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¿Alguna vez le has dicho a tu hijo que le vas a tirar todos los juguetes?
¿Alguna vez le has dicho a tu hijo que le vas a tirar todos los juguetes?

CRIANZA

¿Alguna vez le has dicho a tu hijo que le vas a tirar todos los juguetes?

¿Alguna vez le has dicho a tu hijo que le vas a tirar todos los juguetes? (Y no lo has hecho...)

¡Estás castigado hasta los 18 años! ¡Ve a tu habitación que no vas a salir jamás! ¡Te voy a tirar todos los juguetes a la basura! La mayoría de los padres ha dicho frases así alguna vez en su vida. Son palabras poco racionales... y salen de tu boca sin que lo hayas pensado mucho antes...

Cualquiera que sea la amenaza que le hayas dicho a tus hijos, la manera en que te recuperes de tu reacción exagerada es importante. Convierte tu arrebato de enfado e irracional en una oportunidad para enseñarle a tu hijo lecciones importantes de vida. A veces, evitar estos comportamientos es demasiado complicado, por eso, es importante que sepas remendar bien la situación.

No ignores lo que has dicho

Puede ser tentados ignorar la irracional amenaza que le has dicho a tus hijos una vez que ya estás en calma... pero esto le enviará a tu hijo un mensaje equivocado. Empezará a creer que realmente no quieres decir lo que dices. Esto no significa que necesariamente debas seguir hacia adelante con lo que has dicho.

Si le dijiste que ibas a tirar todos sus juguetes porque estabas enfadado porque tu hijo no recogió su cuarto... no saques la bolsa de basura. Fingir que nunca dijiste lo que dijiste tampoco es útil... tu hijo sentirá ansiedad al ver que dices una amenaza y después no cumples, se quedará confundido.

Debes modelar tu conducta sobre cómo asumir la responsabilidad de tu comportamientoDebes modelar tu conducta sobre cómo asumir la responsabilidad de tu comportamiento

Ten una conversación honesta

Después de tener el primer punto en cuenta, una vez que te hayas calmado y que te hayas dado cuenta de que no puedes llevar a cabo tu amenaza, siéntate y habla con tu hijo. Debes modelar tu conducta sobre cómo asumir la responsabilidad de tu comportamiento. Pídele disculpas y deja claro que no vas a seguir adelante con esa amenazada.

Reconoce tus emociones y dile algo como: 'Estaba realmente enfadado y dije cosas que prefería no haber dicho, de verdad que lo siento'.

Proporciona una consecuencia más razonable

Reemplaza la consecuencia irracional con la que amenazaste inicialmente con una consecuencia más lógica. Si tu hijo no ha recogido los juguetes, quita los privilegios hasta que lo haya limpiado. Si tu hijo adolescente llegó tarde a casa, no le permitas salir durante 3 días.

Explica la nueva consecuencia a tus hijos y deja claro que seguirás adelante con ella. Demuéstrale que quieres decir lo que dices y que dices lo que quieres decir. Después de reconocer tus emociones tu hijo dejará de sentirse confundido.

Debes recordarte que no tienes que llevar a cabo consecuencias en el futuro mientras estas experimentando emociones intensasDebes recordarte que no tienes que llevar a cabo consecuencias en el futuro mientras estas experimentando emociones intensas

Evita que vuelva a pasar

En ocasiones, las amenazas exageradas se derivan del estrés que muchos padres tienen acumulados. Si estás agotado/a cuando llegas del trabajo o tienes problemas económicos es más probable que lo pagues con tu hijo... Si este es tu caso, toma tu comportamiento como una señal de advertencia de que tu nivel de estrés está demasiado alto. Tendrás que aprender a controlar tu estrés de forma saludable para ser mejor padre o madre.

Si tu reacción exagerada se debe a la frustración por el mal comportamiento de tu hijo porque es constante, busca un plan para que se corte de raíz. Identifica las consecuencias más efectivas que puedes utilizar y sé productivo para que puedas ser menos reactivo. Puedes crear un sistema de economía de fichas, tablas de puntos, etc.

Si reaccionaste de forma exagerada porque estabas en un momento delicado de tu vida, respira profundamente siempre antes de responder. Si tu hijo te ha dicho que te odiaba es probable que reacciones de forma exagerada cuando te sientas atacado emocionalmente. Debes recordarte que no tienes que llevar a cabo consecuencias en el futuro mientras estas experimentando emociones intensas.

Si tienes problemas para controlar tu ira, busca ayuda profesional. Un profesional de salud mental capacitado puede ayudarte a regular tus emociones y mejorar sus habilidades de crianza.

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