No cabe duda que la noche de Halloween ha ido ganando en popularidad en los últimos años, convirtiéndose en una de las fechas favoritas tanto para los niños como para los jóvenes. Es normal ver a muchos niños por la calle disfrazados de personajes de terror y pidiendo chucherías por las casas del vecindario.
Sin embargo no todo va a ser color de rosa, ya que hay niños que lo pasan realmente mal durante esta noche de Halloween. Los miedos salen a relucir y esta noche se convierte en una auténtica pesadilla para algunos niños. En el siguiente artículo te contamos cómo debes actuar si tu hijo se asusta demasiado durante esta noche de Halloween.
Qué hacer si el niño tiene miedo a la noche de Halloween
Hay que partir de la base de que el miedo es algo normal en los niños, ya que forma parte de su instinto de supervivencia y de su desarrollo a nivel evolutivo. No pasa nada por que el niño tenga miedo de vez en cuando y ante determinadas situaciones. En tal caso, resulta ideal el aprovechar el miedo que el niño tenga a esta noche, para trabajar el mismo y tratarlo de una manera adecuada.
Es por ello que en el caso de que tu hijo tenga miedo a esta noche del año tan emblemática, debes actuar de la siguiente manera o forma:
- No hay que quitarle ninguna importancia al hecho de que tu hijo lo pase mal y tenga miedo durante esta noche tan emblemática. No hay que minimizar sus emociones y lo que pueda llegar a sentir ante el maquillaje y los disfraces de terror. Este el primer paso para poder solucionar de manera adecuada este problema relacionado con el miedo a la noche de Halloween.
- En el caso de que tu hijo lo esté pasando realmente mal, es importante darle cierto apoyo emocional. Es bueno que sienta que no está solo y que tiene la ayuda de sus padres para poder superar dichos miedos. La falta de apoyo de los padres puede provocar que los miedos se acrecienten, llegando a minar su confianza y su seguridad.
- Si el niño no quiere disfrazarse no hay que obligarlo a hacerlo. Muchos padres cometen el gran error de disfrazar a su hijo a pesar de que no quiera hacerlo en ningún momento. Hay que respetar su decisión y no obligarlo a hacer algo que no quiere o desea. El niño no está obligado en ningún momento a participar en una fiesta que no le atrae nada y que le provoca miedo.
- En el caso de que decidas celebrar la noche de Halloween, lo más aconsejable es hacer una fiesta infantil que ayude a que el pequeño se lo pase bien. No hace falta disfrazarse con máscaras horrible y maquillajes terroríficos. Lo importante es que el niño disfrute de manera plena de esta noche y deje sus miedos aparcados por un tiempo.
Puedes optar por hacer manualidades, jugar a juegos de mesa o ver películas infantiles en familia.
En definitiva, la noche de Halloween no es divertida para todo el mundo. Hay niños que lo pasan realmente mal y no disfrutan a la hora de disfrazarse de monstruos o vampiros. Si ello ocurre es importante tratar el tema de la mejor manera posible, para que los miedos no vayan a más.
Recuerda no forzar al pequeño a celebrar algo que no quiere y que le provoca miedos. Hay que saber respetar en todo momento sus temores y miedos y ayudarlo de una manera emocional. No olvides tampoco empatizar al máximo con tu hijo y mostrarle todo el apoyo que necesite.