No es fácil ser madre y empresaria. En la actualidad el mundo para las madres que son autónomas es bastante complicado. Si ya es complicado para las madres asalariadas... ¡para las madres autónomas aún más! Porque parece que sus derechos se reducen y lo peor, si no van al trabajo, es dinero perdido. Un dinero que necesita para poder sacar adelante a su hogar y a sus hijos.
Si eres una mujer y madre empresaria, primero; ¡felicidades! Eres valiente y además, puedes hacerlo bien, sin estresarte demasiado y pudiendo llegar a todo. No hagas caso de las demandas sociales, haz más caso a las demandas de tu hogar. Lo bueno que tienes, es que puedes planificarte acorde a tus necesidades laborales y sociales, ¡aprovecha eso! Aunque es más fácil decirlo que hacerlo, pero los empresarios deben reconocer que no siempre lograrán el equilibrio entre el trabajo y la vida familiar, pero sí pueden manejar menor sus vidas.
Las madres a menudo son alabadas como los superhéroes de sus hogares y la sociedad en general.Las madres a menudo son alabadas como los superhéroes de sus hogares y la sociedad en general. Por lo tanto, cuando se trata de madres emprendedoras, no cabe duda de que estas mujeres son una fuente de inspiración sin límites que sirven de motivación para que sus hijos y otras madres busquen el espíritu empresarial, una decisión que solo puede beneficiar al país en el que se encuentran, y que por eso, ¡se debería valorar aún más!
El estilo de vida de una mujer empresaria donde el negocio es un medio para un estilo de vida particular, ofrece una oportunidad única para las mujeres que necesitan cumplir con los deberes de la maternidad, pero que también son emprendedoras apasionadas. Pero si te resulta difícil compaginar tu vida laboral con la familiar, no te pierdas estos consejos para hacerlo de forma exitosa.
Confía en tus habilidades
Eres madre y mujer, tienes habilidades necesarias y suficientes para poder llevar tu negocio con éxito. E res mujer y por tanto eres multitarea, saber administrar bien el presupuesto y eres capaz de resolver problemas con éxito y sin estresarte demasiado. Pero recuerda que no eres una máquina, también necesitas tiempo de descanso.
Ten una buena organización
Es importante que tengas una buena organización para tener una estructura diaria. Si realizas un cronograma también te ayudará a tener un buen seguimiento de tus tareas comerciales y de tu vida familiar al mismo tiempo. Tendrás que tener autodisciplina para cumplir el cronograma. Los días que sean más difíciles, no te frustres si no llegas a todo, esos días tendrás que priorizar qué es lo más importante y qué puede esperar.
Ten estructura y apoyo en casa
Haz que tu familia participe en el negocio, es un gran campo de aprendizaje para tus hijos y solicita apoyo donde lo necesites. También puedes aprovechar la tecnología, como las compras a través de internet y las aplicaciones de planificación para aliviar la carga.
Olvida la culpa
La culpa no tiene que ir contigo, porque eres una mujer luchadora que trabaja duro por sacar tu negocio y tu familia adelante. Los empresarios deben reconocer que no siempre lograrán el equilibrio entre la vida laboral y personal, deben tener una visión más amplia y centrarse en los aspectos positivos que genera el funcionamiento de una empresa en lugar centrarse solo en los negativos. Así que deja la culpa a un lado porque eres luchadora y fuerte.
Sigue esforzándote por alcanzar tus objetivos, incluso cuando las cosas se pongan difícilesDelega en las personas correctas
Un pequeño negocio no puede pagar un personal altamente calificado, pero en cambio, si necesitas personas para tu negocio, deberás escoger a aquellas que sean apasionadas, con vocación de confianza y que puedas permitirte el salario que tendrás que pagarle.
Sé perseverante
Sigue esforzándote por alcanzar tus objetivos, incluso cuando las cosas se pongan difíciles. No tires la toalla a la primera de cambio, sé un ejemplo de lucha y perseverancia para tu familia. Pero recuerda que tu salud física, mental y tu familia, siempre serán lo primero.