Cada momento de nuestra vida tiene una etapa que vamos viviendo. Si bien a todos nos gusta hacer las cosas a nuestro ritmo, algunas a veces nos las planteamos en ciertas ocasiones, ya bien sea porque la gente de nuestro alrededor a comenzado a hacerlas o porque creemos que es lo más adecuado. Algunas de estas son: consolidar la relación amorosa con una boda, el emanciparse, encontrar un trabajo estable o tener un hijo.
Sin embargo, todas estas decisiones debemos tomarlas siempre cuando nosotros mismos sintamos que es el momento adecuado, no solo por nuestro propio interés, sino también para el de las personas que se vean afectadas, en el caso que tu pareja o tus familiares o amigos también estén relacionados con ello.
Es normal que llegada cierta edad o después de mucho tiempo de relación con tu pareja te plantees la posibilidad de tener hijos . No obstante, es una decisión en la cual ambos debéis estar de acuerdo y tenéis que tener presente la gran responsabilidad que representa traer un bebé al mundo y formar una familia. Por lo tanto, si os estáis pensando la idea de tener hijos será preciso que tengáis en cuenta varios factores y valoréis así si os encontráis en el momento adecuado para hacer, tanto por vuestro bien como para el del bebé.
¿Es ahora un buen momento para tener hijos?
Lo primero que debes tener presente ante la idea de tener hijos es la estabilidad que tengas con tu pareja. Si tenéis muchas discusiones o no existe la confianza, el cariño o el respeto entre vosotros (o si no está siempre presente) quizás no sea el momento más preciso para que tengáis hijos. Debéis tener siempre en mente que los padres serán el modelo en muchos aspectos de la vida de los niños, por lo que una buena relación en la pareja es esencial para su felicidad, incluso si deciden separarse. El hecho de que siempre dialoguen y se respeten hará que los niños crezcan con unos valores más sanos y repitan este patrón con el resto de relaciones que puedan llegar a tener a lo largo de su vida.
Otro de los factores que debes tener en cuenta es la estabilidad económica. Un bebé representa una serie de gastos extra en tu vida que quizás no has terminado de valorar aún. Sería interesante que hicieses cuentas sobre todo lo que vais a necesitar cuando el niño nazca y durante toda su vida. Recuerda que no necesitas mucho dinero para que tu hijo sea feliz, pero sí que deberás proporcionarle una educación y todo aquello que necesite para que se sienta cómodo y feliz, como la ropa, la comida, la habitación, los libros de la escuela, etcétera.
El trabajo puede que llegue a ser otro de los puntos que deberías poner en tu lista antes de tener un hijo. No todo el mundo cuenta con un trabajo estable y, hoy en día, tampoco parece que ninguno de estos trabajos termine de estar del todo asegurado. Por lo tanto, una buena predisposición económica nos dará la tranquilidad de que todo va a ir mejor para nuestros hijos en el caso de que uno de los dos en la pareja pudiese perder su empleo.
El apoyo de la familia
Tener a los miembros de la familia siempre cerca será una ayuda para la pareja que quiera tener un hijo. Esto no quiere decir que sean los abuelos quienes tengan de hacerse caso del niño, pero sí que serán una gran ayuda cuando el bebé esté recién nacido y en el caso de que surgiese algún inconveniente cuando todavía no sea adulto y necesites la ayuda de algún familiar o amigo muy cercano.
Quizás la decisión de tener un hijo la estés tomando sin tener pareja estable y quieras ser padre o madre soltera. En este caso deberás también tener en consideración todos los consejos anteriores, pero además necesitarás de una persona de confianza absoluta por si te sucediese algo. Lo bueno de compartir la responsabilidad totalmente en pareja hará que uno pueda apoyar al otro. Esto no significa que el padre o la madre soltera no pueda hacerlo tan bien como una pareja, pero sí que sería importante que tuviese un apoyo en caso de emergencia, como la familia, al igual que lo tendría la pareja.
Así pues, la decisión de tener un hijo depende solamente de la persona que quiere tenerlo. La voluntad de tener un bebé es lo más importante, por lo que los dos deben estar completamente seguros de ello. Si además se tienen en cuenta todos los factores explicados todo esto ayudará a que ambos se sientan felices y puedan hacer que su bebé crezca en su hogar junto a una familia que le quiere y le dará la bienvenida con los brazos abiertos para el resto de sus vidas.