Si tienes un hijo/a que es demasiado 'terco' u obstinado, es necesario que trabajes en equipo con él en lugar de ir contra él o ella. Quizá tu hijo se niega a escuchar lo que dices o no te hace caso cuando le dices que haga algo. En realidad un niño que es obstinado puede llegar a ser un líder natural e independiente, por lo que es algo positivo y merece la pena reconocerlo y aceptarlo.
Aunque es cierto que tus hijos pueden tener más rabietas de lo normal por llamar tu atención, puede convertirse en una atención negativa y reforzar este comportamiento poco deseado. Por este motivo, es importante que sepas cómo actuar ante el comportamiento de un niño obstinado.
Conecta con tu hijo, pero no te enfrentes
Una de las razones por las cuales los padres de niños obstinados se sienten frustrados con frecuencia es porque parece que sus hijos no les escuchan o les están ignorando. Ten en cuenta que tu hijo se puede sentir igual, es decir, que no le escuchas ni tienes en cuenta sus necesidades.
Te irá mejor si, en lugar de abalanzarse sobre tu hijo/a y tratar de hacer cumplir tu voluntad, intentas que se abra sobre lo que siente, por qué y qué puedes hacer al respecto. Sobre todo, esto significa darle espacio para tener una voz y asegurarte de que sepa que te ha escuchado.
Aunque tu hijo sea pequeño, se puede sentir igual que tú cuando tus amigos no te toman en cuenta para tomar una decisiónLas opciones para darle control
Aunque tu hijo sea pequeño, se puede sentir igual que tú cuando tus amigos no te toman en cuenta para tomar una decisión. Aunque como padre o madre debes saber qué tiene que hacer tu hijo en cada momento, es necesario que le ayudes a tener un pensamiento crítico y a aprender a tomar decisiones. Esto se hace dándole opciones para que sea capaz de escoger la que crea conveniente y que así, sienta que de algún modo tiene también el control de la situación.
Por ejemplo si tu hijo quiere ver la televisión y es hora de ir a la escuela y aún no se ha vestido, le puedes decir que ver la televisión no es una opción, pero sí puede escoger entre dos camisetas para que se ponga la que más le gusta.
No pierdas el control
Hay veces en la que los padres pierden la calma y la autoridad al mismo tiempo cuando comienzan a gritar a sus hijos. Nadie niega que es irritante, frustrante y enloquecedor acabar frustrado por un niño, pero si mantienes la calma, es mucho más probable que tu pedido sea escuchado. Esto es importante, porque los niños modelan su comportamiento en el de sus padres, por lo que, si eres propenso a los gritos, es probable que veas esto reflejado de ti en tus hijos.
Para un niño obstinado, se trata de salirse con la suya, así que haz que se sienta como si lo fueraTrabajo en equipo
Para un niño obstinado, se trata de salirse con la suya, así que haz que se sienta como si lo fuera. Trabaja con tu hijo/a, en lugar de contra él o ella. En lugar de darle las instrucciones por las que instintivamente se rebelará, persuade su comportamiento para que se ponga de tu lado sugiriéndole que hagáis cosas juntos.
Por ejemplo, puedes agregar emoción a las cosas diciéndole que es una competición para ver quién se viste primero, quién es capaz de recoger más cosas de la habitación de los juguetes etc.
Recuerda que tu hijo no quiere irritarte en todo momento, solo está tanteando las situaciones para saber cómo esperas que se comporte. Para ello, tendrás que armarte de paciencia para ser capaz de decirle qué esperas de tus hijos en cada momento pero sin perder el control en ningún momento. Tú eres la guía de tu hijo, no un sargento enfurecido todo el tiempo.