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Por qué tu hijo pequeño debe jugar con bolas
Por qué tu hijo pequeño debe jugar con bolas

JUEGOS INFANTILES

Por qué tu hijo pequeño debe jugar con bolas

Las bolas de colores son juguetes indispensables para el desarrollo de los niños. Descubre por qué y porque no deben faltar en la vida de tus hijos.

¿Alguna vez te has dado cuenta de cómo a los niños les encanta jugar en una piscina de bolas? Aunque si lo piensas bien, también les encanta hacerlo a cualquier persona, sin importar la edad. Parece que las bolas son un juguete que no tienen límites y que todos y cada uno de nosotros nos hace que se estimule nuestra imaginación y nuestras ganas de pasarlo bien. Con las bolas se juega a darles patadas, lanzarlas, rodar encima de ellas, botarlas...

Las bolas mejoran las habilidades motoras, la coordinación mano-ojo de los niños y también mejoran la comprensión del juego individual y social. Los juegos de bolas son importantes para el desarrollo de todos los niños pequeños. Las habilidades que se aprenden con las bolas serán útiles siempre que también juegue de manera colaborativa y/o competitiva.

Las bolas de colores pequeñas son fáciles de encontrar, son baratas y los niños lo usan en grandeLas bolas de colores pequeñas son fáciles de encontrar, son baratas y los niños lo usan en grande

Lo que tu hijo aprende jugando con bolas

Les permite tener el control

Las bolas de colores pequeñas son fáciles de encontrar, son baratas y los niños lo usan en grande. Si además metes todas las bolas en una pequeña piscina hinchable, aún lo pasarán mucho mejor. Los pequeños potencian las habilidades motoras y se familiarizan con el entorno. Desde que los niños son pequeños les fascinan los objetos que ruedan por el movimiento continuo que genera, igual que ocurre con las bolas.

Las bolas hace que los niños sientan el control de algo que no son solo sus propios movimientos. Rodar una pelota hacia delante y hacia atrás es una forma de construir un vínculo social entre dos personas y también es una lección que los niños aprenden y que es necesaria para su desarrollo: causa y efecto o acción-reacción.

Tendrán nuevas habilidades

Los niños pequeños descubrirán gracias a las pelotas, los diferentes efectos como rebotar, rodar, lanzar, soltar y tomar la pelota. Una bola seguirá siendo un juguete entretenido tanto si tu hijo juega de forma independiente o con otros niños. Los juegos con bolas también son indispensables para el desarrollo de habilidades sociales, aprender a compartir, seguir instrucciones o incluso, para aprender a negociar diferentes reglas del juego.

Es importante escoger las bolas correctas

Los niños pequeños podrán descubrir las habilidades de una pelota y los diferentes efectos que tiene, siempre y cuando se escojan las pelotas correctas. Las bolas de plástico típicas para rellenar piscinas hinchables son las idóneas. Una bola seguirá siendo un juguete entretenido pero es importante primero empezar a jugar con los niños con las pelotas para que aprendan a cómo divertirse con ellas.

Hay mucha variedad de opciones en las bolas, tanto de tamaño como de firmeza. Las bolas grandes necesitarán las dos manos para lanzar, lo cual es una habilidad completamente diferente a tirar una pelota de tenis pequeña con una mano. Dale a tu hijo la oportunidad de practicar con ambas pelotas. Cuanto más ligeras mejor para los niños pequeños.

Las bolas también deben tener reglas

Se necesita establecer reglas básicas sobre cómo lanzar pelotas, dentro o fuera y sobretodo, cumplirlas. O se juega dentro de casa o fuera, o con unas bolas dentro (las pequeñas) y con otras fuera, (las que son más grandes). También se tendrán que poner reglas como por ejemplo: no lanzar pelotas a las personas a no ser que sea jugando y estén preparados para atraparlas, etc. Dile a tu hijo que si las pelotas las lanza demasiado fuerte puede hacer daño a los demás.

Hay mucha variedad de opciones en las bolas, tanto de tamaño como de firmezaHay mucha variedad de opciones en las bolas, tanto de tamaño como de firmeza

Explica las reglas de las bolas a tus hijos acorde a su edad y a la comprensión que tengan en cuanto a la información que le puedas dar.

Guardar las bolas

Una caja grande o una canasta de la ropa bonita pueden ser buenas medidas para guardar las bolas y que no acaben las bolas de colores por todas partes. Además, si es una canasta bonita a tu hijo le puede gustar divertirse cuando toque guardar las bolas si lo hacéis en plan juego, lanzándolas a ver quién encesta más. Las cestas de mimbre, de ropa o recipientes de plástico son buenas ideas. Lo que es importante es que el cesto no sea demasiado profundo para evitar accidentes y que tu hijo no caiga en el interior cuando quiera coger las bolas.

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