Menú
Peligros del perfeccionismo en niños y qué hacer al respecto
Peligros del perfeccionismo en niños y qué hacer al respecto

PERFECCIONISMO

Peligros del perfeccionismo en niños y qué hacer al respecto

El perfeccionismo en los niños puede tener consecuencias peligrosas para su desarrollo, por eso descubre qué hacer al respecto.

Si tienes un hijo o una hija que es demasiado perfeccionista es más que probable que eso le cause serias consecuencias en su vida a corto y largo plazo. Ser perfeccionista no hará que tu hijo tenga éxito, más bien todo lo contrario. Los niños que son demasiado perfeccionistas puede tener ciertos peligros potenciales del perfeccionismo en sus vidas. Algunos de estos peligros son:

  • La ansiedad por cometer un error impide que algunos perfeccionistas tengan éxito. El miedo al fracaso les impide probar las cosas.
  • Los niños que son perfeccionistas pueden enmascarar dolor y agitación. Se sienten obligados a parecer perfectos en el exterior y, en consecuencia, muchos de ellos sufren en silencio cuando surgen problemas.
  • El perfeccionismo puede llevar a problemas de salud mental. Los perfeccionistas pueden correr un mayor riesgo de depresión, ansiedad y otros problemas de salud mental.
  • Mayores niveles de estrés. Dado que los perfeccionistas se sienten obligados a evitar los errores, están bajo altos niveles de estrés todo el tiempo. Demasiado estrés puede ser malo para la salud física y emocional de una persona... a cualquier edad.
La ansiedad por cometer un error impide que algunos perfeccionistas tengan éxitoLa ansiedad por cometer un error impide que algunos perfeccionistas tengan éxito

Qué puedes hacer ante el perfeccionismo de tu hijo

Si crees que tu hijo/a es demasiado perfeccionista, entonces hay algunas cosas que puedes hacer al respecto:

  • Elogia los esfuerzos de tu hijo en lugar del resultado. Evita elogiar a tu hijo por sacar buena nota en su examen... es necesario que le elogies el trabajo duro. También es importante que le felicites por tratar a otros con amabilidad o por ser un buen amigo. Deja claro que el éxito no es lo único importante en la vida.

  • Comparte con tus hijos historias de tu propio fracaso. Deja claro a tu hijo que no eres perfecto ni que pretendes serlo. Habla a tu hijo sobre las cosas que te han salido mal y cómo te enfrentarse en tu fracaso.

  • Enseña habilidades de afrontamiento saludables. Aunque el fracaso es incómodo, no es intolerable. Enseña a tu hijo a lidiar con la decepción, el rechazo y los errores de una manera saludable. Hablar con un amigo, escribir en un diario o hacer un dibujo son solo algunas de las habilidades de afrontamiento que podrían ayudarle a lidiar con sus sentimientos.

  • Auto-conversación saludable. Enseña a tu hijo a usar la autocompasión en lugar de la autocrítica. Conversa en voz alta contigo mismo para demostrarle cómo debe hablarse cuando comete un error. Es mejor que digas cosas como: "Se me ha olvidado ir al banco antes de que cierren, tendré que dejarlo para mañana por la mañana" o quizá también puedas decir cosas como: "No presté atención a la cena y se me quemó, pero encontraré algo saludable para cenar y prestaré más atención cuando esté cocinando".

  • Haz un seguimiento de las expectativas. Asegúrate de no presionar demasiado a tu hijo para que sea perfecto. Crea expectativas altas, pero que sean razonables. Controla tus expectativas a lo largo del tiempo para asegurarte de que no estás esperando demasiado de tu hijo. Si no cumple con las metas o tu hijo quiere dejar de intentar alcanzar sus metas, puede que estés esperando demasiado de él.

  • Ayuda a tu hijo a que sepa lo que puede controlar y lo que no puedeAyuda a tu hijo a que sepa lo que puede controlar y lo que no puede
  • Ayuda a tu hijo a que sepa lo que puede controlar y lo que no puede. Ya sea que tu hijo quiera ser el mejor jugador de baloncesto de toda la escuela o que simplemente quiera aprobar un examen de ciencias, es importante dejar claro que no puede controlar muchas de las circunstancias que influyen en su éxito. No puede controlar lo difícil que la maestra hace sus exámenes y no puede controlar el desempeño de sus compañeros, pero puede controlar su esfuerzo.

  • Metas realistas. Habla con tu hijo sobre las metas que quiera alcanza y si requieren perfección, tendrás que mantener una conversación sobre las metas altas e irreales que pueden ser. Tendrás que ayudarle a establecer metas más realistas.

  • Ayuda a tu hijo a tener una autoestima saludable. Participa en actividades que ayuden a tu hijo a sentirse bien acerca de quién es, no solo de lo que se logra. Ser voluntario, aprender cosas nuevas y participar en actividades artísticas son solo algunas formas de ayudar a tu hijo a desarrollar una visión más saludable de sí mismo. 

Te puede interesar