Las legumbres son uno de los primeros alimentos que se suelen introducir en la dieta del bebé. Hasta los 6 meses el recién nacido se alimenta únicamente de la leche materna o en polvo. A partir de dicha edad, el bebé ya puede ir comiendo otras cosas como la fruta, las verduras o las legumbres para ir aportando diversos nutrientes a su organismo.
Las lentejas son esenciales y muy importantes en la dieta del pequeño debido a la gran cantidad de propiedades que tienen y que son perfectas para la salud. Acto seguido te hablamos un poco de ellas y la mejor manera de introducirlas en la alimentación o dieta del bebé.
Las lentejas en la dieta del bebé y de los niños
Los expertos aconsejan que a partir de los 6 meses de edad del bebé, los padres vayan dándole de comer una serie de alimentos tales como las verduras, la fruta, las hortalizas o las legumbres.
En el caso de las lentejas se trata de un alimento rico en proteínas como ocurre con el pollo, los huevos o la carne roja. Hay varios tipos de lentejas: las pardinas, las castellanas o las verdinas. En los últimos años se han vuelto bastante populares las lentejas sin piel debido a que son ideales para aquellos niños que tienen menos de un año.
Las lentejas aparte de las citadas proteínas, son ricas en minerales como el hierro o el calcio. Se trata por tanto de un alimento ideal para los niños y evitar la posibilidad de padecer anemia.
También son ricas en vitaminas del tipo B1 y B2. Por cada 100 gramos de lentejas, el organismo recibe 50 gr de hidratos, 25 gr de proteínas, 10 gramos de fibra y apenas nada de grasa. Los expertos aconsejan el combinar la ingesta de lentejas con la de cereales y recibir una gran cantidad de proteínas perfectas para el cuerpo.
Cómo deben tomar las lentejas tanto los bebés como los niños
Las lentejas al igual que otro tipo de legumbres, pueden introducirse en la dieta del bebé a partir de los 6 meses de edad. El problema de las lentejas es que son difíciles de digerir y generan muchas flatulencias. Si observas que el bebé no las tolera demasiado bien, es bueno dejar de dárselas y esperar a que cumpla unos meses más.
A la hora de dárselas a los bebés es aconsejable el empezar por hacerlas papillas. Con el tiempo puede comerlas sin problema alguno, aunque puedes optar por chafarlas. En el caso de hacerlas en forma de papilla o puré, es aconsejable el añadir un poco de aceite de oliva y evitar la sal, sobrertodo si el niño no ha llegado al año de edad.
En el momento de que el bebé haya tolerado las lentejas sin problema alguno, se pueden elaborar las lentejas con algo de verduras o arroz y así elevar su valor nutricional. Con el paso de los años, las lentejas no suelen ser bastante populares entre los niños. Puedes hacerlas de una manera en la que resulten atractivas para los pequeños. Una manera de elaborarlas puede ser en forma de hamburguesas. Aparte de ser mucho más saludables, es posible que los niños no le hagan asco a las mismas y terminen comiéndoselas.
Como puedes ver, una alimentación adecuada es esencial a la hora de que los niños puedan crecer de una manera sana y sin problemas de salud. Las lentejas forman parte de dicha dieta debido a la gran cantidad de proteínas y de minerales que aporta al organismo de los niños. En muchas ocasiones el comer lentejas de manera habitual, puede ayudar a que los niños sufran la temida anemia en su cuerpo.