La primavera es esa época del año en la que encontrar ropa adecuada es realmente complicado. Vestir con manga larga apetece solo a veces, y con una manga corta se puede llegar a pasar bastante fresco en según qué momentos; además, puede que el llevar una chaqueta en la mano todo el día acabe provocando más molestia que otra cosa. Si es complicado para un adulto decidir cómo vestir, y eso que es plenamente consciente de su temperatura corporal, ya puedes imaginar lo difícil que es para un padre o para una madre decidir qué ropa ponerle a su bebé. Porque los bebés todavía no son capaces de decidir qué ropa prefieren llevar, no pueden decir si tienen frío o calor... Con lo cual hay que improvisar bastante en este sentido.
Dependiendo de la zona en la que nos encontremos, la primavera será más cálida o más fría. Por ejemplo, no es lo mismo la primavera en Andalucía que la primavera en Asturias; esto hay que tenerlo muy en cuenta cuando vayas a decidir qué ropa ponerle a tu bebé. Debes saber adecuarte a las condiciones climáticas de la zona en cuestión para así poder vestir a tu hijo de la forma más conveniente posible.
Lo que vamos a ver hoy son una especie de consejos para vestir a un bebé en primavera, dependiendo también del tipo de primavera que cada uno esté viviendo. Porque, como ya hemos señalado, no es lo mismo una primavera de quince grados que una de treinta.
Las primaveras más cálidas
Hay zonas en las que la primavera apenas existe, donde el invierno deja paso al verano sin apenas transición. En esos casos, lo mejor que se puede hacer es optar siempre por un pantalón fino y una camiseta, de tal forma que el bebé esté protegido de cualquier racha de viento que pueda venir, pero también esté fresco si el calor comienza a apretar. También puedes optar por un vestido o una falda combinada con una blusa, algo elegante que te permite ver a tu hija bien vestida y a ella le permite estar fresca.
Debes tener en cuenta el calzado, puesto que esto forma parte de la vestimenta aunque a veces se olvide. Dependiendo de la edad del bebé te habrán recomendado que uses un tipo de calzado u otro, o incluso que le lleves descalzo para que su pie esté más libre. El único consejo que podemos añadir nosotros es que controles la sudoración del pie de tu bebé, para ver si necesita que, en algún momento dado, le dejes los pies al aire para que estos estén mucho más frescos. La temperatura corporal se rige también por los pies, y si los tiene frescos probablemente se encontrará fresco al completo.
Si lo ves necesario, o si vas a salir por la noche, lleva una rebeca o algo fresco para poder ponérselo por encima. De esta forma si el bebé empieza a tener frío podrás prevenir un posible resfriado. Con estos consejos sobre ropa, podrás vestir a tu bebé en primavera de una forma mucho más sencilla.
Primaveras más frías
No obstante, hay otras zonas donde la primavera es mucho más fría. En esos casos, los pantalones finos deben dejarse para el verano, puesto que es mejor optar por un término medio. Quizás los pantalones de invierno den demasiado calor, mientras que los pantalones de verano no abrigarán lo suficiente; en ese caso, el vaquero será la mejor opción. Un vaquero normal, de entretiempo, será la prenda idónea para vestir a tu bebé sin que este pase ni calor ni frío. En la parte de arriba lo mejor es optar por un jersey fino y, si hace falta, también alguna rebeca o chaqueta fina. En cuanto al calzado, los zapatos cerrados son la mejor alternativa en este caso, siempre acompañados de un calcetín más o menos fino.
Si estás en una zona donde las lluvias sean habituales, quizás sería buena idea que llevaras un chubasquero siempre en el carro del bebé, o en alguna bolsa; así, si llueve, podrás evitar que se moje. Hay chubasqueros que apenas ocupan espacio, con lo cual no tendrás ningún problema a la hora de portarlo.