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Cómo enseñar a los niños a debatir
Cómo enseñar a los niños a debatir

DEBATIR

Cómo enseñar a los niños a debatir

Aprender a debatir es una necesidad para tener habilidades de comunicación asertivas que llevarán a tu hijo a tener éxito en sus relaciones interpersonales.

Aprender a debatir es una habilidad que servirá a los niños para toda la vida. Aprenderán a expresar sus opiniones respetando el turno de palabra y sobre todo, respetando a los demás. Porque los pensamientos de los demás deben ser respetados aunque no se compartan. Debatir y discutir aspectos desde el respeto y la calma es fundamental para poder alcanzar el éxito en la vida, tanto a nivel profesional como laboral.

Aprender a debatir es una habilidad que servirá a los niños para toda la vidaAprender a debatir es una habilidad que servirá a los niños para toda la vida

Habilidad valiosa

Como te hemos comentado más arriba, poder debatir y discutir un punto es una habilidad que es valiosa en muchos aspectos de la vida. Incluso es beneficioso para los niños aprender este tipo de habilidad a una edad temprana. Esto les permite convertirse en mejores debatidores a medida que pasa el tiempo y les ayuda a aprender cómo expresar con precisión sus pensamientos y opiniones.

A continuación vamos a comentarte algunos consejos para que enseñes a tus hijos a debatir. Sin duda, serán unas habilidades que le servirán en el presente y en el futuro. Aunque si tú no te consideras una persona que sepa debatir muy bien, recuerda que tu ejemplo es lo más importante... así que céntrate primero en aprender a debatir en los momentos adecuados para que tus hijos también aprendan con tu ejemplo.

Crear y apoyar una conversación

Enseña a tus hijos a crear y apoyar una conversación. Si son jóvenes, probablemente sea mejor que hagas que trabajen con un puesto con el que estén de acuerdo en lugar de asignar un tema y un puesto. Toma un tema fácil "correcto o incorrecto" para empezar a debatir. Pregúntale al niño si cree que está bien o mal y luego pídeles que escriban por qué se sienten así.

Asigna puntos principales

La mejor manera de hacer que cualquier debatiente se sienta seguro es hacer que se sienta preparado. Debe hacer que el niño presente todas las razones por las que cree que su posición es la correcta y luego elegir lo mejor y lo más importante de ellos. Pídeles que ordenen sus argumentos comenzando por el que más les convenga. Explica que necesitan escribir su punto como una declaración y luego explica por qué con evidencia de apoyo.

Crea declaraciones opuestas

Crea declaraciones opuestas haciendo que el niño enumere las razones por las cuales su posición puede ser incorrecta para otras personas. Por ejemplo, si están discutiendo en contra de la pelea, pídeles que consideren situaciones en las que puedan encontrar aceptable este comportamiento. Esto traerá algunos argumentos opuestos como la defensa propia. Esto ayuda a prepararlos para responder a los argumentos e incluso puede ayudar a fortalecer sus puntos principales.

Enseña lenguaje corporal

Aprender lenguaje corporal es fundamental para poder debatir con otras personas porque se puede saber qué piensan sin que digan nada. Además, ellos mismos también pueden transmitir mucho con su lenguaje corporal. Haz hincapié en que siempre deben mantener el contacto visual y mantener una buena postura. Hazles saber que se motiva la conversación con los gestos ocasionales con las manos y que deben evitar mantener las manos a los lados.

Es importante que los niños aprendan a cómo proyectar su vozEs importante que los niños aprendan a cómo proyectar su voz

Proyectar la voz

Es importante que los niños aprendan a cómo proyectar su voz y también a cómo incorporar correctamente las pausas en su discurso. Desalienta las oraciones largas y el hablar rápido... en cambio, es necesario recompensar una voz bien proyectada, fuerte y con confianza.

Qué no debes olvidar

Una cosa muy importante para enseñar a los niños pequeños a aprender a debatir es también ayudarlos a aprender a expresar su propia opinión con respeto y a no enfadarse para expresar sus puntos. Un argumento fuerte siempre será más efectivo que simplemente derribar a la oposición.

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