Los padres pueden y deben disciplinar a sus hijos... es esencial para que los niños puedan crecer sanos y equilibrados, siempre y cuando se discipline de forma positiva y teniendo en cuenta las necesidades físicas y emocionales de los niños. Cuando se disciplina jamás se debe perder el respeto hacia los niños... el respeto y la confianza es fundamental en todos los casos.
El trabajo de los padres es enseñar a sus hijos sobre las expectativas, las reglas, la moral y los valores. Los niños necesitan que se les dé una disciplina constante para que se les enseñe lo correcto de lo incorrecto, que se los mantenga seguros y que aprendan lo que pueden y no pueden hacer.
El objetivo de la disciplina es crear un mundo ordenado, predecible, estable y divertido para disfrutar y crecer sanos. La disciplina positiva ayuda a los niños a aprender y cambiar su comportamiento. El abuso infantil puede ocurrir cuando la disciplina o los intentos de controlar a un niño se vuelven excesivos y lesionan tanto física como emocionalmente. El abuso en la disciplina infantil solo hará que los niños se rompan por dentro...
![El trabajo de los padres es enseñar a sus hijos sobre las expectativas](https://img.bekiapadres.com/articulos/91000/91148/1.jpg)
El problema de los azotes
Existe una gran controversia sobre si los padres deberían usar alguna vez la disciplina física para corregir a sus hijos. Las semillas de plantas de azotes solo crea un comportamiento violento posterior. Los cachetes nunca funcionan... solo crean sentimientos de resentimiento y rencor hacia los padres que comienzan a verles como agresores.
Sin embargo, muchos padres creen que la disciplina física puede ser una parte efectiva para corregir a un niño, si se hace correctamente. Si los padres optan por azotar a su hijo, no debe hacerse de una manera que cause daño al niño, lo viole o le cause humillación... la mejor manera de azotar, es NO azotando.
Abuso vs. Disciplina
La disciplina es una respuesta de los padres a la mala conducta específica. Un niño puede esperar que si no cumple con las expectativas, será corregido por ese motivo, es decir, por el comportamiento que ha tenido.
El abuso infantil a menudo es impredecible. Los niños que son maltratados a menudo no saben qué es lo que provocará que sus padres se enfaden. Las reglas y las consecuencias no están claras, y los niños no saben qué resultará en un ataque físico... Esto les generará miedo, confusión y mucha inestabilidad emocional.
El problema con la ira impredecible
Todos los padres se enfadan y, a veces, disciplinan a sus hijos cuando están de este modo iracundo. Pero, la mayoría de los padres tienen un sincero deseo de ayudar y enseñar a sus hijos cómo puede cumplir mejor sus expectativas.
Los padres abusivos a menudo atacan cuando están enfadados y usan el abuso físico para hacer valer su poder sobre su hijo. Cuanto más enfadado está el padre, más intenso es el abuso. En este sentido, JAMÁS hay que disciplinar a un niño cuando las emociones están desbordadas. Es necesario que los padres trabajen en su calma para poder disciplinar dentro de la disciplina positiva.
![Los padres abusivos a menudo atacan cuando están enfadados](https://img.bekiapadres.com/articulos/91000/91148/2.jpg)
Los niños no deben tener miedo
Los padres no deben usar el miedo de pegar a sus hijos para obligarles a comportarse bien. Los niños no deben temer a sus padres, sino que deben desarrollar un respeto por sus padres y las reglas y expectativas de la familia. En este sentido, los padres deben ser conscientes de que el respeto nunca es sinónimo de miedo... el respeto solo se gana a través de la confianza y el afecto.
Abuso emocional y psicologico
El abuso infantil puede tomar otras formas más allá del abuso físico. Los padres pueden ser abusivos emocional o psicológicamente a través de los patrones como rechazar al niño intencionadamente, humillarlo, aislarlo o descuidar sus necesidades básicas. Algunos padres bien intencionados han usado formas severas de abuso psicológico que son tan dañinas como el abuso físico...