Las personas somos seres sociales y para poder ser avanzar interactuamos unos con otros. Los humanos interactúan con sus hijos de varias maneras. Los padres autoritarios tienden a establecer la ley e imponer castigos severos, mientras que los padres permisivos establecen pocos o ningún límite.
El estilo autoritario de crianza, en el que los padres son cálidos, cariñosos y aún establecen límites definidos, parece ser el más efectivo. Sin embargo, un cuarto estilo, el padre no involucrado, puede crear una serie de problemas para los niños que pueden seguirlos hasta la edad adulta.... Un padre o una madre cuando ignora a sus hijos estará creando en ellos el germen del resentimiento, la inseguridad, la dependencia emocional y la falta de confianza, todo un combo para que el niño crezca rodeado de personas tóxicas y con problemas sociales que le afecten negativamente a su vida.
Padres que ignoran a sus hijos o padres no involucrados
Los padres no involucrados ignoran a sus hijos. Al igual que los padres permisivos, establecen pocos o ningún límite, pero no tienen el calor emocional que muestran los padres más permisivos. Los padres no involucrados pueden incluso hacer declaraciones a un niño como: "no me importa que lo hagas", o incluso pueden no hacerle caso ni escuchar mientras sus hijos les hablan o les cuentan sus cosas. Sus hijos aprenderán a no confiar en ellos ni a contarles nada que les pueda ocurrir.
Estos padres pueden estar deprimidos o abrumados con la lucha de la vida diaria, pero el resultado es un niño con poca o ninguna supervisión, apoyo o afecto. En algunos casos, el padre no involucrado puede ser negligente... con las consecuencias que esto tendrá en el desarrollo del niño.
Problemas de apego
Los niños forman relaciones con sus padres, llamadas relaciones de apego, que están relacionadas con la cantidad y el tipo de atención que los padres les brindan. Un apego seguro resulta cuando un niño siente que sus padres son de confianza.
Los niños sabrán qué esperar y que les proporcionarán apoyo. El niño generalmente se siente cómodo explorando su mundo y puede aprender porque tiene seguridad. Cuando los padres no responden a las necesidades de un niño o ignoran sus sentimientos, aprende que sus necesidades no serán satisfechas y que debe cuidarse a sí mismo. A menudo tendrá dificultades para establecer relaciones con los demás y puede comportarse de manera agresiva.
Problemas para los niños
Los estilos de crianza tienen diferentes efectos en los niños. La indiferencia de los padres no involucrados con sus hijos causa una serie de problemas. Los hijos de padres no involucrados tienen poco control emocional. Tienen problemas para formar apegos a otras personas.
Se frustran fácilmente, es más probable que tengan problemas académicos y comportamientos delictivos. Los adolescentes que han sido criados por padres que les han ignorado durante mucho tiempo es posible que tengan un comportamiento más impulsivo, egocéntrico y que no crean que su comportamiento pueda tener consecuencias en su futuro. Y si tienen consecuencias no lo entienden porque se han criado en un ambiente desprotegido donde sus acciones nunca tenían consecuencias.
Divorcio
Los niños necesitan estabilidad y previsibilidad. Una de las experiencias más difíciles para un niño es cuando los padres se separan y se divorcian. Durante este tiempo, los padres pueden estar preocupados y ofrecer poco apoyo al niño. Muchos niños sienten culpa, ira, ansiedad y tristeza durante un divorcio. Si uno de los padres tiene la custodia completa y la relación paterna es complicada, el niño puede sentirse abandonado a menos que el padre sin custodia haga un esfuerzo adicional para visitar, llamar o permanecer conectado. Cuando un padre sin custodia visita esporádicamente, de forma impredecible o no visita, los niños pueden sentirse rechazados o que su otro progenitor les está ignorando.