A día de hoy son muchos los padres los que se preguntan si es bueno el consentir a los hijos o si por el contrario es algo que se debe evitar. Lo que debe claro en todo momento, es que los padres tienen total libertad a la hora de educar y criar a los hijos sin entrar en juzgar si dicho estilo de crianza está bien o mal. En el siguiente artículo te hablamos de los aspectos positivos y negativos que tiene el hecho de consentir a los hijos.
El consentimiento de verdad es el citado afecto y las muestras de amor hacia los hijos¿Qué se entiende por consentir a los hijos?
Antes de llevar a cabo tal acción, los padres deben tener claro en que consiste consentir. Para muchos padres consentir no es otra cosa que darles a los niños cualquier tipo de capricho que tengan o deseen, para otros por el contrario no es más que darles muestras de afecto y de amor.
El consentimiento de verdad es el citado afecto y las muestras de amor hacia los hijos. Ello resulta muy positivo en relación con el desarrollo óptimo de los niños. El ceder a los diferentes caprichos que tengan los niños no es consentir y es algo que resulta bastante negativo en relación a su crianza.
Consecuencias negativas de ceder a los caprichos de los hijos
Son muchas las consecuencias negativas, las que se producen a la hora de consentir con el fin de ceder a los caprichos de los hijos:
- Poca tolerancia a la frustración sobre todo cuando reciben una respuesta negativa.
- Las rabietas y los enfados son habituales y acuden a las mismas para lograr lo que quieren.
- No se esfuerzan por nada.
- No son capaces de valorar las cosas.
- Tienen poca paciencia ya que están acostumbrados a tener las cosas al momento.
Este tipo de consentimiento suele generar problemas en el momento en que los niños acuden a la escuela. La realidad es otra diferente a la que tienen en casa, algo que suele ser perjudicial para los pequeños.
Qué beneficios tiene el consentimiento para dar amor y afecto
No es lo mismo el consentir para ceder a los caprichos del niño, que el hacerlo para dar diferentes muestras de amor y de afecto. Dicho afecto suele ser bastante beneficioso en relación al desarrollo de los niños:
- Ayuda a fortalecer el vínculo creado entre los padres y los hijos.
- El amor y el afecto ayuda a fortalecer el sistema inmunológico de los pequeños.
- Los niños se sienten más seguros y cuentan con una gran confianza en sí mismos.
- Favorece la autoestima de los niños.
- Reduce los niveles de estrés y de ansiedad.
El contacto físico y el afecto constante entre padres e hijos no es para nada malo en relación con el desarrollo de los niños. Esto es bueno a medio y a largo plazo ya que permite desarrollar una autoestima fuerte a la vez que sana. Se sienten seguros de sí mismos al comprobar que tienen una fuerte relación y vínculo con los padres.
En el caso de consentir a los caprichos, la crianza no es la adecuada¿De qué forma hay que consentir a los hijos?
Como has podido observar no es lo mismo el consentir a los niños con el objetivo de ceder a sus caprichos y deseos, que el consentir como sinónimo de afecto y de amor. En el caso de consentir a los caprichos, la crianza no es la adecuada y las consecuencias negativas de ello son bastante claras y evidentes. Si por el contrario los padres usan el consentimiento como vehículo para ofrecer amor y afecto, los beneficios de ello son bastante importantes, sobre todo en relación al desarrollo óptimo de los niños. No están de más los abrazos, las caricias o los besos como base de una buena crianza de los hijos.