Mi hijo es homosexual: cómo apoyarle

La homosexualidad es un tema que cada vez está siendo más habitual en la sociedad en la que vivimos. Es algo que siempre ha existido, pero las personas que lo han mostrado solían y suelen ser maltratadas y acosadas. Hoy en día, parece haber mucha más tolerancia y respeto sobre el tema, y es que no es para menos, pues no es más que querer a una persona y demostrarle todo tu amor, independientemente del sexo o raza que sea.

Hoy en día, parece haber mucha más tolerancia y respeto sobre el tema

Sabemos que recibir la noticia de que tu hijo es homosexual puede ser muy duro, sobre todo si has recibido una educación conservadora y tradicional. Por eso, en Bekia te contamos como puedes apoyar a tu hijo si te confiesa que le gustan las personas de su mismo sexo.

La homosexualidad no es algo que se elija

Es algo que algunos niños desde muy pequeños descubren y es todo un proceso. A lo mejor no se dan cuenta en las primeras edades, pero sí en la etapa adolescente cuando empiezan a conocerse más profundamente a sí mismos.

No hay una edad determinada para darte cuenta de que eres homosexual. Simplemente, un día te das cuenta porque empiezas a sentir cosas distintas hacia personas de tu mismo sexo o son cosas que ya sentías pero ahora es cuando estás empezando a entenderte. Esta situación tiene que ser aceptada desde un primer momento, y tu hijo debe sentir que le das la confianza necesaria para poder compartirlo con las personas más importantes de su vida, que es su familia.

Por lo general, vosotros, como padres y madres, no soléis estar preparados para este tipo de situaciones, porque socialmente tampoco está muy aceptado en la actualidad. Sufrís por vuestro hijo por miedo al rechazo de los demás, incluso por miedo al rechazo de determinados miembros de tu propia familia. Debes pensar siempre que la homosexualidad no es algo que se elige, es algo que se siente, y por ello debes apoyar a tu hijo siempre.

Ponte en el lugar de tu hijo

La homosexualidad es algo que, si no se entiende, puede llegar a desequilibrar el bienestar psicológico de tu hijo, y es algo que debes tener presente. Todas las personas merecemos el mismo respeto a nuestra identidad, a nuestros roles, a nuestra forma de ser y por supuesto, a nuestra orientación sexual.

Piensa que el hecho de poder gustarte una persona de tu mismo sexo es algo que podría haberte pasado a ti perfectamente, que es algo que no controlas y que lo que más necesitarías en ese momento es el apoyo de tus seres queridos. Deja atrás aquellas partes de las creencias religiosas que te impiden comprender a tu hijo. Al fin y al cabo, lo que él siente es amor hacia una persona y, sea del mismo sexo o no, no tiene absolutamente nada de malo.

Para tu hijo, es de suma importancia sentirse comprendido y apoyado. Para él no debe ser fácil afrontar esa situación, porque seguramente ni él mismo entienda qué es lo que le ocurre y cuál es la mejor manera de sobrellevarlo. Así, tu hijo sentirá un gran alivio si siente que puede confiar en sus seres queridos, y evitarás que esta situación pueda desencadenar en graves problemas como la depresión o la adicción.

Si te cuesta mucho trabajo apoyar a tu hijo, acude a terapia familiar

Como venimos diciendo, el hecho de que tu hijo se sienta apoyado es fundamental. Si no puedes darle tu apoyo porque no comprendes su situación, acude a un especialista para que os ayude, tanto a él para expresar lo que siente como a ti para que lo comprendas.

Puedes pensar que tu hijo va a ser otra persona por el hecho de ser homosexual, pero esto no es así. Tu hijo seguirá siendo la misma persona de siempre. El hecho de que le gusten unas personas u otras no implica que su personalidad se vea afectada.

Si tu problema es el qué dirán, procura centrarte más en la comprensión de tu hijo que en la aceptación que tengan los demás hacia a él, porque lo que verdaderamente le va a importar es que lo comprendan sus seres queridos.

as personas homosexuales suelen ser víctimas de estereotipos

Al fin y al cabo, el problema de la homosexualidad se resume en una falta de valores tales como el respeto y la tolerancia en las personas. Las personas homosexuales suelen ser víctimas de estereotipos, discriminación, acoso y hasta violencia por su orientación sexual, y es algo absurdo, lo único que ocurre es que le gusta una persona de su mismo sexo, y no tiene nada de malo.

Para evitar situaciones de este tipo, se debe educar desde las primeras etapas de la infancia en esos valores de respeto, diversidad y tolerancia para que, cuando crezcan, perciban la situación como algo normal y no recurran al acoso y a la discriminación.