Ir al cine puede ser una gran experiencia familiar, tus hijos lo recordarán siempre con cariño y además, estarás alentando a que le guste el buen cine. Una forma de preparar una salida en familia es ir al cine. En el centro comercial más cercano es posible que tengáis uno y es un plan apto tanto para verano como para invierno.
En realidad para que la experiencia en el cine sea buena, necesitas planificar por adelantado cómo será ese especial momento y así, que realmente se convierta en un momento emocionante. Ir al cine es poder disfrutar de una película en pantalla gigante y para tu hijo puede ser algo increíble, intimidaste o aterrador. Si es la primera vez que tu hijo va al cine, tendrás que pensar bien cómo realizar esa experiencia familiar.
En realidad, si planificas con anticipación y les permites a tus hijos sentirse cómodos en un nuevo entorno, podréis disfrutar de este tiempo juntos con facilidad. Si quieres que la experiencia con tus hijos en el cine sea estupendo y todos queráis repetir... ¡ten en cuenta los siguientes consejos!
Otro consejo a tener en cuenta durante este proceso es elegir la película correcta para la edad de tu hijoReserva las entradas con antelación
No se puede predecir lo llenas que estarán las salas en las películas que queréis ver. Lo mejor para evitar las prisas y el estrés es reservar las entradas por Internet y comprarlas desde la comodidad de tu hogar. Esto te ayudará a evitar frustrado al hacer la cola en la taquilla y tu hijo no tendrá que sentir ese estrés.
Una película acorde a la edad de tu hijo
Otro consejo a tener en cuenta durante este proceso es elegir la película correcta para la edad de tu hijo. Debes elegir algo que les atraiga a ellos y a su grupo de edad. Algo para los niños mayores teniendo niños pequeños en la sala, podría causar que se aburran durante la película, lo que podría llevarles a hacer ruidos, hablar o simplemente a tener una rabieta.
Ir a la hora correcta
Durante los fines de semana y durante las vacaciones escolares, tienes que asegurarte de elegir el horario de la película de acuerdo con los tiempos del centro comercial (con suerte) más tranquilos. Por ejemplo, la primera película del día, a la hora del almuerzo y en la tarde. Si tu hijo es joven y todavía toma siestas regulares, tendrás que programar la salida después de la siesta.
Es importante llegar temprano a la película para no tener que ir corriendo a la sesión ya que esto provocaría estrés a tu hijo. Es mejor llegar con la luz encendida y sin que la película haya comenzado, así evitarás el estrés de tener que buscar los asientos en la oscuridad... algo que a un niño le podría generar inseguridad.
Es importante llegar temprano a la película para no tener que ir corriendo a la sesiónMejor si escoges pasillo
Cuando compres las entradas no cometas el error de escoger un asiento en mitad de toda una fila de asientos. Si está disponible, lo ideal es escoger el asiento del pasillo. De esta manera podréis salir rápido si tu hijo necesita ir al baño o si se siente molesto o está haciendo ruido.
No tienes que pensar tanto en la experiencia visual para ti, sino en cómo será para tu hijo. Deberás tomar decisiones pensando en el bien familia. Si tu hijo por ejemplo tiene un período de atención corto, se siente cansado o inestable, un asiento de pasillo es una manera fácil de irse. No te avergüences si te tienes que marchar antes de que acabe la película, después de todo, a los niños les lleva un tiempo acostumbrarse a la experiencia de disfrutar de una gran pantalla, en una sala oscura, silenciosa y llena de personas.
¡No te olvides de la chaqueta!
En ocasiones se puede tener frío en el cine, sobre todo cuando tienen el aire acondicionado puesto. Si quieres asegurarte de que tu hijo esté todo el tiempo cómodo y abrigado, ten un chaqueta extra en el bolso por si la necesita. Es mejor estar preparado que tener una mala experiencia y que tu hijo tenga un mal recuerdo de ese momento que debería ser especial.