El poder dormir correctamente es básico para cualquier persona sobre todo en el caso de los niños. Un buen descanso ayuda a que el desarrollo y el crecimiento sea el más adecuado para los peques de la casa. Es labor de los padres el establecer una serie de rutinas dentro de la casa con el fin de que los niños duerman de manera plácida y eviten ciertos problemas relacionados con el sueño.
El poder dormir correctamente es básico para cualquier persona sobre todo en el caso de los niñosA día de hoy por desgracia, son algunos los niños los que no logran dormir como deberían y sufren de insomnio. En el siguiente artículo te hablamos de este problema del sueño y qué se debe hacer para solucionarlo.
En qué consiste el insomnio infantil
El insomnio infantil se produce cuando el niño tiene serios problemas a la hora de dormirse o se despierta demasiadas veces por la noche. Todo ello incide de manera negativa en el día a día del niño, ya que su cuerpo no ha descansado como debería. Se considera insomnio cuando es habitual que el niño no consiga conciliar el sueño y tenga problemas a la hora de dormir.
Diversos estudios señalan que casi un 30% de los pequeños de entre un año y cinco años tienen serias dificultades a la hora de dormir. Ello supone que el cuerpo no descanse y el niño presente un cansancio excesivo o problemas de irritabilidad que repercute de manera negativa en su día a día.
Los hábitos a la hora de dormir
En la gran mayoría de los casos de insomnio infantil, la causa principal no es otra que la de tener unos hábitos erróneos a la hora de irse a la cama. Tales hábitos son esenciales para que el descanso sea el adecuado y el niño logre descansar de una manera adecuada. Los padres deben establecer tales rutinas desde que son pequeños para que con el paso de los años, consigan dormir plácidamente y sin problema alguno.
Es normal que la falta de sueño provoque que el niño se muestre más nervioso de lo normal y muestre ciertos problemas de concentración. Para evitar esto, es esencial que los padres establezcan un serie de hábitos o de rutinas que ayuden a dormir mucho mejor. En el caso de que el niño siga durmiendo mal a pesar de la presencia de hábitos, los padres deben acudir a un especialista para que trate el problema.
Es labor de los padres el fijar tales hábitos desde que los niños son muy pequeñosRutinas para conseguir que el niño tenga un descanso sano
- Antes de irse a la cama, el niño debe realizar una serie de hábitos que le permitan conciliar el sueño de la mejor manera posible.
- El niño debe tener una hora fijada a la hora de irse a la cama. No es buena idea el flexibilizar los horarios ya que el niño termina descolocado y repercute de manera negativa a la hora de descansar.
- La habitación del niño debe ser un lugar de la casa relajada y tranquila. Este ambiente sosegado ayuda al niño a conciliar mucho mejor el sueño y a dormir mejor.
- Un buen hábito antes de dormir puede consistir en que los padres lean un cuento. Este hábito además de ayudar a que el niño duerma, permite crear un vínculo esencial entre los padres y los hijos.
- Deben estar totalmente prohibidas el ver pantallas antes de irse a dormir. Se trata de un mal hábito que tienen muchos niños de hoy en día y que acaba repercutiendo de una manera negativa a la hora de conseguir un descanso plácido.
En definitiva, el establecer una serie de hábitos o de rutinas es esencial a la hora de evitar el citado insomnio infantil en los peques de la casa. Es labor de los padres el fijar tales hábitos desde que los niños son muy pequeños y lograr que el sueño sea el más adecuado posible.