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Cómo solucionar los problemas con la abuela de tus hijos
Cómo solucionar los problemas con la abuela de tus hijos

ABUELA

Cómo solucionar los problemas con la abuela de tus hijos

Si tienes problemas con la abuela de tus hijos, no pierdas detalle de cómo debessolucionar tales problemas

Puede ocurrir que existan ciertos problemas con la abuela de tus hijos, ya sea tu madre o tu suegra. Si tienes que aguantar sus comentarios sarcásticos diciendo lo mal que lo haces como madre/padre es hora de poner límites a esta situación y tener las riendas del asunto. Que sus comentarios hirientes no te hagan sentir mal porque es necesario mantener tu cordura para ser un buen padre o una buena madre.

Con estos consejos podrás poner los límites que necesitas a la abuela de tus hijos y que de esta manera, no se rompa la armonía familiar. Cada uno sabrá el sitio que le corresponde en la estructura familiar.

Cuando critica tus habilidades de crianza

No eres una madre perfecta (o un padre perfecto) pero la abuela de tus hijos acaba de criticar al forma en que crías a sus nietos. Quizá no le gusten tus elecciones sobre disciplina, educación o cómo les peinas. Esto puede hacer que te sientas tenso pero para no comenzar una guerra mundial es mejor saber qué hacer al respecto.

Si tu suegra critica lo que haces tendrás que frenar la conversación. Dile que la forma en la que crías a tus hijos no es de su incumbencia. Las decisiones son tuyas y de tu pareja. Mientras ambos vayáis por el mismo camino es lo que realmente importa.

Puede ocurrir que existan ciertos problemas con la abuela de tus hijos, ya sea tu madre o tu suegraPuede ocurrir que existan ciertos problemas con la abuela de tus hijos, ya sea tu madre o tu suegra

Cuando anula tu autoridad

Quizá tu suegra socava tu autoridad delante de tus hijos y eso sin duda puede ser un problema grande. Quizá no permitas que tu hijo tomen postre porque no se han acabado la comida y tu suegra le dé un helado después de comer... ¿Qué puedes hacer ante esta falta de respeto hacia tu autoridad?

No permitas que tu autoridad se vea socavaba bajo ninguna circunstancia, cuando le digas a tu hijo que no puede hacer algo, sigue hacia adelante con eso. Coge a la abuela de tus hijos y llévala a una estancia apartada y explica que las reglas están pensadas por una razón y tus hijos conoces esas reglas. No tiene que estar de acuerdo con las reglas, pero debe respetarlas.

 Que sus comentarios hirientes no te hagan sentir mal Que sus comentarios hirientes no te hagan sentir mal

Cuando critica la limpieza de tu hogar

Quizá al llegar a tu casa comienza a decirte que hay demasiado polvo o que el lavavajillas está lleno y por qué no limpias de una vez los platos. Es posible que también critique que tienes ropa amontonada en la silla del dormitorio...

Si critica tu hogar debes dejarle claro que es prácticamente imposible mantener el hogar impoluto cuando están los niños en casa. Puedes pedirle que si no le gusta cómo está tu hogar que se puede marchar hasta que tengas tiempo de limpiarla. O también puedes reírte de lo que dice como si no te importase en absoluto sus criticas diciendo algo como: "Ya sabes cómo son los niños". Si limpias o no es tu decisión, quizá eres de las que piensas que el polvo puede esperar pero el jugar con tus hijos, ¡no!

Cuando te hace peticiones

Quizá tu suegra no para de hacerte peticiones o demandas sin importar el tiempo que puedas tener o el cansancio acumulado que llevas encima. También puede ser que quiera que hagas compromisos con ella una y otra vez... O intente controlar ella la foresta de cumpleaños de tu hijo, decir qué tienes que hacer o a quién invitar.

En este caso tendrás que explicar a la abuela de tus hijos en una pequeña reunión qué quieres hacer en concreto o que no puedes atender a las demandas que te exige. Explica que es importante que si necesita algo que debe consultarte primero si puedes o no y no hacer ni exigir la petición sin saber tu disponibilidad o tus circunstancias actuales.

Con estas indicaciones podrás tener una mejor relación con la abuela de tus hijos sin necesidad de que se rompa la armonía familiar.

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