La llegada del bebé a tu vida puede implicar muchos cambios. Los primeros comenzarán en tu cuerpo, teniendo tiempo después para preocuparte por todos aquellos elementos que completarán tu hogar y tu vida cotidiana tras su nacimiento. Será durante el embarazo que empezarás a notar que tu cuerpo cambia y que tu salud también se puede ver afectada, por lo que deberás cuidarte al máximo si quieres que tú y tu bebé os encontréis en el mejor estado posible en todo momento.
Desde el inicio de tu embarazo es esencial que visites a tu médico o ginecólogo de manera habitual. De este modo podrá controlar que tus constantes y las de tu bebé se encuentran de forma correcta en todo momento, asegurándoos de que ambos tenéis todas las necesidades cubiertas. Sin embargo, todos los embarazos son diferentes, incluso en una misma madre quien ya ha tenido antes un bebé, por lo que deberás seguir siempre los consejos del profesional de la salud con tal de encontrarte bien y hacer que paséis unos nueve meses de gestación adecuados y una posterior salud tras el parto los dos.
Dietas para embarazadas. Consulta siempre a un profesional de la salud
Es posible que el médico que sigue tu embarazo te haya aconsejado seguir alguna de las dietas para embarazadas que existen. Dependiendo de tus necesidades es probable que debas seguir un esquema alimentario u otro, pero lo que es clave es que siempre sigas los consejos de los profesionales de la salud. No intentes seguir una dieta por tu cuenta, por mucho que le haya funcionado a un familiar, conocido o amigo o creas que está de moda por Internet y algunas celebridades hayan podido realizar estos cambios en su alimentación puede que estos no sean adecuados para tu salud y necesidades.
Algunos alimentos es mejor no consumirlos, como la carne o el pescado crudoDurante la gestación es esencial que cuides de tu cuerpo más que nunca, puesto que podrías dañar también la salud de tu bebé. Una dieta para embarazadas adecuada, hecha a tu medida según tus necesidades, te proporcionará los nutrientes y las vitaminas que precisas con tal de poder cubrir todas tus necesidades, en este momento de cambio constante, y también las de tu bebé. Por eso, es muy importante que sigas los consejos del profesional de la salud en cuanto a tu alimentación y no te dejes influir por las dietas que pueden haber seguido conocidos o en las redes sociales, solamente el médico conocerá tu estado de salud, el de tu bebé y vuestras necesidades.
Diferentes dietas para embarazadas según tus necesidades
Es posible que según las necesidades que tenga tu cuerpo el médico te realice o aconseje una dieta u otra durante el embarazo. Algunas mujeres tienen sobrepeso y es esencial que sigan cuidando su alimentación al detalle también durante la gestación. Recuerda que tener quilos de más puede ser una dificultad a la hora de concebir, pero también durante el embarazo, por lo que estas mujeres deberán controlar lo que comen, si no quieren tener problemas de salud antes de la llegada de su bebé o tras dar a luz.
También puede darse el caso contrario. Es decir, mujeres que están por debajo de su peso y que esto puede poner en riesgo su propia salud y la de su bebé durante el embarazo y tras el parto. Por eso, es esencial que sigan la dieta para embarazadas que le haya aconsejado su médico y respete las cantidades mencionadas por el profesional de la salud. De este modo podrán controlar su peso, sin engordar demasiado durante el embarazo, a la vez que proporcionan todos los nutrientes que el bebé y su cuerpo necesitan para una correcta gestación.
Si te preocupa mantener la línea durante el embarazo y que no te falte ningún nutriente o vitamina durante el mismo, es esencial que preguntes al ginecólogo o a tu médico habitual cuál es la mejor dieta para embarazadas, de modo que no ganes quilos de más durante la gestación, pero sin poner en peligro tu salud o la de tu bebé. Recuerda que podrás realizar ejercicio de manera moderada, siempre y cuando sea un deporte que no comporte ningún riesgo para el embarazo y monitorizado por un profesional también de la salud y del deporte, adaptándolo a cada etapa de tu gestación.
Algunas mujeres que sufran enfermedades como la diabetes, intolerancias como al gluten o la lactosa, entre otras muchas dolencias que requieren unos hábitos alimenticios diferentes a los de una persona sana deberán consultar con el médico sobre cuál será la mejor dieta para embarazadas a seguir durante la gestación. De este modo podrán asegurarse de que su cuerpo está cuidado en todo momento y la salud de su bebé no se ve afectada de forma negativa por estos cambios en la alimentación.
La llegada del bebé a tu vida puede implicar muchos cambiosAlimentos recomendables para las dietas para embarazadas
Es probable que hayas leído muchos mitos sobre los alimentos que puedes tomar y los que no son tan aconsejables durante el embarazo. Antes de descartar o tomar algún alimento en exceso durante los meses de gestación consulta con tu médico con tal de asegurarte de que no pueden dañar tu salud o la de tu bebé. Algunas clases de pescados o de carnes suelen estar incluidas en estas listas, pero será el profesional de la salud solamente quien te pueda informar de cuáles son las más adecuadas para ti.
Algunos alimentos es mejor no consumirlos, como la carne o el pescado crudo, así como deberás evitar tomar alcohol y no fumar. Descansa también de manera adecuada y sigue la dieta que te haya recomendado tu médico. Lo más probable es que incluya alimentos que te serán beneficiosos para tu salud como suelen serlo las verduras y las legumbres, las cuales te ayudarán también a ir al baño con mayor regularidad, porque en algunas mujeres durante el embarazo esto no suele ser tan fácil como de costumbre.
Las frutas, consumidas con moderación, así como los huevos bien cocinados serán clave también para la dieta de una mujer embarazada. La avena y los frutos secos te aportarán energía y te ayudarán a sentirte saciada. Si los añades en tu desayuno te sentirás más llena y no tendrás la sensación de hambre que te puede empujar a consumir productos ultraprocesados, ricos en grasas saturadas y azúcares, los cuales te pueden hacer ganar peso con más facilidad y no cuidan de tu salud ni de la de tu bebé.