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Hemorragias postparto, ¿a qué se deben?
Hemorragias postparto, ¿a qué se deben?

RECUPERACIÓN DEL CUERPO

Hemorragias postparto, ¿a qué se deben?

En el 5 por ciento de las mujeres que han pasado por un parto tienen lugar sangrados en el periodo posterior, estas son las posibles causas.

Es normal que las mujeres que acaban de pasar por un parto sangren un poco durante el postparto. Esto sucede debido al desprendimiento de la placenta del útero. También a las mujeres a las que se les ha practicado la cesárea pierden más sangre que aquellas que dan a luz por parto vaginal.

La idea de perder sangre durante el postparto no es algo que tenga que preocupar mucho a las mujeres ya que durante el embarazo el 50% de la sangre del cuerpo aumenta, por lo que si se pierde algo de sangre el cuerpo tiene reservas suficiente para recuperarse.

El problema viene cuando algunas mujeres sufren hemorragias muy continuadas después del parto. Esto hace que se les tenga que administrar un tratamiento. Las hemorragias postparto suceden en el 5% de los partos, durante el tiempo en el que la placenta se desprende del útero o algo después.

En este artículo os vamos a contar que es exactamente la hemorragia postparto y qué debemos hacer si lo sufrimos.

¿Qué son las hemorragias postparto?

La hemorragia postparto es la pérdida excesiva de sangre debido al desprendimiento de la placenta, también puede haber hemorragia debido a un traumatismo en la vía del parto.

La hemorragia posparto suele detectarse en las primeras 24 horas del postparto o tras unas semanas, clasificándose en hemorragia temprana o tardía. La hemorragia temprana suele ser peor que la tardía, ya que tiene mayor peligro para la madre.

La hemorragia postparto es una de las mayores causas de mortalidad materna, después de las infecciones durante el parto. De hecho, la hemorragia postparto la suelen sufrir alrededor de 14 millones de mujeres después del parto en todo el mundo, siendo solo el 1% las que muere a consecuencia de esto.

Las hemorragias postparto pueden ser tempranas o tardíasLas hemorragias postparto pueden ser tempranas o tardías

Y es que aunque durante el embarazo el volumen sanguíneo aumenta para cubrir los cambios metabólicos del embarazo, durante el parto se puede llegar a perder una media de 500 ml de sangre y en una cesárea una media de 930 ml. Después del parto la pérdida de sangre y las hemorragias se puede producir durante las primeras horas del postparto. De ahí que a las mujeres se les tenga en el hospital durante unas 24-48 horas después del parto para poder controlar una posible hemorragia.

Aunque hay muchas posibilidades de sufrir hemorragias durante el postparto, en las mayoría de los casos esto suele estar controlado, sobre todo en los países desarrollados donde la madre suele estar más cuidada por los médicos.

Causas de las hemorragias postparto

Hay múltiples causas por las puede producirse una hemorragia postparto. En el 75% de los casos suele producirse por la atonía uterina, que es la causa más común.

La atonía uterina suele ser el motivo por el que se producen las hemorragias postparto. Esto se produce cuando los músculos del útero no se contraen al expulsar la placenta y no se puede parar la hemorragia.

Esta contracción del útero es la que permite que los vasos sanguíneos de la zona se cierren, por lo que si no hay contracción no se para la hemorragia. Esto puede estar causado por el cansancio de los músculos durante el parto, sobre todo si tu bebé es grande o si esperas dar a luz a gemélos o mellizos, o por la episiotomía (incisión que se hace en el perineo de la madre para facilitar el nacimiento del bebé).

Este tipo de hemorragias ocurren en el 5% de los partos

En otros casos puede suceder que la placenta no se desprenda bien del útero y esta quede adherida, no en su totalidad, a la pared del útero. Como la placenta sigue dentro del útero, este no se contrae y no se evita la hemorragia.

Esto solo sucede en el 0,5% de los nacimientos en todo el mundo, por lo que es algo poco común. En estos casos se espera un tiempo prudencial, unos 30 minutos, para que el cuerpo intente expulsar la placenta por sí misma. Si pasado un tiempo esto no sucede, los médicos pasan a administrar oxiticina a la madre

Entre las causas más raras se encuentran la rotura uterina y la inversión del útero. La rotura del útero, también llamada rotura uterina, es la pérdida de la pared del útero. Esto puede suceder antes de dar a luz o durante la dilatación. Cuando se piensa que esto puede sucederle a la madre, se suele practicar una cesárea. La inversión del útero se produce cuando este último se da la vuelta quedando al revés en el momento en el que se debe expulsar la placenta. Esto suele producirse por la mala tracción del cordón o una presión del útero.

Estas últimas suelen ser unas complicaciones muy extrañas que suceden en contadas ocasiones.

A veces la hemorragia ocurre poruqe no se ha expulsado la placenta completamenteA veces la hemorragia ocurre poruqe no se ha expulsado la placenta completamente

¿Qué hacer si tengo hemorragias postparto?

Si la hemorragia postparto sucede después de las primeras 24 horas o durante la primera semana después del parto, recomendamos encarecidamente acudir inmediatamente a tu médico para que determine la zona y el tipo de hemorragia que se presenta.

Si este sangrado viene del útero o de algún desgarro, lo primero que los harán los médicos será administrar a la madre soluciones intravenosas para subir la presión.

Cada caso tendrá una solución diferente. Si hay una herida, los cirujanos intentarán cerrarla. Esto es para los casos en los que hay un desgarro.

Por otro, si es el caso de que no se ha expulsado la placenta en su totalidad, los médicos intentarán extraerla. Puede que esto suponga una operación quirúrgica.

En todos los casos se administrará a la madre oxitocina (hormona que provoca contracciones en el útero y estimula la subida de la leche al pecho) para que el útero se contraiga y se detenga el sangrado.

Solo en casos muy particulares, y si la madre no deja de sangrar y no responde a los medicamentos, el médico introducirá la mano para masajear el útero y parar la hemorragia. Puede que si la madre pierde mucha sangre se le haga una transfusión de sangre.

Una vez que se haya controlado la hemorragia, la madre se quedará en observación hasta que sus signos vitales se desarrollen con normalidad.

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