Cuando los niños están en la escuela el papel del docente es fundamental para su éxito, de hecho los padres confían plenamente en ellos para que esto ocurra. Una de las formas en que los maestros ayudan a alcanzar esa meta es haciendo observaciones de los alumnos y del aula. Con la información que recopilan a través del proceso de observación, podrán trabajar con las fortalezas y debilidades del niño para lograr un mejor éxito estudiantil.
Si eres maestro es necesario que seas consciente de que tus observaciones son muy importantes para cada uno de los alumnos de tu clase. Lo que tú veas, el cómo trabajes con ellos los contenidos, la motivación y los elogios que les des, las pautas para hacer las cosas bien... todo esto es importante que lo tengas en cuenta para que el desarrollo del niño sea la correcta.
Pautas de observaciones
Cuando un maestro hace las observaciones de sus alumnos, debe seguir un cierto protocolo. Los maestros pasan por una capacitación exhaustiva para convertirse en observadores hábiles, precisos y objetivos. Aunque cada sitio es diferente y tiene sus propias pautas específicas, existen algunas reglas universales para la observación.
Las observaciones deben ser objetivas, respetuosas, éticas, neutrales, de bajo perfil, sin prisas y confidenciales. Cuando observa, un maestro generalmente se sienta, toma notas y no interactúa con el niño. Dado que hay tantos factores involucrados y todos están interrelacionados, las observaciones y grabaciones generalmente están dirigidas a un área de desarrollo específica a la vez, como el desarrollo social.
Observaciones de desarrollo
A medida que la maestra de tu hijo vigile atentamente a sus alumnos, podrá hacer observaciones iniciales, así como observaciones de progreso durante el año escolar. Observará el desarrollo físico, intelectual, emocional y social de los niños. Ese maestro tendrá una visión de primera mano de cómo tu hijo y otros estudiantes crecen e interactúan en el aula.
Desarrollo de planes de clase para el aula
Las observaciones ayudan al maestro a evaluar en qué nivel están sus alumnos y cómo planificar las lecciones y el plan de estudios en consecuencia. Esto la ayudará a refinar y enfocarse en las áreas que deben fortalecerse. Entonces sabrá cuáles son las expectativas razonables para sus alumnos.
El maestro tiene en cuenta que todos los estudiantes progresan a un ritmo diferente, por lo que las lecciones tendrán un rango más amplio para trabajar con las fortalezas y debilidades de todos los estudiantes.
Identificación temprana de problemas
Como el maestro estará observando el progreso de tu hijo durante un período de tiempo, podrá notar si un niño tiene dificultades en un área específica. Luego puede planificar actividades individuales y personalizadas para ayudar a ese niño. Si se necesitan recursos adicionales, puede referir al niño o padre a los profesionales o programas apropiados para obtener más apoyo.
Como ves, el papel del maestro es imprescindible para el buen desarrollo de los niños, por lo que no se debe escatimar en recursos para que los niños estén bien atendidos. Los padres deben confiar en tus capacidades como buen maestro, porque ellos dejan cada mañana en tus manos a sus hijos, confiando en que estarán bien atendidos y que aprenderán cada día más. Esos padres implicados, que ayudan a sus hijos en las tareas, que quieren compartir contigo la experiencia escolar de sus hijos... se merecen que hagas tu mejor trabajo cada día.
Cada mañana cuando llegues a tu aula, no pienses en las limitaciones que quizá algunos alumnos tienen... Piensa en cuáles son sus cualidades y habilidades, piensa en cómo podrás aumentar todo el potencial que tienen cada uno de tus alumnos. ¡Ese es el secreto de un buen maestro!