Un niño que está enfermo como infección necesitará descanso y dormir bien para poder recuperarse por completo. Sin embargo, a menudo es difícil dormir cuando la infección se acompaña de síntomas incómodos o dolorosos, como dolor de oído, dolor de garganta, tos y congestión.
Si tu hijo está tomando antibióticos para esta enfermedad, puedes preguntarte si su sueño también se ve afectado por el medicamento que está tomando. Si tienes motivos para sospechar que los antibióticos están causando estragos en los patrones normales de sueño de tu hijo, consulta con el médico de tu hijo antes de suspender el medicamento.
Los antibióticos actúan matando microorganismosTratamiento antibiótico para niños
Los antibióticos actúan matando microorganismos o evitando que los microorganismos se reproduzcan en el cuerpo de tu hijo. Los médicos suelen recetar antibióticos para tratar las infecciones bacterianas en los niños. El tipo exacto de tratamiento con antibióticos que prescribe un médico, ya sean cápsulas, pastillas, pastillas masticables, líquidos o gotas pediátricas, depende de la edad del niño.
Si está tomando amoxicilina, un medicamento recetado comúnmente para las infecciones bacterianas en los niños debido a su sabor relativamente agradable, deberá tomar su medicamento dos o tres veces al día durante un número determinado de días. Si tu hijo toma su medicamento a intervalos apropiados y durante el número de días requerido, es probable que elimine las bacterias causantes de la infección con bastante rapidez.
Fatiga excesiva
Malestar estomacal, vómitos y diarrea son posibles efectos secundarios del uso de amoxicilina; tendrás que ponerte en contacto con el médico de tu hijo si los trastornos estomacales son graves.
Si bien el cansancio excesivo es también un posible efecto secundario del tratamiento con amoxicilina, esto en realidad es poco frecuente. Además, muchas de las enfermedades que requieren antibióticos pueden hacer que tu hijo se sienta más cansado o que duerma más de lo normal, por lo que si aún no has completado un ciclo completo de antibióticos, es posible que te sientas fatigado como resultado de la infección. Sin embargo, si sospechas que la mayor necesidad de dormir de tu hijo se debe a el tratamiento con antibióticos, comenta tu preocupación con el médico de tu hijo.
Dificultad para dormir
Una combinación de amoxicilina y clavulanato, que se vende con el nombre de marca Augmentin, se usa para tratar infecciones bacterianas en muchas partes diferentes del cuerpo. Existen varios efectos secundarios raros relacionados con el sueño de esta combinación, que incluyen inquietud, insomnio y dificultad para conciliar el sueño.
Tales efectos secundarios no requieren necesariamente la atención de tu médico; es probable que se resuelvan por sí solos a medida que el cuerpo de tu hijo se adapte a sus medicamentos. No obstante, llama al médico de tu hijo sí tiene alguna inquietud particular y quieres orientación sobre cómo mejorar el sueño de tu hijo mientras toma el medicamento.
El tratamiento con antibióticos no debe suspenderseTerminando el curso de tratamiento
Una vez que tu hijo comienza el tratamiento con antibióticos, debe completar todo el curso de la medicación. Incluso si sospechas que los patrones de sueño están siendo interrumpidos como resultado de los antibióticos, es probable que tu médico le aconseje que continúes administrando el medicamento. Suspender el uso prematuro de antibióticos puede provocar recurrencias de la infección o el desarrollo de bacterias resistentes a los antibióticos. Si estás considerando suspender el medicamento por algún motivo, habla con tu médico anteved hacerlo.
Además, el tratamiento con antibióticos no debe suspenderse porque entonces los virus o las bacterias se vuelven más fuertes en futuras ocasiones, por lo que el antibiótico dejaría de ser un medicamento seguro y potente para acabar con las infecciones. Las infecciones si no se tratan adecuadamente pueden llegar a ser muy peligrosas, incluso pueden amenazar la vida de quien tiene una gran infección. Por eso, los antibióticos deben tomarse con moderación y siempre siguiendo el consejo médico.