El desarrollo biosocial en los bebés se refiere a cómo los pasos sociales de tu pequeño interactúan y se corresponden con su crecimiento biológico. Algunos órganos crecen más rápido que otros.
Por ejemplo, el cerebro, que controla otros órganos corporales, es apenas un cuarto de su tamaño potencial al nacer; el cerebro crece a un impresionante 75 por ciento de su tamaño completo a los 12 meses. A medida que tu bebé madura biológicamente, está mejor equipado para participar en interacciones sociales cada vez más complejas.
Qué significa esto
La herencia, el medio ambiente y la nutrición entran en juego cuando se trata del desarrollo físico del bebé. Los bebés siguen un patrón de desarrollo predecible; miran antes de sonreír, ruedan de un lado a otro antes de gatear, emiten sonidos arrulladores antes de decir palabras y caminan antes de correr.
Los efectos reconfortantes y estimulantes de hablar con tu bebé en un tono agudo y amoroso, usar un toque suave y bañar a tu bebé con muchos abrazos y besos funcionan para alentar el crecimiento y el desarrollo.
El desarrollo neurobiológico
El desarrollo neurobiológico no recibe todo el crédito por el crecimiento cognitivo de un bebé a pesar de que las conexiones neuronales relacionadas con el sistema nervioso permiten que las entradas sensoriales entren en contacto con el cerebro.
La teoría piagetiana apoya la idea de que los bebés construyen una comprensión del mundo mediante la coordinación de experiencias sensoriales que incluyen oír, ver y hablar. La teoría piagetiana fue desarrollada por Jean Piaget alrededor de 1920. Su teoría incluye conceptos de lenguaje, memoria, desarrollo moral y razonamiento científico.
El progreso social de un bebé está interconectado con otras áreas de su desarrollo. Por ejemplo, el desarrollo del lenguaje depende de la aptitud cognitiva. Los padres y cuidadores desempeñan un papel fundamental en el apoyo al crecimiento cognitivo de un bebé al proporcionar experiencias interpersonales o socioemocionales saludables en las que se desarrolla el desarrollo cognitivo.
Visión y socialización
La visión de un bebé es borrosa al nacer, pero parece concentrarse unas semanas más tarde. Los bebés pequeños pueden ver claramente los objetos que se encuentran a unos 5 cm de distancia. A medida que la visión de un bebé se vuelve más centrada, puede preferir mirar las caras, que tienen una variedad de miradas interesantes como fruncir el ceño y sonreír, lo que las hace mucho más atractivas que mirar objetos estáticos.
Un niño de 2 meses pasará más tiempo mirando una cara sonriente que una inexpresiva. A los 3 meses, un bebé se vuelve aún más interesado y entretenido por las expresiones faciales de un adulto.
Audiencia y desarrollo social
Como los bebés nacen con la capacidad de escuchar, naturalmente vuelven la cabeza en la dirección del sonido. Los bebés tienden a llorar cuando se sienten alarmados por los ruidos fuertes. Al mismo tiempo, el suave sonido de un latido o una voz suave que canta una canción de cuna es reconfortante para un bebé.
Un recién nacido de 3 semanas de vida puede notar la diferencia entre las voces de sus padres y sabe cuándo hay una voz extraña dentro del oído. Un niño de 4 meses se divierte a sí mismo y a quienes lo rodean con sonidos de balbuceo. También se vuelve más consciente de tu tono de voz y sus implicaciones. A los 12 meses, tu bebé debería decir algunas palabras como "mamá" y "papá" y gritar "¡Uy!" y "oh-oh".
También intentará imitar palabras en su búsqueda continua para comunicarse de manera más efectiva... Aunque si tu bebé no ha comenzado a hablar a los 12 meses, no te preocupes demasiado porque cada niño tiene su propio ritmo evolutivo y de aprendizaje, aunque si tienes dudas, llévale al pediatra para que le comentes tus inquietudes.