Antes de adentrarnos en el mundo de las bebetecas, hay que saber qué son en concreto. Y es que a las bebetecas se les conoce como las bibliotecas infantiles, aunque claro, con diferentes matices. Se podrían definir como el servicio de atención especial para la más pequeña infancia, es decir, bebés y niños de cero a seis años. Bebeteca es un término que se acuñó durante la 5ª Conferencia Europea de Lectura celebrada en Salamanca en el año 1987. A partir de este año se le puso nombre a la biblioteca de los más pequeños y en ella, numerosos bebés y niños, aprovechan su primera etapa del desarrollo infantil para potenciar su creatividad e imaginación.
En este espacio se incluyen libros escogidos para los más pequeños, préstamos para el alquiler de los mismos y charlas periódicas que ayudan a sacar el máximo partido a las bebetecas. Añadiendo, por si fuera poco, asesoramiento y atención constante por parte de los profesionales hacia los usuarios. Cabe destacar que se encuentran en multitud de lugares, pero suelen ser frecuentes en las escuelas, guarderías, bibliotecas municipales e incluso en casa.
Este tipo de espacios hace que los niños conviertan los libros en objetos cotidianos con los que consiguen aprender y jugar cada día, consiguiendo así un desarrollo intelectual y afectivo, y contribuyendo asimismo a la comunicación entre padres e hijos mediante un canal fundamental: el arte y la literatura.
Este tipo de espacios hace que los niños conviertan los libros en objetos cotidianosCómo son las bebetecas
Las condiciones generales y básicas que deben tener las bebetecas son muy simples. En cuanto al espacio, este debe ser agradable y cómodo; tanto para los más pequeños como para los más mayores, con un ambiente capaz de representar a los bebés y niños para incrementar así la interactividad con los libros y padres. Todo debe estar al alcance de ellos, siendo imprescindible la visibilidad y la accesibilidad. Esto hace que los niños puedan divertirse de manera autónoma.
Es recomendable que se eviten interferencias acústicas que impidan el silencio y su concentración, al igual que es necesario implementar las normas habituales de una biblioteca. Al fin y al cabo, se trata de un espacio donde se quiere conseguir la paz para encontrar el sentido al contenido de los cuentos, ya sea leyendo, mirando, escuchando o compartiendo su argumento. Las bebetecas no solo son libros, y por lo tanto se sugiere que tengan una amplia gama de material que permitan distintas actividades más allá de ver y leer cuentos : ver y representar obras de teatro, dibujar, representar títeres, etc.
Es preciso señalar que cada bebeteca tiene sus aspectos que la diferencian de otra, pero cuanto más recursos ofrezcan, siempre será mejor. En algunas de ellas también se realizan concursos de cuentos escritos por los niños, lo que hace que ejerciten su imaginación, lenguaje y cultura. Este tipo de concursos pueden derivar en otro tipo de actividades, como la plástica y las manualidades, entre otras. En ocasiones, las bebetecas también tienen espacio para la proyección de películas adaptadas a los gustos más relevantes de la infancia.
Es preciso señalar que cada bebeteca tiene sus aspectos que la diferencian de otraEl contenido de los libros
En el periodo de tiempo de los niños que van de cero a seis años, los libros facilitan el reconocimiento con lo más cercano: su casa, sus padres, sus primeros amigos, juguetes, etc. En cuanto a los contenidos de los libros, e s mejor si son de tamaño pequeño y con diferentes texturas, e incluso se aconseja que contengan juguetes para llamar su atención, como sonidos, por ejemplo.
El argumento de los cuentos ha de ser acorde a la edad de cada uno. No está de más que hayan de diversos argumentos y modelos. Por ejemplo, a los bebés de tres años o menos les atraen más aquellos libros que son atractivos y coloridos. El argumento de estos debe ser simple con la temática más parecida a su realidad.
Sin embargo, en el intervalo de los tres a los seis años y por norma general, los niños empiezan a interesarse por otro tipo de temas que se acercan a la ficción y a la fantasía, aunque también aquellos que tratan de animales con personajes humanizados. Su trama también debe ser sencilla, y si en ella pueden participar, todavía mejor.
Bebetecas en bibliotecas
Varios son los ejemplos en los que podemos encontrar bebetecas inmersas en bibliotecas para los más mayores. Muchas de las bibliotecas municipales también guardan un espacio para los más pequeños. Esto contribuye a que los más mayores; padres, madres, e incluso hermanos y hermanas, puedan dedicar parte de su tiempo a sus estudios mientras que los niños y bebés están en la bebeteca. Barcelona y Madrid son un claro ejemplo de ello, es decir, son ciudades en las que las bibliotecas cuentan con espacios y secciones dedicados a los más peques, algo que cada vez parece más común y más cómodo.
Por qué son importantes
Estos espacios cada vez tienen más presencia en niños y bebés. Y no solo las bebetecas, sino también los centros educativos y de entretenimiento ajenos al ámbito escolar. Cada uno de estos espacios cuenta con profesionales de la pedagogía que tienen las habilidades capaces de fomentar el aprendizaje de los niños mediante la diversión y el entretenimiento.
Sus múltiples beneficios ofrecen y promueven el desarrollo de los niños en su infancia. Las actividades que se realizan en las bebetecas desarrollan la capacidad motriz e intelectual de los niños en pleno desarrollo. Recordemos que en estas edades se es como una esponja, y todo lo aprendido es un añadido al conjunto de todos sus conocimientos.
Por otro lado, el hecho de que la enseñanza esté presente en el ámbito lúdico, favorece la inquietud y curiosidad del niño, factores que influyen positivamente en su vida, implementando la iniciativa, exploración y emprendimiento.
Como vemos, las bebetecas, al igual que otro tipo de centros para el aprendizaje lúdico de los niños, son centros ideales para que ellos aprendan y disfruten al mismo tiempo en espacios ajenos al del hogar, haciendo mejorar sus cualidades motoras e intelectuales, a la vez que conocen a otros niños también interesados por lo mismo.
Por si fuera poco, estos centros también ayudan a una mejor planificación por parte de los padres, que pueden estar presentes en las bebetecas; contribuyendo y formando parte del desarrollo de los niños y bebés; o por el contrario, utilizarlas como un espacio de su tiempo en el que hacer otras labores mientras sus hijos se encuentran en un lugar seguro en el que aprovechan el tiempo para crecer como personas y adquirir conocimientos y estímulos que seguro que les serán útiles para su propio futuro.
Estos centros también ayudan a una mejor planificación por parte de los padres¿Dónde podemos encontrarlas?
En casi todas las ciudades, por no decir en todas, podemos encontrar bebetecas, pero es cierto que las que se encuentran en Madrid y Barcelona han sido pioneras en construir estos espacios para los niños. Y es que la capital de España alberga cantidad de este tipo de espacios. Ahora vamos a repasar alguno de los más populares.
La bebeteca de la Casa Encendida es una de ellas. Abre los sábados y domingos, y en ella podemos encontrar libros infantiles, puzzles de suelo y hasta juegos de mesa. Su mobiliario está adaptado para pasar un rato divertido y desarrollar la lectura desde una temprana edad. Contiene las características básicas de una bebeteca junto con la de una ludoteca, logrando un espacio híbrido.
Otra de las bebetecas más conocidas en Madrid es la de Mario Vargas Llosa, que a diferencia de la anterior, solo abre entre semana. Se encuentra en Malasaña, en el pleno centro de Madrid. Forma parte del antiguo mercado de Barceló, y es una sala acristalada pensada para que los pequeños de cero a seis años tengan su propio espacio para disfrutar de la lectura en un ambiente agradable.
La última de las bebetecas más recomendadas de la capital española es la del Centro Cultural Conde Duque. En ella tienen, además, talleres bilingües infantiles para niños un poco más mayores (de seis a nueve años).
En Barcelona, las bebetecas más aconsejadas son aquellas que se encuentran en el complejo de las bibliotecas municipales. Una de las más famosas es la de Les Corts Miquel LLongueras. Esta cuenta con un área infantil para un rango que oscila entre los cero y catorce años de edad. Además de libros, en ella se pueden encontrar DVD, CD, revistas, juegos de ordenador y mucho más. Para los niños de cero a tres años tienen actividades especiales en un espacio bautizado bajo "Petits Lectors".
Otra famosa bebeteca es la perteneciente a la biblioteca de Bon Pastor. En ella tiene cabida una sala infantil de grandes dimensiones en la que se puede leer, ver películas, escuchar música,etc. Su rango de edad va de los cero a los catorce años, y dentro de sus actividades se encuentra el programa "Primeres passes", que familiariza a los bebés con el mundo de los libros desde los primeros años de vida. Actividades como espectáculos, audiciones musicales o talleres que invitan a los más pequeños a mirar, tocar y escuchar.
Para terminar, la biblioteca Ignasi Iglesias - Can Fabra cuenta con una bebeteca cuya sala cdispone de todo tipo de recursos para las edades que van de los cero a los catorce años. En ella tiene presencia materiales para todas las edades de este intervalo, haciendo más accesible la lectura según la edad de cada bebé o niño.