La última letra del abecedario es la inicial de nombres que denominan a personas muy especiales. Han nacido para mandar, son decididos, capaces y no les gustan las medias tintas. Valoran mucho la intuición y se dejan llevar por ella, aunque siempre valoran las consecuencias que pueden tener sus decisiones. Quienes llevan un nombre que comienza por Z son unos apasionados de los números y las ciencias con la cabeza muy bien amueblada.