La resistencia pasivo-agresiva es cuando los niños aprenden a desarrollar poder sobre ti al resistirse. Es lo opuesto a la agresión: en lugar de amenazarte o gritarte, un niño pasivo-agresivo simplemente no te responde. Te ignora para tener control sobre ti. Los niños pasivo-agresivos generalmente no saben cómo comunicarse bien o resolver los problemas asociados con la ira, la frustración o la ansiedad. Mientras que algunos niños con trastornos de conducta se enfadan y actúan, niños pasivo-agresivo se enfadan pero no actúan visiblemente.
Nos nos referimos a personalidades pasivas, nos referimos a comportamiento pasivo resistente para que te sientas mal, para que te controlen o sientan que tienen poder sobre ti... o también, para evadir responsabilidades. Así piensa un adolescente pasivo agresivo: "No quiero hacer lo que mamá quiere que haga, pero no la confrontaré. No le haré caso hasta que me deje tranquilo". Si te frustras y le gritas, él gana porque has perdido el control y él no.
Los padres deben estar al tanto de este tipo de comportamientoAl resistirse a ti, tu hijo te está entrenando para que te rindas y le dejes en paz. Te está entrenando para que creas que no puedes hacerlo. Te está haciendo bajar tus expectativas para que esperes menos de él. Y la verdad es que la resistencia pasiva a menudo funciona.
Indefensión aprendida
Los padres deben estar al tanto de este tipo de comportamiento. Hay un concepto en el campo de la salud mental llamado indefensión aprendida que es muy importante que los padres entiendan. La indefensión aprendida es donde los niños aprenden que si actúan de esta manera, alguien hará el trabajo por ellos. Aprenden que si resisten el tiempo suficiente, tú mismo lavarás los platos. Si no te responden cuando los llamas, subirás las escaleras o sacarás la basura.
Poco a poco, tus expectativas se reducen hasta que ya no tienes expectativas. Pero ten en cuenta que una vez que haces esto, solo está preparando a tu hijo para el fracaso. La infancia y la adolescencia es el momento en la vida de tu hijo cuando necesita crecer y aprender.
Si le liberas con pocas responsabilidades, simplemente no obtendrá las habilidades que necesita para pasar a la edad adulta... están cavando un agujero del cual les resultará muy complicado salir.
Aborda el comportamiento y establece expectativas realesCómo controlar el comportamiento pasivo agresivo de los hijos adolescentes
No te pierdas algunas formas de controlar el comportamiento pasivo agresivo de tus hijos adolescentes:
Aborda el comportamiento y establece expectativas reales. Si crees que tu hijo está siendo pasito agresivo porque se enfada y no expresa sus sentimientos, habla sobre ello, puedes decirle algo como: "Si estás enfadado por algo, puedes hablar conmigo" o "Está bien si te sientes enfadado o asustado, pero continuar con este comportamiento no resolverá el problema. Háblame. Intentaré entenderlo. Pero espero que hagas el trabajo, estés enfadado o no".
Los padres también pueden hablar a sus hijos diciéndole lo que ven que sucede:
"Creo que no estás cargando el lavavajillas porque estás enfadado porque no te dejé salir anoche. Quiero que sepas que entiendo eso, pero no es una justificación. Todavía tienes que lavar los platos. Y si no terminas a las ocho en punto, sacaré el ordenador de tu habitación".
Recuerda, las expectativas y consecuencias deben permanecer claras. Pase lo que pase, tu hijo tiene que aprender cómo actuar, cómo producir y cómo sobrevivir en la vida, eso es todo. Ciertamente, queremos descartar cosas como la depresión u otros factores que podrían estar contribuyendo a este comportamiento. Si crees que existen causas fisiológicas para el comportamiento de tu hijo, entonces tendrás que llevarle al médico y que le haga una evaluación psicológica y buscar las soluciones más adecuadas en cada caso.