Cuando se pasa por un divorcio no es fácil para nadie, es importante saber que es una transición complicada donde hay muchos sentimientos y emociones encontradas. Cuando una persona que se quería decide divorciarse, no es para nada una decisión sencilla. El divorcio no es fácil para nadie, ni para los padres ni para los hijos.
Una pareja pensó que estarían juntos para siempre y se dieron cuenta de que esa ya no era su realidadEs una transición difícil
Una pareja pensó que estarían juntos para siempre y se dieron cuenta de que esa ya no era su realidad. Desafortunadamente, la vida no siempre sale según lo planeado. Ya sea que hayas sabido por un tiempo que las cosas no estaban funcionando o que fue una sorpresa, el divorcio es difícil y duele. Por supuesto, si tienes un hijo, puede ser aún más difícil.
Incluso aunque sepas que poner fin a tu matrimonio es lo mejor que puedes hacer para todos, no significa que vaya a ser fácil y menso para tus hijos. Es una interrupción de la vida normal en casa y los niños pueden sentirse desorientados, confundidos e incómodos. Por este motivo es importante hacer una buena transición para que sea menos difícil tanto para ti como para tus hijos. Si quieres que esto sea posible no te pierdas los siguientes consejos.
Los niños no tienen la culpa
Los niños deben saber que ellos no tienen la culpa de nada. Cuando decides divorciarte deberás sentar a tu hijo con tu pareja al lado y explicarle que no es su culpa. Aunque es algo obvio para ti, para tus hijos no lo es tanto. Los niños ven el mundo desde una perspectiva más egocéntrica y es necesario que se lo digáis en palabras. Si no, los niños pueden sentirse tremendamente culpables.
Habla con tus hijos con calma
Es necesario que hables con tus hijos desde la calma, debes estar tranquilo/a. Tu y tu ex pareja tendréis que sentaros y hablar de cómo decirle las cosas a vuestros hijos. Ellos necesitarán saber cómo será su vida, con quién pasarán su tiempo, sus días, sus vacaciones, etc. Tus hijos necesitan saber que aún tienen dos padres que les aman y se preocupan por ellos antes cualquier otra cosa. Los niños necesitan seguir sintiéndose seguros en su vida en el hogar.
Asegúrate de que el futuro financiero de los niños es seguro
Si se te ha otorgado la custodia total, tendrás que hablar con tu ex pareja sobre el mantenimiento de los niños. Esto es vital sobre todo si tu ex era quien aportaba el dinero a casa. Es posible que no quieras tener nada que ver con tu ex, pero no debes negarle a tu hijo su seguridad financiera. Los niños cuestan dinero y es necesario tener esto bien cubierto. Si tu ex pareja se niega a pagar el mantenimiento, hay acciones legales deberás tener en cuenta para cambiar esa situación.
Incluso si sientes que tienes la seguridad financiera suficiente para garantizar que tu hijo tenga una vida sana, feliz y libre de estrés, el otro progenitor también debe contribuir a ello. El juez será quien dicta la cantidad que deberá aportar.
Si compartes la custodia con tu pareja, será necesario que tu hijo sepa cuándo estará con uno y con otroLas rutinas son imprescindibles en la vida de los niños
Si quieres asegurarte de que tu hijo está feliz y de que se siente seguro y protegido, lo mejor que puedes hacer es tener una rutina y seguirla. Si compartes la custodia con tu pareja, será necesario que tu hijo sepa cuándo estará con uno y con otro. Los niños siempre deberán saber quién les recoge de la escuela o de las actividades extraescolares. Cualquier error de coordinación con tu ex pareja puede hacer que los niños se sientan desatendidos por los progenitores, teniendo esto, un terrible efecto emocional en ellos.
Es una buena idea imprimir un "calendario familiar" y ponerlo en la nevera. De esta manera, recordarás cuando y con quién deben estar tus hijos dependiendo del día que sea. Esto también ayudará a que tus hijos se adapten a la nueva situación, ya que al principio puede ser difícil para todos.