No es nada nuevo el saber que la contaminación nos afecta a todas las personas. La sociedad sabe que la contaminación es negativa para nuestra salud y nuestro planeta pero realmente son pocos los que realmente están concienciados de que es trabajo de todos que podamos disfrutar de un planeta menos contaminado y así disminuir las enfermedades causadas en las personas por culpa de la contaminación.
La exposición a partículas finas durante la vida fetal se asoció con una capa externa más delgada del cerebroPero, ¿es posible que la contaminación afecte al cerebro de los niños? En realidad, la creciente exposición de los bebés a los 'niveles seguros de contaminación del aire' está relacionado con anormalidades cerebrales que pueden afectar a la función cognitiva a largo plazo. Esto ha sido mostrado por un estudio realizado por los Países Bajos.
La contaminación y el cerebro de los niños
Se observa que la contaminación puede tener efectos en el desarrollo cerebral en relación con los niveles de partículas de contaminación que se encuentran por debajo del límite actual de la Unión Europea. No se puede garantizar, según el estudio, la seguridad de los niveles actuales de contaminación del aire en las ciudades. Esto lo comentó la Dra. Mònica Guxens, del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal) y Erasmus University Medical Center.
¿La contaminación podría causar TDAH?
La exposición a partículas finas durante la vida fetal se asoció con una capa externa más delgada del cerebro, llamada corteza, en varias regiones. Estas anomalías cerebrales contribuyen en parte a la dificultad del control inhibitorio: la capacidad de regular el autocontrol sobre las tentaciones y el comportamiento impulsivo. Esto está relacionado con problemas de salud mental, como el comportamiento adictivo y el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH).
Un estudio de 700 niños para comprobarlo
El cerebro del feto es particularmente vulnerable durante el embarazo ya que aún no ha podido desarrollar los mecanismos de defensa necesarios para protegerse de las toxinas ambientales. El estudio hizo un seguimiento de mujeres embarazadas, y en total se tuvo en el estudio un total de 783 niños que aún no habían nacido.
Los investigadores evaluaron los niveles de contaminación del aire en el hogar mediante campañas de monitoreo de la contaminación del aire. Incluyeron niveles de dióxido de nitrógeno (un contaminante aéreo prominente causado por el tráfico y el tabaquismo), partículas gruesas y partículas finas.
Las imágenes cerebrales realizadas cuando los niños tenían entre 6 y 10 años revelaron anomalías en el grosor de la corteza cerebral del precúneo y la región frontal media rostral. A pesar de la relación entre estas alteraciones de la estructura cerebral y la exposición a partículas finas, los niveles residenciales promedio de partículas finas en el estudio estaban muy por debajo del límite aceptable actual establecido por la UE. Los niveles residenciales promedio de dióxido de nitrógeno estaban en el límite seguro.
La contaminación del aire y el cerebro en desarrollo
La contaminación del aire es perjudicial para los pulmones, corazón y otros órganos para cualquier persona, pero nunca se había estudiado los efectos en el cerebro del feto en desarrollo. Los estudios existentes de las mujeres que fuman y que inhalan estas toxinas también muestran como estas toxinas pueden tener efectos negativos en el desarrollo cognitivo de los fetos.
La contaminación es un problema medio ambiental que nos afecta a todos los habitantes del planetaLos hallazgos del estudio sugieren que la exposición a niveles incluso inferiores a los que se consideran seguros podría causar daño cerebral permanente. Por este motivo es importante que las mujeres embarazadas sean conscientes de estos datos para poder minimizar al máximo posible su exposición a lugares donde puedan haber altos niveles de contaminación ambiental.
En este sentido, la contaminación es un problema medio ambiental que nos afecta a todos los habitantes del planeta y por este motivo, es necesario que se tomemos conciencia de este problema y que pongamos mediante pequeñas acciones diarias, remedio.