Personajes de series que te ayudarán a ver la paternidad y maternidad de otra forma

A ser madre o padre no enseña nadie; los niños no vienen con un manual debajo del brazo, no explican cómo se debe trabajar con ellos, cuáles son los cuidados que requieren. Por eso los padres primerizos suelen sufrir tanto, porque no saben a qué atenerse. Todo es nuevo, y las cosas nuevas suelen poner en una situación de estrés bastante alta. Si encima eso incluye la figura de un bebé que necesita constantemente de cuidados, la situación empeora.

Aunque ser padre o madre no es difícil solo cuando el niño es un bebé. Al ir creciendo, irán teniendo necesidades totalmente distintas, que probablemente no se conozcan de antemano. Los adolescentes, por ejemplo, pasan por etapas de cambio muy pronunciadas que no será fácil entender. Tendrán cambios de humor, podrán ser irascibles, se rebelarán... Pero es lo natural. Están únicamente buscando su espacio, tratando de encontrar qué de toda su vida es realmente suyo. Y para eso necesitan romper vínculos con todo lo que les recuerda a su niñez, al menos a ratos, para así poder sentirse un poco más independientes. No es malo, ni mucho menos, siempre y cuando sepa cómo llevarse.

Si todo esto tuvieras que aprenderlo por tu cuenta, sin que nadie te sirviera de ejemplo, sería extremadamente complicado. Pero, por suerte, para eso están el cine y las series de televisión, cuyos personajes nos enseñan cómo ser padres o madres... O cómo no serlos, claro. Los ejemplos no siempre tienen que ser positivos para que nos aporten. Es justo eso de lo que vamos a hablar hoy, d e padres y madres de las series de televisión que nos han enseñado a ver la paternidad y la maternidad de una forma totalmente distinta. Con menos agobios, con menos preocupaciones, o con un poco más de responsabilidad, dependiendo del caso en cuestión. ¿Quieres echar un vistazo a los personajes que te cambiarán la vida?

1. 'Malcolm in the Middle': Hal y Lois

Hal y Lois, de Malcolm in the Middle

Seguramente alguna vez hayas visto ' Malcolm in the Middle ', una serie que se estrenó en el año 2000 y se alargó hasta el año 2006. En Estados fue famosa, pero en España lo fue casi aún más; se emitía en Antena 3 todas las mañanas, y los que por esa época eran niños o adolescentes han crecido viéndola.

Hay dos personajes de esta serie que deben ser tomados como referencia para cambiar la imagen de padres y madres que tenemos. El primero de ellos es Hal, el padre de Malcolm, Reese, Francis, Dewey y Jamie. Es el ejemplo de todo lo que un padre no debe ser y, a la vez, el ejemplo vivo de lo que un padre puede llegar a aportar. Torpe, más preocupado por sus aficiones que por sus hijos y, aún así, capaz de pelearse con cualquiera para defender a sus pequeños. El claro ejemplo de lo que no se debe ser como padre. Tal es su forma de desentenderse que su esposa, Lois, se ve obligada a estar constantemente en tensión para cuidar de toda la familia.

Lois fue muy criticada en su momento, tachada de madre histérica, de exagerada. Pero realmente, si analizamos este personaje más allá de sus gritos y castigos, es fácil entender por qué siempre estaba tan preocupada. No, no era ninguna "histérica", simplemente tenía demasiada responsabilidad sobre sus hombros. Tenía cinco hijos y ella era la única que realmente miraba por ellos; demasiadas obligaciones, y muy poco tiempo para sí misma. Cualquiera así perdería los estribos en alguna ocasión. Una madre coraje, nunca mejor dicho, que hace que te replantees hasta qué punto te renta tener hijos realmente al verla sufrir tanto y tener tan poca ayuda por parte de Hal.

2. 'Modern Family': Cameron Tucker y Phil Dunphy

Cam, de 'Modern Family'

Si hay un personaje en televisión que ahora mismo sí que sirve como ejemplo de todo lo que un padre debería ser, es Cam Tucker. Su dulzura, lo atento y cariñoso que es con su hija, es una clara muestra de lo que la paternidad debería significar para todos. No pierde su personalidad y su vitalidad al tener una niña, sino que continúa siendo él mismo, y dando todo lo que tiene por aportar a su pequeña.

También de 'Modern Family', hay otro personaje capaz de transmitir lo que un padre debe ser, o debe intentar, al menos. Y es Phil Dunphy, que aunque a sus hijos pueda parecerles un "pringado", o una molestia en algunas ocasiones, llegará un momento en el que cambiarán de parecer. Se esfuerza día sí y día también por forjar vínculos con sus hijos, queriendo ser el mejor padre que ellos pudieran desear; pese a que a veces no termina de conseguirlo del todo, lo cierto es que ellos lo valorarán siempre. Y eso es algo que también podría pasar en la vida real.

3. 'Las chicas Gilmore': Lorelai

Lorelai y Rory, de 'Las chicas Gilmore'

Lorelai Gilmore fue una madre adolescente a la que no le quedó más remedio que crecer demasiado rápido, adaptándose como pudo a la nueva situación. Tuvo que trabajar día y noche, de forma incansable, para así poder darle a su hija absolutamente todo lo que pidiera; educó a Rory en el respeto hacia los demás, en la educación por encima de todo. Crió ella sola, con tan solo dieciséis años, a una niña, y consiguió salir adelante sin ayuda de nadie. Pese a que sus padres tenían dinero como para mantenerlas a las dos, ella no quiso. Cogió el toro por los cuernos, y decidió que iba a darle a su hija la mejor vida posible.

A esto hay que sumarle que Lorelai no solo es madre de Rory, sino que es su mejor amiga. Quizás la poca diferencia de edad, o el carácter tan risueño de la madre, les lleva a ser el dúo madre e hija más bonito de toda la televisión.

4. 'Mujeres desesperadas': Lynette Scavo

Lynette, de Mujeres desesperadas

Lynette Scavo, una de las protagonistas de 'Mujeres desesperadas', es también una figura de maternidad que todo el mundo debería tener en cuenta. A lo largo de toda la serie, Lynette dejó de trabajar por sus hijos, y luego comenzó a trabajar precisamente por lo mismo; fue una mujer emprendedora, capaz de montar una pizzería y, a la vez, superar una traición por parte de su marido. Y todo esto sin dejar de ocuparse al completo de sus cuatro hijos.

Lynette también sufrió cáncer, pero eso no la hizo desistir. Tuvo fuerza para llevarlo todo adelante, sin rendirse, sabiendo que era por sus hijos por los que tenía que luchar. De nuevo, un ejemplo de madre coraje.