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Peligros de tener obsesión por el control en la vida de tus hijos
Peligros de tener obsesión por el control en la vida de tus hijos

CRIANZA

Peligros de tener obsesión por el control en la vida de tus hijos

Si sueles controlar TODO sobre la vida de tus hijos, esto es lo que puede pasar... ¡No permitas que tus hijos no tengan libertad de crecimiento interno!

Si no puedes soportar la idea de que tu hijo cometa un error en su tarea, o si tienes de que no tome buenas decisiones cuando no le miras por encima del hombro, puede ser difícil darle la libertad que necesita para poder evolucionar. No te conviertas en un monstruo del control con tus hijos... Aunque es bueno estar al tanto de la vida de tus hijos, estar pendiente de todo absolutamente puede ser problemático para su desarrollo.

Ser un fanático del control tendrá consecuencias negativas en tus hijos

Si eres de los padres que microgestionan las actividades de tu hijo, existen algunas consecuencias negativas que podrían ocurrirle a tu hijo...

Le agotarás emocionalmente

Tus hijos se sentirán agotados sin ninguna razón real. Los padres que insisten en tener un alto grado de control sobre sus hijos a menudo los involucran en muchas actividades estructuradas. Desde las lecciones de violín hasta las clases de fútbol, creen que sus hijos están obteniendo una ventaja competitiva... cuando en realidad solo les están agotando sin necesidad.

Inscribir a los niños a muchas actividades extraescolares no les hace más felices, ni más saludables ni tampoco más exitosos. Solo les hará sentirse agotados y que te gastes más dinero de la cuenta innecesariamente.

No te conviertas en un monstruo del control con tus hijosNo te conviertas en un monstruo del control con tus hijos

No habrá consecuencias naturales

Si hace frío en la calle y le obligas a tu hijo a ponerse una chaqueta aunque no quería hacerlo, no sabrá qué pasa cuando no usa la chaqueta cuando hace frío en el exterior. Si siempre haces las cosas por tus hijos para evitar discusiones, ellos no aprenderán a resolver los problemas por sí mismos.

Debes permitir a tus hijos que se enfrenten a las consecuencias naturales cuando sea seguro hacerlo. Esto significa que tendrás que tolerar ver a tu hijo cometer errores o hacer cosas que no harías tú. Renunciar al control puede ser difícil cuando no estás acostumbrado a hacerlo... Pero para el buen desarrollo de tus hijos, es necesario.

Estarás ahogando su creatividad

Las personas que quieren que todo esté bajo control envían el mensaje: "Solo hay una manera correcta de hacer esto, y esa es mi manera". Aunque hay muchas maneras de resolver un solo problema, si eres un fanático del control, desalentarás en tus hijos cualquier ápice de creatividad en sus mentes.

Recuerda que tu hijo puede tener una manera diferente de resolver un problema y que no necesariamente está equivocado por hacerlo de otro modo que no sea a tu manera. Casi todos los problemas tienen múltiples soluciones. Tienes que estar dispuesto a permitir que tu hijo explore, aprenda y haga intentos repetidos para resolver un problema antes de saltar y decirle "cómo hacerlo bien".

Le estarás pasando ansiedad

La mayoría de las personas se comportan como fanáticos del control porque se sienten ansiosos cuando sienten que no tienen el control. Ellos piensan: "Si no mantengo todo bajo control, algo malo sucederá". Sin embargo, los niños son perceptivos y captarán su ansiedad rápidamente, incluso si nunca se habla en voz alta.

Los padres nerviosos tienen hijos nerviososLos padres nerviosos tienen hijos nerviosos

Los padres nerviosos tienen hijos nerviosos. Por lo tanto, es importante reconocer cómo tu ansiedad puede interferir con la crianza saludable. En lugar de pensar constantemente en todas las cosas malas que podrían suceder, trabaja para darle a tu hijo la libertad de ser un niño.

Miedo de cometer errores

Si vigilas constante todos los movimientos de tu hijo, es más que probable que tengas miedo de cometer errores. Desafortunadamente, los errores pueden ser una gran herramienta de enseñanza y pueden ayudar a los niños a aprender cómo lidiar con el fracaso... por eso es importante que los niños sepan que los errores no son nada malo, más bien todo lo contrario.

Pero si no estás dispuesto a renunciar al control suficiente para que tu hijo pueda cometer un error, es probable que pienses que los errores son malos y que intentes encubrir cualquier error que cometa. Enseña a tu hijo que los errores están bien. Además, habla sobre la importancia de aceptar la responsabilidad por su comportamiento y muéstrale que todos cometen errores a veces.

Los problemas de salud mental pueden aparecer

Los niños que tienen padres controladores tienen un mayor riesgo de ciertos problemas de salud mental. La depresión y la ansiedad pueden surgir cuando los padres exigen obediencia y los niños no tienen la libertad de expresarse.

Es necesario que permitas libertad a tus hijos, que cometan errores y que aprendan de las consecuencias de sus acciones.

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