Menú
Cosas que NO te gustan pero son importantes para el desarrollo infantil
Cosas que NO te gustan pero son importantes para el desarrollo infantil

DESARROLLO INFANTIL

Cosas que NO te gustan pero son importantes para el desarrollo infantil

Descubre algunas cosas que tus hijos hacen y NO te gustan pero que es necesario para su buen desarrollo.

Si tienes un hijo pequeño podrás ver en él dos caras: un bebé maravilloso y risueño y un pequeño monstruito que se tira en el suelo a patalear y a llorar mientras te quedas perpleja ante la situación. Esto es lo normal en la vida de cualquier padre o madre con hijos pequeños.

Pero hay algunas cosa que tus hijos pequeños pueden hacer que a ti no te gustan nada, pero que son realmente beneficiosos para su desarrollo y que además, deben hacerlo para poder tener un desarrollo equilibrado tanto física como emocionalmente. A continuación vamos a hablar sobre algunas de estas cosas o situaciones que tanto odias pero que son tan importantes...

Jugar con la comida

Es posible que después de preparar una comida casera tu pequeño lo tire al suelo, se lo ponga en la ropa o acabe en todas partes menos en su estómago. No pierdas la paciencia porque es un hábito que te parece molesto, que pasará rápido.

Los niños pequeños generalmente adoran hacer un desastre,Los niños pequeños generalmente adoran hacer un desastre,

Una investigación publicada en la revista Developmental Science descubrió que los niños que jugaban con la comida aprendían más rápidos que aquellos que no tenían la oportunidad de hacerlo. Es mejor que le pongas en una trona alta para comer, tendrá un aprendizaje temprano y un mejor mejor desarrollo cognitivo.

Hacer desastres

Los niños pequeños generalmente adoran hacer un desastre, ya sea con bloques de construcción, pintar con los dedos, dibujar en las paredes o hacer pasteles de barro en el suelo... Se trata de un juego sensorial y creativo que es bueno para el desarrollo de tu niño de varias maneras.

Hay investigaciones que revelan que los padres que permiten este tipo de juegos (dentro de límites razonables), permite que los niños construyan conexiones neuronales que le ayudarán a desarrollar el pensamiento, el aprendizaje y la creatividad. Además, esto beneficia el desarrollo del lenguaje, el crecimiento cognitivo, el desarrollo de habilidades motoras finas y gruesas, la resolución de problemas y la interacción social.

Desafiar los límites

Tan rápido como pongas una regla tu hijo pequeño la desafiará con todas sus fuerzas. Esto es necesario en su desarrollo aunque no te guste nada. Las normas son importantes ya que ayudan a establecer límites, lo que a su vez la hace sentir seguro y protegido en el hogar. Así que aunque las desafíe mantente firme.

No es no

Es probable que quisieras escuchar cómo hablaba tu hijo y lo potenciabas con cuentos ilustrados y permitiéndole explorar su mundo mientras señalabas nombres y palabras y parece que todo se cae por la borda cuando tu hijo descubre la palabra 'no'.

Este desafío hacia ti es su manera de encontrar su independencia.  Durante el primer año más o menos de su vida, tu bebé no se ve a sí miso como una entidad separada de ti (por eso pasan por la ansiedad de separación). Esto cambia durante su segundo año, ya que lentamente comienza a darse cuenta de que tiene su propia identidad.

 No es tan fácil poner ambas piernas en los pantalones o llevar un tenedor a la boca No es tan fácil poner ambas piernas en los pantalones o llevar un tenedor a la boca

Sin embargo, animando a tu hijo a hacer ciertas cosas por sí mismo, como elegir y ponerse sus propios zapatos, puede aliviar otras batallas como no poder usar su disfraz preferido para ir al cole. Dale algunas tareas que sean suyas solas, como sostener el recogedor o ayudar a alimentar a los gatos. Por encima de todo, trata de ser lo más paciente posible.  No es tan fácil poner ambas piernas en los pantalones o llevar un tenedor a la boca, pero el permitirle esta independencia también le ayudará a ganar confianza, conocer sus límites y mejorar sus habilidades motoras.

Las famosas rabietas

Este comportamiento puede comenzar a los 12 meses y continuar hasta la edad de cuatro años... o más. Tu hijo necesita sus rabietas para exteriorizar sus emociones negativas, pero es fundamental trabajar el reconocimiento de las emociones y buscar soluciones al malestar. Así, poco a poco, las rabietas se irán minimizando porque se sentirán seguros y protegidos. Pero hasta que no sepa hablar y explicar qué le ocurre, las rabietas son normales.

Las causas más comunes son: frustración, afirmación de independencia, sentirse mal, sentir falta de control, demasiados o muy pocos límites, hambre, cansancio, sobreestimulación o aburrimiento.

Te puede interesar