Menú
Cómo conseguir que un bebé de 18 meses duerma toda la noche
Cómo conseguir que un bebé de 18 meses duerma toda la noche

BEBÉ QUE DUERME

Cómo conseguir que un bebé de 18 meses duerma toda la noche

Un bebé de 18 meses ya es capaz de dormir toda la noche seguido... ¿qué tienes que saber para conseguirlo? ¡Es necesario para el descanso de todos!

Las malas noches y el sueño es un problema que todos los padres deben enfrentarse en cuento sus hijos llegan al mundo, excepto algunos padres afortunados que tienen bebés e hijos pequeños que duermen seguido desde el primer momento. Muchos padres se enfrentan a problemas cuando intentan que sus hijos duerman. 

Al criar a los bebés y niños pequeños, el objetivo principal generalmente es lograr que el niño duerma durante toda la noche. Si bien los bebés pequeños necesitan despertarse varias veces durante la noche para comer, cuando el niño alcanza los 9 a 12 meses de edad, dormir durante la noche se convierte en una expectativa razonable, sobre todo cuando comienzan a tomar alimentos sólidos en purés y tienen más alimento en sus pequeños cuerpos.

Sin embargo, al igual que los niños llegan a la etapa de poder dormir físicamente durante la noche, la necesidad emocional de independencia y autonomía de un niño pequeño puede causar problemas. Afortunadamente, puedes seguir algunas medidas para alentar a tu hijo a dormir y quedarse dormido sin que exista ningún conflicto o llantos nocturnos.

Mantén a tu hijo ocupado durante el díaMantén a tu hijo ocupado durante el día

Mantener al niño ocupado

Mantén a tu hijo ocupado durante el día. Si tu hijo no ha estado físicamente activo, tendrá demasiada energía acumulada por la noche y será más difícil que concilie el sueño rápidamente.

Observa a tu hijo por la noche

Cada noche, tendrás que observar a tu hijo para identificar cuándo tiene sueño y cuáles son las señales que te lo indican. Un tiempo consistente para la cama debe establecerse en base a esta observación. No esperes a que tu hijo se canse demasiado y se ponga de mal humor para comenzar a dormir... Porque entonces costará mucho más poder conseguirlo.

Evalúa el ambiente de sueño

Tendrás que evaluar el ambiente de sueño que tiene tu hijo. El área debe ser oscura, tranquila y mantenerse a una temperatura agradable. Deberás asegurarte de que la ropa para dormir de tu hijo sea cómoda y adecuada para el clima que os encontráis ahora mismo.

Establece una rutina

Tendrás que establecer una rutina para la hora de ir a dormir que, idealmente no dure más de 20 minutos. Puedes escoger actividades relajantes como leer, cantar o bañarse durante este tiempo. Tendrás que asegurarte de que una vez que haya establecido una rutina, permanezcas en ella y no la cambies constantemente. La consistencia es importante para que tu hijo de 18 meses aprenda a saber qué esperar en cada momento determinado.

Escoger el sueño

Permite que tu hijo elija dentro de su rutina de sueño nocturno, por ejemplo, qué pijamas usar o qué canción cantar.  Si le das a tu hijo la oportunidad de decirte lo que piensa, le permitirá tener una sensación de independencia estructurada, algo que le hará sentirse bien, seguro, protegido y respetado.

Hay veces que a los niños les va bien tener un objeto de apego en la camaHay veces que a los niños les va bien tener un objeto de apego en la cama

¿Qué pasa si se despierta mucho por la noche?

Si tu hijo se despierta mucho durante la noche, o simplemente se despierta, no enciendas las luces ni le saques de la cama. Recuérdale que aún es hora de dormir y dale algunas caricias. Incluso puedes cantarle una canción hasta que se vuelva a dormir.

Hay veces que a los niños les va bien tener un objeto de apego en la cama, como una mantita del sueño o un peluche... esto lo asociará con ir a la cama y se podrá dormir sin muchos problemas. Dale el objeto cuando comiences tu rutina de sueño y guárdalo cuando se despierte por la mañana. Nunca utilices el ir a la cama como un castigo, si tu hijo asocia la negatividad o tener problemas con su cama, entonces dormir bien podrá convertirse en un auténtico problema.

Además, tienes que asegurarte de que la cama de tu hijo está en un lugar seguro, lejos de cualquier persona o calefactor. Retira el exceso de mantas o juguetes de su cama, ya que estos pueden representar un peligro de asfixia y si es más mayor, podría jugar con ellas.

Te puede interesar