¡Ya está aquí! Como cada año, e l Día del Padre llega para homenajear a todos esos grandes padres que, además de serlo, disfrutan cada día de la presencia de sus hijos. Y es que si hay una figura importante en la vida de los niños, además de la de su madre, es la de su padre. Los progenitores son ese pilar en el que los más pequeños se apoyan, del que se valen para ir creciendo cada día más.
Es por eso que hay que aprovechar estos días, e incluso cualquiera, para felicitar a los padres por la labor que realizan diariamente. Porque sí, el Día del Padre es un día ideal para homenajear a los padres, ¡pero cualquier día puede ser igual de válido! Mas, ¿cómo conseguimos emocionar a nuestro padre en un día tan especial como este? ¡Aquí tenemos algunas ideas que te gustarán mucho!
Muchos padres suelen leer a sus hijos libros por las noches para conseguir que estos se duermanUn álbum de fotos personalizado
Los regalos, o los detalles, no tienen por qué ser siempre muy caros para conseguir llegar al corazón. Es más: algo tan sencillo como juntar diez o doce fotografías antiguas que tengas por casa puede hacer que el Día del Padre sea algo mucho mejor que cualquier otra cosa. Los regalos sentimentales son siempre mucho más efectivos.
Es por eso que, aunando unas cuantas fotografías y elaborando un bonito álbum, puedes emocionar fácilmente a tu padre. Le puedes hacer recordar cuando eras pequeño, cuando naciste, vuestros primeros momentos juntos, vuestros viajes... ¡Absolutamente todo!
Prueba con una carta hecha por ti
Tras las fotografías, no hay nada más personal que escribir algo de tu propio puño y letra. No te presiones: le estás escribiendo a tu padre, le gustará lo que le escribas sí o sí. Lo hagas mejor o peor, lo importante es lo que consigas transmitir. Comienza hablándole de lo mucho que te importa, de todos los momentos que habéis vivido juntos y de hasta qué punto te ha influido de forma positiva su presencia. ¡Seguro que le encanta!
Un libro antiguo plagado de anotaciones
Muchos padres suelen leer a sus hijos libros por las noches para conseguir que estos se duerman, o por las tardes para entretenerles. Si este era tu caso, el Día del Padre de este año será para ti pan comido, y disfrutarás lo indecible viendo cómo tu padre se emociona de sobremanera. Solo tienes que coger ese libro que acostumbraba a leerte, y llenarlo de dedicatorias. Escribe eso que siempre os hacía reír del libro, o eso que te daba ganas de llorar; subraya tu parte preferida, y llena de recuerdos una historia que, de por sí, ya está plagada de ellos.
¿Ha perdido algo hace poco?
Puede que lo sentimental no vaya tanto contigo, y que prefieras optar por algo mucho más sencillo. En ese caso, no tiene más que pensar un poco. ¿Ha perdido algo hace poco? ¿Sabes que necesita algo con urgencia, pero no ha podido comprárselo por cualquier motivo? Aprovecha el Día del Padre para darle justo eso que estaba buscando, ¡y verás cómo se ilusiona!
Puede que lo sentimental no vaya tanto contigo, y que prefieras optar por algo mucho más sencilloUna escapada en familia
Si no tienes mucho dinero, o no dispones de mucho tiempo, siempre puedes regalarle una escapada en familia (a canjear cuando él prefiera, incluso el propio Día del Padre). No hace falta que viajéis muy lejos, puede que con un paseo por el campo os sea más que suficiente. ¡O visitar los lugares más recónditos de la ciudad! Cualquier plan es bueno cuando la compañía apetece.
Una cena, o una comida. ¡O incluso un desayuno!
Si una escapada te roba demasiado tiempo, piensa que la opción de regalarle una comida o una cena en tu compañía siempre será agradable. No solo disfrutará de la comida, sino que también lo pasará bien, y tendrá nuevos recuerdos para almacenar de por vida.
Es muy fácil pensar diferentes ideas para conseguir emocionar a tu padre, y hacer de el Día del Padre algo único y especial. Lo único que debes hacer es pensar qué es lo que mejor se adaptará a lo que él busca o necesita, ¡y hacerle feliz!