Menú
¿Puedo viajar en avión con mi hijo recién nacido sin riesgos?
¿Puedo viajar en avión con mi hijo recién nacido sin riesgos?

CONSEJOS

¿Puedo viajar en avión con mi hijo recién nacido sin riesgos?

En Bekia te aconsejamos si es conveniente que utilices este método de transporte con un bebé recién nacido o si es mejor que esperemos hasta que sea un poquito más grande.

Te contamos cómo puedes volar con tu bebéTe contamos cómo puedes volar con tu bebé

Cuando nuestro tan esperado bebé llega al mundo tenemos ganas de compartirlo todo con él. A veces, los familiares se encuentran en ciudades diferentes o, por motivos laborales, tenemos que ir de viaje de un país a otro en avión.

Cuándo puede subir un bebé al avión

Un bebé sano, sin ningún tipo de problema de salud desde su nacimiento, puede viajar en avión a partir de entre las dos y las cuatro primeras semanas de vida. Eso es porque este es el tiempo que tarda el líquido del oído medio en salir del cuerpo y no le duela el oído en exceso debido a la presión en el avión durante el aterrizaje y el despegue.

Sin embargo, siempre será mejor que lo consultes con tu médico para estar segura que no le va a pasar nada en el aire a tu bebé, ya que durante el vuelo se presentan diversos peligros para el niño como dolencias en los oídos por la presión, temperaturas extremas, personas enfermas que puedan contagiar la enfermedad a nuestro recién nacido, turbulencias, etc.

Pueden volar a partir de las dos semanas de vida

Para darle de comer, bien sea el pecho o el biberón, quizás tengas que levantarte, ir al baño -si no quieres darle el pecho delante de los demás pasajeros- o bien pedirle a las azafatas que te calienten el biberón, etc.

Lo más conveniente es que lo alimentes mientras el avión hace el despegue y el aterrizaje, ya que esto le ayudará a aliviar el posible dolor que puede llegar a sentir en el oído medio por los cambios de presión.

Coloca una sillita especial para que tu bebé viaje adecuadamente Coloca una sillita especial para que tu bebé viaje adecuadamente

Si optas por darle el pecho durante el viaje, lleva agua también contigo, así evitarás que se deshidrate. Asegúrate también que bebé agua durante todo el vuelo, no solamente en el despegue y el aterrizaje. Este viaje será más costoso que un vuelo con un niño con más tiempo de vida, puesto que los recién nacidos necesitan mucha más atención y cuidados.

Cuando compres el billete te recomendamos que compres otro billete para el niño, si no tienen cunas situadas delante de los primeros asientos del avión. Algunas compañías te dejarán llevar el bebé en brazos durante todo el trayecto, pero la forma más segura de viajar con tu recién nacido es comprándole un billete individual y colocándolo en una sillita especial para bebés en aviones. De este modo también tendrás más espacio para los dos y te asegurarás de que está bien sujetado en todo momento.

Para evitar que el bebé sienta la tensión del viaje lo mejor es llegar con antelación al aeropuerto para evitar prisas, colas y nervios. Piensa que deberás alimentarlo cada tantas horas y seguir su horario lo más estrictamente posible.

Cuanto más tranquila estés tú, más lo estará tu bebé

Los contras de viajar con un bebé recién nacido

Siempre y cuando no sea estrictamente necesario, intentaremos viajar en avión con nuestro recién nacido lo menos posible, puesto que esto podría causarle dolencias en el oído por la presión, como ya hemos indicado, malestar por la posición ?independientemente de la duración del vuelo-, los ruidos de las demás personas y posibles enfermedades que pueda coger de los otros pasajeros.

 Cuida que tu bebé no moleste al resto de pasajerosCuida que tu bebé no moleste al resto de pasajeros

También debemos tener en cuenta que, si el vuelo es largo, el bebé puede llegar a llorar mucho tiempo en el avión. Eso no solamente será exasperante para ti, sino que puede llegar a molestar mucho a los viajantes que quizás quieran descansar durante el trayecto.

Hay personas que tienen mucho miedo durante el despegue y el aterrizaje y el llanto de un bebé que sufre dolor puede asustarles todavía más. Sea corto o largo el trayecto, el bebé recién nacido necesita tranquilidad, un horario a seguir y gozar de un ambiente que le ayude a tener el mejor estado de salud posible.

Por lo tanto, lo mejor será que esperemos a que nuestro pequeño sea un poco más mayor -a partir de los seis meses - para poder viajar con nosotros sin problemas y disfrutar al máximo de la experiencia juntos.

Te puede interesar