres con una serie de consejos y claves que permitan elaborar una alimentación lo más saludable y nutritiva posible.
1. Educar con buenos hábitos alimenticios
Es realmente importante el empezar a educar a los más pequeños de la casa con unos buenos hábitos alimenticios. Hay que darle la importancia que realmente tiene a la alimentación infantil y enseñarles una serie de pautas a la hora de comer. Los niños de corta edad necesitan hacer tres comidas regulares más un par de bocadillos. Las verduras y la fruta no pueden faltar en la dieta de los pequeños ya que son altamente nutritivas.
Hay que hacerles entender que alimentos o productos como la comida rápida o la bollería industrial es realmente perjudicial para la salud. El almuerzo o la merienda deben consistir en algo sano como es el caso de la fruta, los lácteos o los frutos secos. Si educas a tus hijos desde que son pequeños a comer de todo y valorar los alimentos, no tendrás problemas a la hora de conseguir unos muy buenos hábitos a la hora de comer.
La alimentación no es la misma en un niño que en una persona adulta2. Raciones adecuadas a su edad
La alimentación no es la misma en un niño que en una persona adulta por lo que hay que tener en cuenta las raciones de comida que se va a proporcionar al menor. Los expertos en nutrición aconsejan a los padres el dar dos raciones diarias de pescado, huevos, pollo y legumbres. Unas 3 raciones al día de leche, yogur, queso y aceite de oliva virgen extra. 4 raciones diarias de fruta y verduras y 5 raciones al día de pan, pasta, patatas y cereales. Si sigues estas pautas a la hora de alimentar a tu hijo no debes preocuparte por su salud ya que vas aportar el número de nutrientes que el pequeño necesita.
3. Bebidas saludables
Uno de los grandes errores que se cometen a la hora de alimentar a los niños consiste en un consumo inadecuado y perjudicial de las bebidas llamadas azucaradas. Son muchos los niños que optan por beber a todas horas bebidas azucaradas sin advertir de lo perjudicial que pueden resultar para la salud.
Lo ideal en relación con las bebidas es que el menor opte por el agua, la leche y los zumos naturales. Dichas bebidas son muy saludables para el niño y aportan diversos nutrientes a su organismo. En el caso de los refrescos se debe evitar a toda costa su consumo ya que no aportan nada al cuerpo además de ser excesivamente calóricas para el cuerpo. Además de ello, son ricas en azúcares añadidos, algo que no es para nada beneficioso para la salud y que promueve el temido sobrepeso dentro de la alimentación infantil.
4. Buena hidratación
Por desgracia son muchos los menores de hoy en día que no beben el agua que deberían y como consecuencia de ello su cuerpo no se hidrata lo suficiente. Es importante el concienciar a los más pequeños de la importancia de beber agua de una manera habitual y depurar al máximo el organismo. Unos 5 o 6 vasos al día son más que suficientes a la hora de mantenerse perfectamente hidratado y eliminar toxinas del cuerpo.
5. Cuidado con los dulces y la bollería industrial
El sobrepeso de gran parte de la población infantil se debe entre otras cosas al consumo excesivo de productos perjudiciales y altamente calóricos como es el caso de las chucherías y los dulces. Los niños de hoy en día están acostumbrados a comer a todas horas productos tan dañinos para la salud como la bollería industrial o las famosas chucherías.
Hay que empezar a corregir dichos hábitos y optar por alimentos mucho más saludablesHay que empezar a corregir dichos hábitos y optar por alimentos mucho más saludables como es el caso de la fruta o los productos lácteos. El consumo de dulces supone una ingesta importante de caloría además de ser bastante perjudicial para la salud en todos los sentidos. A la hora de merendar y en el desayuno es importante el alejarse de dichos dulces y optar por alimentos buenos y saludables para el organismo como es el caso de los cereales o la fruta.
6. Comida casera
Debido al alto nivel de vida de una gran parte de la población, muchos padres optan por la comida preparada para ahorrar tiempo. No es lo mismo un plato precocinado o preparado que una buena comida casera. Es importante por ello el reserva una parte del día a la cocina y poder elaborar platos que sean sanos y nutritivos. El menor lo va a agradecer enormemente y es que no es lo mismo el comerse unos fritos o una pizza precocinada que el poder disfrutar de una buena hamburguesa casera.
Estas son algunas de las claves que debes tener en cuenta a la hora de alimentar a tu hijo. Recuerda que es bastante importante el educar al menor en lo que se refiere a la alimentación infantil y enseñarle unos buenos hábitos alimenticiosdesde que es pequeño. De esta manera es posible acabar de una manera eficaz con los preocupantes datos sobre el exceso de peso en la población infantil. En el caso de que tus hijos se queden a comer en el comedor del colegio es esencial el informarse del menú diario del centro para comprobar si de verdad se trata de una dieta saludable y que aporte los nutrientes necesarios para el organismo del pequeño.