En la actualidad, el cáncer de mama es el tumor más frecuente en las mujeres. Su incidencia en todo el mundo supera el 20%, siendo en España una de las principales causas de muerte en mujeres con edades comprendidas entre los 35 y 64 años. No obstante, la aparición de este cáncer se suele producir antes de los 40 años.
Debido al elevado porcentaje de casos de cáncer de mama en el mundo, la prevención se ha convertido en uno de los principales objetivos para la investigación.
Son muchos los estudios que se han llevado a cabo con el fin de valorar la probabilidad de padecer cáncer de mama tras el parto y el período de lactancia materna. Lo cierto es que no existen resultados concluyentes que sirvan para esclarecer el papel que juegan las hormonas, dar el pecho y el embarazo en el desarrollo del cáncer de mama, puesto que existen muchas contradicciones entre los estudios y, además, la naturaleza de este cáncer es aún muy compleja.
Actualmente, la investigación ha puesto gran interés en los beneficios de la lactancia materna con respecto a la probabilidad que tienen las mujeres de padecer un tumor en alguna de las mamas.
Asimismo, existen factores de la lactancia materna que pueden explicar los beneficios de esta y el carácter protector que tiene. Estos factores son la reducción de estrógenos y la eliminación de agentes cancerígenos a través de la mama durante el período de lactancia materna.
Estudios recientes manifiestan que una de las causas que pueden explicar el aumento de cáncer de mama en los últimos años puede ser la baja natalidad. Existen datos que muestran que en cada nacimiento el riesgo de padecer un tumor de mama disminuye un 7% lo que conlleva a su vez un período de lactancia materna. Algunos estudios confirman que si este período perdura durante 12 meses el riesgo de padecer cáncer de mama se reduce un 4%.
Se cree que el aumento del cáncer de mama pueda estar relacionado con la baja maternidad¿Cuáles son las investigaciones más recientes sobre este tema?
En la Universidad de Carolina del Norte se llevó a cabo un estudio sobre la lactancia y el riesgo de padecer cáncer de mama. La muestra de mujeres estudiada fue de más de sesenta mil mujeres, analizando un estudio previo cuyos datos se basaron en una muestra de más de cien mil mujeres de 14 estados de América del Norte.
Una de las conclusiones más relevantes de este estudio es que se reduce la probabilidad de padecer cáncer de mama en un casi 60% en aquellas mujeres con antecedentes familiares que deciden dar el pecho a sus hijos durante varios meses.
Otro estudio llevado a cabo en nuestro país, más concretamente en la provincia de Granada, revela que existe una relación directa entre el hecho de dar el pecho durante varios meses y la disminución del riesgo de padecer cáncer de mama. Además, señala que existe la posibilidad de reducir a la mitad los casos de cáncer de mama si las mujeres deciden dar el pecho a sus hijos durante períodos de tiempo más largos (al menos un año).
¿En qué se basan estas investigaciones para indicar estas conclusiones?
A pesar de la ausencia de consenso entre los profesionales dedicados a este ámbito de la investigación, no hay dudas sobre los beneficios que aportan la lactancia y el embarazo en la disminución del nivel de estrógenos y en la modificación de las mamas.
Los niveles de estrógenos están estrechamente relacionados con el cáncer de mama debido a que los estrógenos aumentan el crecimiento de las células mamarias y si, una mujer está expuesta a esta hormona durante un período largo de tiempo, tiene más probabilidades de sufrir un cáncer de mama que la mujer que no se ha visto expuesta tanto tiempo.
Con respecto al embarazo, durante este periodo se reducen la cantidad de ciclos menstruales, lo que actúa como factor de protección para las mujeres. Parece ser que si una mujer se queda embarazada antes de los 30 años en un futuro tendrá menos probabilidades de sufrir un tumor en el pecho que aquella mujer que haya gestado después de los 30 años.
Para que la lactancia prevenga el cáncer de mama es recomendable mantenterla durante al menos 12 mesesAsimismo, el embarazo está ligado a la lactancia materna, la cual como hemos visto a lo largo de este artículo, se proclama un factor de protección en aquellos casos en los que las mujeres decidan dar pecho a sus hijos y, además, durante períodos de tiempo prolongados, siempre superando los 12 meses.
¿Cuáles son los beneficios de dar el pecho?
Los beneficios de dar el pecho son muy numerosos y deben ser conocidos por todas aquellas mujeres que tengan dudas sobre amamantar o no a su bebé.
1. Los niños que reciben leche materna tienen menos probabilidades de sufrir infecciones o enfermedades.
2. La leche materna contiene componentes necesarios para los bebés que, además, facilitan la digestión.
3. Dar el pecho disminuye la cantidad de sangre que se pierde tras el parto y facilita que el útero se recupere antes y vuelva a tener su tamaño normal.
4. Si el período de lactancia materna se prolonga en el tiempo y supera los 12 meses, se reduce la probabilidad de sufrir cáncer de ovarios, cáncer de mama y osteoporosis.
5. Los niños prematuros se ven protegidos ante las enfermedades gastrointestinales tras recibir leche materna.
Estos son solo alguno de los beneficios que tiene la lactancia sobre las mujeres y los bebés. Sin embargo, parece que hoy en día son más las mujeres que se niegan a dar el pecho a sus hijos.
Como conclusión, las investigaciones están centradas en las medidas que pueden adoptar las mujeres para evitar el cáncer de mama. Tras los últimos hallazgos sobre el factor protector que adquiere la lactancia materna, aumentan aún más las razones por las que las mujeres no deben negarse a experimentar ese período tan gratificante y necesario entre una madre y su bebé.
Aunque aún no existe un consenso sólido entre los investigadores, cada vez se hace más evidente que el cáncer de mama puede reducirse considerablemente si las mujeres dan el pecho y prolongan este período hasta los 12 meses, o incluso más.