Desarrollar la autoestima es un componente central de la prevención del acoso escolar. Con una autoestima saludable, los adolescentes no solo tendrán más confianza, sino que también podrán identificar sus fortalezas, y sus debilidades, y seguir sintiéndose bien con ellos mismos. Una autoestima saludable también ayuda a proteger a los adolescentes del bullying. Los agresores tienen menos probabilidades de apuntar a los niños que confían en quiénes son. Y, si son objetivos, su sólida autoestima les ayudará a lidiar con este problema.
Las personas que intimidan a otros están buscando a alguien que reaccione a sus palabras o acciones hirientes. Como resultado, los acosadores se centran en adolescentes que no son confiados o asertivos. Pero si tu hijo adolescente se encoge de hombros ante el ataque verbal de un acosador, lo ignora o simplemente no muestra ninguna reacción emocional, será menos probable que el abusador lo intente nuevamente.
Fomentar una autoestima saludable en tus hijos también tiene otros beneficios. Por ejemplo, una sólida autoestima protege a los adolescentes del consumo de drogas, alcohol, de las relaciones poco saludables, etc. Aquí hay ideas sobre cómo desarrollar la autoestima en los adolescentes y prevenir el acoso escolar.
Las personas que intimidan a otros están buscando a alguien que reaccione a sus palabras o acciones hirientesPasa tiempo con tu hijo adolescente
Cuando pasas tiempo con tus hijos adolescentes estás comunicándoles que son importantes para ti, por lo que eso les ayudará a tener una buena autoestima. Además, pasar tiempo juntos permitirá que construyáis una relación sólida. Es la base que se vuelve muy importante en la vida a medida que se enfrentan a más desafíos. Los niños que saben que sus padres les quieren con todo su corazón y de forma incondicional, tendrán mayor fortaleza en la vida que aquellos niños en las que sus padres no están dentro de sus vidas cómo deberían.
Respeta y apoya sus pasiones
Cuando los adolescentes tienen áreas en sus vidas donde se sienten confiados, esta actitud se trasladará a otras áreas de la vida, reduciendo la probabilidad de que sean acosados. Cualquier actividad agradable en la que sobresalga tu hijo creará confianza. Ayuda a tu hijo adolescente a aprovechar sus fortalezas y encontrar algo que disfruten. Entonces, ayúdale a perseguir estas pasiones.
Permite que cometa errores
Anima a tu hijo adolescente a tomar riesgos razonables y trata de no protegerle o rescatarle de los reveses de la vida. Permite que tu hijo experimente contratiempos y decepciones sin sentirse fracasado. En cambio, es importante que le enseñes cómo aprender de las situaciones y seguir adelante. Hacerlo contribuirá en gran medida a desarrollar resiliencia.
Es necesario que tu hijo adolescente sepa que le amas de forma incondicionalMuestra tu amor incondicional
Es necesario que tu hijo adolescente sepa que le amas de forma incondicional. No tengas miedo a decirle que estás orgulloso/a de él/ella, incluso cuando falla. Esto no es lo mismo que aumentar su ego, es necesario enfatizar que la perfección no es importante, si no que es el trabajo duro y el esfuerzo lo que realmente importa en todo momento.
Los niños que se consideran adecuados, competentes y amados no se sentirán amenazados por las diferencias o los éxitos de los demás.
Reconoce sus buenas elecciones
Muchas veces, los padres corrigen el mal comportamiento y las elecciones, pero luego se olvidan de reconocer las cosas buenas que hacen sus hijos adolescentes. Es más probable que los niños crean en sí mismos y en sus habilidades cuando reciben un refuerzo positivo cuando hacen algo bien. Además, señalar los aspectos positivos ayuda a su adolescente a ver el mundo desde una perspectiva más positiva. Si te centras solo en lo negativo, entonces tus hijos tenderán a centrarse o detenerse en los aspectos negativos del mundo que les rodea.
Tus hijos si sienten que son amados de forma incondicional, que su hogar es su refugio y su autoestima es fuerte, entonces, sabrán que el acoso escolar es algo pasajero y que lo que les ocurre a unos agresores por la cabeza, a ellos no les define como persona.