A partir del cuarto y quinto mes de embarazo se desarrolla el aparato auditivoEl embarazo, lo que siente el feto durante la gestación y lo que puede ser beneficioso o no para el desarrollo del futuro bebé han dado lugar a mil y una leyendas y creencias con mayor o menor fundamento. Una de ellas es la relacionada con los beneficios que aporta ponerle música al bebé mientras aún está en el útero de la madre.
¿Es cierto o una fantasía? Si es verdad, ¿qué beneficios aporta? ¿Realmente supone una diferencia? ¿El bebé puede llegar a oír lo que hay en el exterior? ¿Qué tipo de música es más beneficiosa y por qué? ¿De verdad fomenta la relajación? Como veis, son muchas las interrogantes que existen al respecto, así que vamos a tratar de dar respuesta a todas ellas en este artículo.
Beneficios y estímulos
Para comprobar si es beneficioso que el bebé escuche música cuando está en el vientre materno no hay nada como tirar de estudios y pruebas, más allá de que cualquier embarazada pueda probarlo y ver cómo reacciona su hijo. Todos ellos indican que así es, que no solo tiene una repercusión positiva, sino que estimula al bebé y favorece su relajación.
La música clásica, incluso temas infantiles, son lo más recomendado puesto que tienen la capacidad de calmar al bebé. Si por el contrario se opta por estilos de música como el rock o el heavy se puede conseguir el efecto contrario, alterar y poner nervioso al bebé. Aunque también es cierto que el bebé se acostumbra a los ruidos que oye de manera más continua por lo que ciertos temas que podrían parecernos estridentes podrían tener efectos beneficiosos en él porque está familiarizado con ellos.
Escuchar música relaja a la madre y transmite esa sensación al bebéSi los padres escuchan habitualmente música es fácil que el bebé acabe por identificar esos sonidos y favorezcan su relajación. La madre tampoco tiene que cambiar sus gustos musicales por el embarazo. Si lo que se busca es música concreta para él nada mejor que temas clásicos y repertorios infantiles. Incluso las nanas cantadas por sus padres, para que se familiarice con sus voces. La música no solo sirve para relajar al bebé, no debemos olvidarnos de la madre. Todo lo que ella sienta se lo transmite a su hijo debido a la conexión que existe entre ello s. Así que si escuchar música la calma esa tranquilidad la transmitirá al pequeño y ambos disfrutarán de la relajación.
Cuándo poner música al bebé
El bebé está conectado con su madre desde que el feto empieza a formarse, aunque es cierto que el desarrollo auditivo no se da hasta el cuarto o quinto mes de embarazo. Es entonces cuando empieza a ser consciente de los ruidos que hay a su alrededor. Será en ese momento cuando empecemos a ponerle música.
¿La mejor hora para hacerlo? A última hora de la tarde o ya por la noche. Es cuando el bebé reacciona mejor a los estímulos y también es el mejor momento para la relajación, cuando el día está llegando a su fin y se puede disfrutar de cierta tranquilidad. Ya comentamos que si está familiarizado con determinados temas o sonidos estos pueden llegar a calmarlo cuando salga al mundo exterior. Así que es bueno tener un repertorio habitual, que nos servirá meses después para hacer que se sienta en calma.
¿El bebé escucha la música?
El bebé desarrolla el sentido auditivo, pero mientras está en el útero materno no escucha igual que lo hacemos el resto de personas. Los percibe, pero no claramente. Además, lo que mejor escucha son los sonidos que provienen de la madre, como el latido del corazón de la madre, que meses más tarde servirá para tranquilizarle.
Los sonidos que provienen del exterior están amortiguados y parecen lejanos. Aun así son perceptibles y es fácil notar como el bebé responde a ellos mediante movimientos o patadas. Es por ello que además de ponerle música de manera regular se recomienda a los padres que hablen a la barriga, para que el bebé se acostumbre y reconozca su voz.
Podemos escuchar música mientras conducimos para que el bebé también la sientaHay que tener en cuenta que está en el vientre materno y, además, rodeado del líquido amniótico, lo que supone que no escucha las voces, los ruidos o la música con total claridad. Están amortiguados, por lo que solo escuchará los que tiene muy cerca o suenan muy fuerte.
Cómo poner la música
Por lo que acabamos de comentar sobre cómo percibe el bebé los sonidos, a la hora de ponerle música hay que pensar cómo hacerlo. Hemos visto imágenes de madres que colocan los auriculares en la barriga para que las notas lleguen de la forma más directa al bebé. Es un buen sistema, pero no tiene porque ser el único.
Si ponemos la música en el coche mientras conducimos o en casa mientras disfrutamos de un momento de relajación al bebé le llegarán los sonidos y también la sensación de calma que le transmite su madre, con lo que el efecto será doblemente beneficioso.