En realidad, no hay palabras de consuelo, pero tu presencia y tu cercanía pueden hacer que los padres destrozados por la pérdida de un hijo, puedan sentir cierto confort emocional. Puede resultar imposible encontrar las palabras de consuelo a alguien que está en pleno proceso de dueño, y más cuando se trata de la pérdida de un embarazo, un bebé o un niño. No es algo fácil de hacer, pero esos padres necesitan buenos amigos en los que apoyarse.
No hay nada 'perfecto' que decir
Es importante que comprendas que no hay nada que sea correcto o incorrecto de decir. No hay nada en el mundo que se pueda decir para disminuir la agonía o el dolor de los padres. Lo mejor que se puede hacer es reconocer su pérdida y validar sus sentimientos. Una vez que te hayas liberado de la presión de decir 'lo correcto' te resultará más fácil acercarte a esos padres afligidos.
Una gran parte de apoyar a los padres en duelo no consiste en tener todas las palabras correctas, sino en escuchar, reconocer su pérdida y dolor, y encontrar maneras de satisfacer sus necesidades durante los meses posteriores a la pérdida.
No evites la conversación sobre la pérdida, es posible que necesiten desahogarseHablar con los padres en duelo
No evites la conversación sobre la pérdida, es posible que necesiten desahogarse. Quizá sientas miedo de mencionar el nombre de su hijo para no recordarles el dolor, pero en realidad, debes tener en cuenta otra cosa. Ten en cuenta la cita de Elizabeth Edwards cuando dijo: 'Si conoces a alguien que ha perdido un hijo o que ha perdido a alguien que es importante para ellos, y tienes miedo de mencionarlo porque crees que podría hacerlos sentir tristes recordándoles que murieron, no olvidaron que murieron. No les estás recordando eso. Lo que les estás recordando es que recuerdas que ellos vivieron, y ese es un gran regalo'.
Solo tendrás que pensar en los límites que se necesita tener cuando hables de su hijo fallecido. No evites la conversación, considera que el hecho de reconocer su pérdida no aliviará su dolor, pero estarás apoyándoles emocionalmente en su duro trabajo de duelo.
Solo tendrás que pensar en los límites que se necesita tener cuando hables de su hijo fallecido¿Qué puedes decir?
Ten esto en cuenta cuando interactúes con padres que están pasando por el dolor de haber perdido a un hijo:
- Escucha su dolor y asegúrale que te gustaría escuchar o hablar sobre lo que necesitan compartir.
- Ofrécete para hacer llamadas telefónicas en su nombre y explicar a otros familiares lo ocurrido.
- Hazles saber tu voluntad de ayudarles en todo lo que necesiten mientras hacen los arreglos funerarios.
- Prepara la comida familiar y coordínate con otros amigos y familiares para que también ayuden en hacer la compra, prepararles la comida o cuidar de los otros hijos o de las mascotas.
- Pregunta si necesitan cualquier tipo de ayuda, si te dicen que no, fíjate bien en qué pueden necesitarte.
- Diles que les llamarás para ver cómo se encuentran pero que si no tienen ganas de hablar que lo entiendes y que pueden comunicarse por mensaje.
- Hazles saber que pueden contar contigo cualquier día a cualquier hora.
- En los meses posteriores habrán momentos que necesiten intimidad porque serán extremadamente difíciles como el Día de la Madre, el Día del Padre, Navidad, la fecha de cumpleaños de su hijo/a fallecido/a, etc.
Cosas que NO debes decir
Debes evitar frases típicas aunque seas creyente. Puede que pienses que son ideales para brindar consuelo, pero no siempre es así. Debes comprender que tus creencias pueden incluso ofender a otros y ser frases tremendamente dolorosas. Hay cosas que es mejor evitar decir como por ejemplo:
- Era la voluntad de Dios
- Cuando mueras te reunirás con él/ella
- Ha sido cosa del destino
- Te sentirás mejor cuando pase el tiempo
- Sé cómo te sientes
- Al menos tienes otros hijos
- Tu hijo está en el cielo, allí estará bien observándote
- Está a tu lado aunque no puedas verle ni tocarle