Aunque muchos padres no sean capaces de entenderlo, las travesuras forman parte del desarrollo normal de los niños. Es verdad que hay pequeños que son mucho más traviesos que otros, lo que provoca que muchos padres pierdan la paciencia y no sepan como actuar ante tal conducta. En el siguiente artículo te hablamos de los motivos o las causas por las que los niños hacen travesuras y qué hacer ante ello.
Las travesuras forman parte del desarrollo normal de los niñosLas travesuras durante la infancia
La naturaleza propia de los niños hace que las travesuras sean normales y habituales durante toda la infancia. Como todo en la vida, hay niños que son mucho más traviesos que otros. El problema de tales travesuras se debe al hecho de que hay casos en los que tales conductas van mucho más allá, pudiendo provocar ciertos daños tanto en objetos como en personas. Las travesuras comienzan a hacerse notar a partir de los 3 o 4 años del niño aunque como ya hemos recalcado más arriba se trata de una conducta normal a la vez que natural dentro de la infancia.
Motivos por los que los niños cometen travesuras
Son varias las causas o los motivos por los que los niños son traviesos y no atienden a las normas establecidas por los padres:
- Los cambios producidos en la escolaridad suele ser una de las causas de tal aumento en las travesuras. A partir de los 6 años de edad el niño pasa de preescolar a la escuela, un cambio importante en su vida que se puede traducir en ciertas conductas traviesas.
- La falta de atención por parte de los padres es otro de los motivos por los que el niño puede llegar a ser travieso. Tal conducta es una manera clara de llamar la atención de los progenitores.
- El aburrimiento es otro de las causas más habituales por las que un niño puede hacer travesuras. Se trata de algo natural por lo que no debería inquietar en exceso a los padres.
- El pasar poco tiempo con los padres y no realizar ciertas actividades en familia suele estar detrás de las travesuras de los pequeños. Por desgracia esto es algo muy normal en muchas de las familias de hoy en día.
- En otras ocasiones tales travesuras se deben al simple hecho de que los niños son niños y es algo natural e innato que no se puede evita, por mucho que haya ciertos padres que no puedan llegar a entenderlo. El carácter de los niños es otro de los motivos por los que pueden hacer más o menos travesuras en su día a día.
¿Ser travieso puede derivar en una patología?
Puede ocurrir que las travesuras sean consecuencia de algún tipo de patología que tenga el pequeño. De esta manera el niño demasiado travieso puede padecer hiperactividad o una falta de atención evidente, debiendo ser tratado en tales casos por un profesional.
De todas maneras no valen las meras conjeturas por lo que el diagnóstico lo debe realizar un profesional de la salud mental. Hay una serie de aspectos que pueden indicar que no se tratan de travesuras normales, sobre todo cuando se vuelven habituales en el tiempo y dañan a ciertos objetos y personas.
Los padres no deben ponerse nerviosos y comprender en cierta medida a sus hijosEn definitiva, en la gran mayoría de los casos las travesuras forman parte del desarrollo normal de los niños. Los padres no deben ponerse nerviosos y comprender en cierta medida a sus hijos. Hay que respetar en todo momento la naturaleza traviesa de los pequeños y entender que es algo normal en su desarrollo. Sin embargo el ser traviesos no significa que puedan hacer lo que quieran y saltarse las normas y los límites impuestos en el núcleo familiar.