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Lo que quiero que mis hijos sepan sobre el amor verdadero
Lo que quiero que mis hijos sepan sobre el amor verdadero

HIJOS

Lo que quiero que mis hijos sepan sobre el amor verdadero

Cuando eres madre el amor verdadero lo tienes fuera de tu cuerpo, es tu amado hijo/a y te llama "mamá"

Para muchos encontrar el amor verdadero es una utopía y para otros, es el sentido de la vida. Si sientes el amor en tu corazón y tienes hijos, quizá te preguntes si algún día alguien le romperá el corazón, y si ocurriese, ¿qué puedes hacer tú al respecto? En ese momento no podrás hacer mucho, pero ahora, mucho antes de que suceda, sí puedes hacer más de lo que te imaginas.

El amor es lo más hermoso que podemos sentirEl amor es lo más hermoso que podemos sentir

El amor es lo más hermoso que podemos sentir, pero también nos hace vulnerables al dolor emocional. Cuando se siente el amor verdadero te vuelves frágil... Aunque sentirlo es tan maravilloso que los contras parece que no son motivos suficientes como para negarse a él.

El amor de los hijos

Cuando eres madre el amor verdadero lo tienes fuera de tu cuerpo y te llama "mamá". No hay amor más profundo y maravilloso que el amor que siente una madre por sus hijos y viceversa. Cuando la relación es sana y se cuida, es el vínculo más fuerte que existe en todo el universo. Antes de tener hijos tienes la opción de "cerrarte" al amor para no sufrir, pero, cuando tienes hijos... tu amor estará atados a ellos para siempre.

Antes de ser madre es posible que te preguntases cómo tu madre podría saber que lo que sentía por ti realmente era amor verdadero. No lo entendías, pero ahora que eres madre, lo sabes. LO sabes sin palabras porque se siente fuerte en el corazón.

Sabes que es el amor verdadero

Sabes que es el amor verdadero porque se siente exactamente como lo imaginaste y nada como lo esperabas al mismo tiempo. Como cuando te tiemblan las rodillas cuando te pones de pie en el altar el día de tu boda, mirando a los ojos a tu pareja.  Declarando frente a ti y al mundo que promete compartir su vida contigo.

También sabrás que es el amor verdadero  porque no importa cuán aterrador parezca hacerlo, la idea de no hacerlo se siente aún peor.  Como cuando te sientas frente a tu pareja en una cafetería, le aprietas la mano y le dices: "¿Realmente estamos haciendo esto?¿De verdad lo hacemos? Y los dos decís: "SÍ".

También sabrás que es el amor verdadero porque los colores de tu alrededor se vuelven más brillantes y sentirás el mundo con más claridad. Como cuando ves en la prueba de embarazo que es positivo en la madrugada y vas corriendo a despertar a tu pareja para compartir ese momento tan emocionante e intenso juntos.

Sabrás que es amor verdadero cuando el tiempo vuela... cuando a su lado una hora son dos minutos. Cuando no puedes esperar más para abrazarle y decirle que le quieres. Como cuando tus hijos van de excursión todo el día y echas de menos el ruido de los juegos, sus interrupciones cuando hablas con otros adultos y cuando llega la hora, vas corriendo como alma que lleva el viento porque solo quieres verle y abrazarle, ¡para comerle a besos! El tiempo al lado de alguien que amas pasa volando, pero no estar a su lado parece que el reloj se detenga.

Una vida llena de amor es rica e incalificable en todas sus maravillasUna vida llena de amor es rica e incalificable en todas sus maravillas

El amor verdadero también se reconoce porque aunque el cuerpo esté cansado y tu cerebro agotado porque necesita dormir, te preguntas por qué tomaste las decisiones que has tomado en tu vida... No sabrás si estarás haciendo lo correcto o si otros caminos hubieran sido más acertados. Pero ocurre como cuando se mira la sonrisa de un hijo, cuando ves su rostro piensas: "todo ha merecido la pena, tomaría las mismas decisiones una y otra vez solo por ti... tu eres mi 'por qué'".

Lo que tienes que decirles a tus hijos

Lo que tienes que decirles a tus hijos es que no tengan miedo de dejar entrar el amor verdadero a sus vidas. El amor siempre llegará con la posibilidad de causar dolor... requiere compromiso y enfrentarse a la incertidumbre, requiere trabajo, comunicación, sacrificio y mucha empatía... Pero merece la pena.

Una vida llena de amor es rica e incalificable en todas sus maravillas. Incluso cuando es difícil. Incluso cuando termina en desamor (y a veces lo hará). Incluso cuando te asusta (y a veces lo hará). Incluso cuando te hace sentir expuesto o desplazado. Incluso cuando has sido lastimado antes. Incluso cuando parece que sería más fácil no hacerlo... Incluso con todo esto en cuenta, merece la pena y cuando se siente el amor, esto, se sabe.

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