El ego es un concepto que se ha estudiado y analizado durante muchos años tanto por psicólogos como por filósofos. Algunos expertos opinan que el ego es algo intrínseco exclusivamente en los seres humanos y otros indican que puede verse sus características incluso en animales, sin embargo, en algo en lo que están todos de acuerdo es que todas las personas tienen ego y que es muy importante como lo desarrollamos para así saber qué adulto seremos en un futuro.
El ego está altamente relacionado con la personalidad de una persona, tanto es así que dependiendo de si este ego es positivo o negativo podemos ya proveer que clase de persona serán en un futuro, por ejemplo, una persona con ego negativo será competitiva, narcisista, irascible y pensará que siempre tiene la razón, mientras que una persona con ego negativo tendrá las características contrarias. Es por esto por lo que una de las tareas más importante de los padres es educar a nuestro hijo para que desarrollen un ego positivo. En este artículo te daremos las claves para que así sea y para que conozcas un poco más el funcionamiento del ego y cómo podemos hacer para lidiar con él en los niños.
¿QUÉ ES EL EGO?
Diversos filósofos y psicólogos han intentado determinar qué es realmente el ego y aunque cada uno le daba una connotación diferente se ha llegado a la conclusión que el ego se podría definir como el sentido consciente del yo. En referencia a los niños, el ego surge cuando se desarrolla la consciencia dentro de él, es decir, cuando se da cuenta de que es un individuo aislado dueño de su propio ser.
La esencia del ego es la supervivencia, los niños desarrollan el ego a partir de los 3 años, hasta ese momento los padres son los que actúan como el ego de ese niño. Hasta los 6 años los infantes manifiestan egocentrismo y egoísmo, es decir, creen que su punto de vista es el único correcto y no quieren que se les contradiga llegando incluso a enrabietarse cuando ve que no se le da la razón. Si tu hijo es capaz de pasar esta etapa de forma adecuada, a media en que crezcan podrá dejar el egoísmo atrás y darse cuenta de que no todo el mundo ve la realidad como ellos, comprendiendo así que cada persona tiene un punto de vista diferente y que debe ser respetado aunque no se comparta.
EL EGO NEGATIVO
Las personas con un ego negativo buscan estar por encima del resto, sin importar que esto pueda dañar a los demás. Es por esto por lo que los niños que desarrollen un ego negativo se convertirán en adultos que necesitaran sentirse superiores al resto provocando que tengan actitudes negativas e incluso tóxicas hacia los demás. Así mismo, serán personas que tenderán a pensar que siempre llevan la razón y necesitarán por ello un reconocimiento constante por parte de los demás que lo único que hará será que su ego se vea reforzado.
Sin embargo, si un niño desarrolla un ego saludable a medida que crezca podrá ser capaz de razonar e incluso de aceptar que se ha equivocado, incluso a edades más tempranas de lo que imaginaríamos, lo que hará que en un futuro sea un adulto emocionalmente estable.
¿CÓMO MANEJAR EL EGO EN LOS NIÑOS?
No te pierdas estas estrategias:
- Evita que sean competitivos : Desde pequeños deberás dejarles claro que no tienen por que ser los mejores en todo y que el hecho de que sean mejores en algo que los demás no determina que sean superiores a otras personas.
- Deben aprender a respetar : Especialmente a los adultos y es que si te impones a ellos con un "porque si" o "porque lo digo yo" los niños con un alto ego pueden sentirse desafiados y esto será contraproducente, es mejor que trates de convencerlos con argumentos y razonando.
- Ayúdalos a desarrollar una mentalidad de crecimiento : Tienes que intentar que comprendan que las críticas de los demás son positivas y constructivas, nunca negativas. La opinión de los demás no tiene por qué ajustarse a la realidad, pero nos sirve para comprender el punto de vista de otra persona, es por esto por lo que debes intentar inculcarle este pensamiento a tu hijo.
- Pon normas: Marcar una serie de normas claras y estables que se mantengan en el tiempo, puede ayudar al niño a que gestione mejor su egocentrismo y su ego. Esto es porque gracias a estas normas los niños son capaces de darse cuenta de que necesitan adaptarse y formar parte de la sociedad y del entorno que les rodea.
- No utilices el chantaje emocional : Según la Federación de Enseñanza de CC.OO. de Andalucía, el chantaje emocional fomenta que el niño sea más resistente a la disciplina y lo hace aún más caprichoso y desobediente.