Tanto adultos como niños podemos disfrutar de jugar a la consolaLos videojuegos y los niños es un tema que en ocasiones trae consigo polémica por varias razones. Las principales son, por un lado, el tiempo que los niños dedican a la consola y, por otro, la creencia de que incitan a la violencia. Sin embargo, ambas cosas tienen la misma solución: el control de los padres. Los videojuegos, al igual que las películas y los programas de televisión, están adaptados a diferentes edades, desde las infantiles hasta para adultos, y son los padres quienes deciden qué modelos quieren enseñar a sus hijos a medida que van creciendo.
No sólo es la violencia, también ocurre con el sexo, el terror, las drogas, etc. Son contenidos que pueden impresionar a los niños, y por ello no se recomiendan todos los juegos (ni películas, ni programas de la tele) a todos los públicos.
No obstante, el ver contenidos violentos en los videojuegos no causa que los niños o adolescentes tengan conductas violentas. El origen de estas se encuentran en otras alteraciones del comportamiento, otra cosa es que el niño de tendencia violenta imite a un personaje de videojuego o del cine como una manera de mostrar su agresividad. Donde queremos enfocar el hecho de no mostrar contenidos violentos a los niños es para evitar que se asusten o impresionen con ellos.
Mientras la empresa que desarrolla y vende el producto informe de las edades recomendadas, es responsabilidad de los padres aplicar el control parental y que los niños accedan o no a ello. Por tanto, si para nosotros es importante que nuestros hijos no vean ciertos modelos de comportamiento en la pantalla, debemos de ser consecuentes con nuestro modelo de educación y controlar esos contenidos.
El sistema PEGI: conoce las edades recomendadas de los videojuegos
Todo contenido de entretenimiento se encuentra catalogado dentro de un sistema de clasificación por edades, como ya conocemos de las películas, por ejemplo. En videojuegos existe el sistema establecido por la Información Paneuropea sobre Juegos, conocido por sus siglas: el PEGI. Este sistema concreto existe desde 2003 (antes la clasificación la establecía otro organismo, pero también la había), y su función es colocar en cada juego de consola u ordenador una identificación que indique a partir de qué edad se recomienda jugar y qué tipos de contenidos han hecho que ese juego tenga una edad concreta de recomendación (violencia, lenguaje soez, miedo, etc.).
En las tiendas especializadas de videojuegos nos asesorarán sobre el sistema PEGILos videojuegos tienen las siguientes etiquetas de edad: 3, 7 (de color verde), 12, 16 (de color amarillo) y 18 años (de color rojo).
- 3 años:
Es un juego apto para todas las edades, y cualquier contenido de violencia es el propio de dibujos animados infantiles. Los niños son capaces de discriminar los personajes del juego de la vida real, por el aspecto de los mismos.
- 7 años:
Sus características son similares a los juegos para 3 años, pero puede contener algún sonido o escena que pueda asustar a niños más pequeños.
- 12 años:
Puede contener algún tipo de violencia más gráfica que en las categorías anteriores, hacia personajes más parecidos a humanos o hacia animales, pero no tan explícita como en los juegos para más mayores. Puede haber lenguaje soez grave, pero no sexual.
- 16 años:
Son juegos donde ya podremos encontrar violencia o representaciones del sexo más parecidos a la vida real, así como lenguaje soez o la presentación de drogas, tabaco o juego.
- 18 años:
Son juegos donde la representación de la violencia, el sexo, el terror, etc., está presente de una manera muy explícita o exagerada.
Además de estas pegatinas, la caja del videojuego contendrá unos dibujos que representan los elementos de este tipo que están representados en un juego: lenguaje soez (palabrotas), representación de conductas discriminatorias, drogas, miedo, juego, sexo, violencia o la posibilidad de jugar por internet (onlie).
Debemos recordar que porque un videojuego sea para 16 o 18 años, no tienen que estar representadas todas estas prácticas no recomendadas para niños, puede que sólo sea un juego de la II Guerra Mundial o de terror: no es recomendado para menores de edad, pero no es la representación máxima del sexo y la violencia. No debemos asustarnos por las clasificaciones, tenemos que recordar siempre que es similar a elegir una película.
El sistema de clasificación por edades también nos ayuda a elegir un juego con una dificultad adecuada a nuestros hijos. Si es para mayores de 16 años, ya tendrá una complejidad y dificultad adecuada para personas de a partir de esa edad. Los juegos recomendados en contenido para 3, 7 ó 12 años tienen unas mecánicas de juego que permitirán que los niños de esa edad puedan completarlos sin problemas.
¿Qué debo de tener en cuenta al ir a comprar un videojuego?
Si los niños son pequeños, es fácil comprarles juegos porque ellos generalmente se interesan por los que son adecuados a su edad. Hoy en día son muy populares los 'Skylandrers', 'Disney Infinity', 'Animal Crossing' o 'Pokémon', o las adaptaciones de dibujos animados o películas, como la serie de juegos de 'Lego' o 'Inazuma Eleven'. Tampoco fallan nunca los clásicos, como los juegos de 'Mario' o los de deportes. Además, es recomendable acudir, si tenemos dudas, a tiendas especializadas de videojuegos, pues los dependientes están al día de las novedades y de lo que más se vende según las edades. Ellos nos orientarán también sobre todo lo que estamos comentando de las edades y los contenidos, para hacer la elección correcta.
Si nuestros hijos se encuentran en edades de entre los 12 y los 16 años, es más fácil que quieran escoger juegos no aptos para su edad. Ahí entra nuestro criterio, pero hay un sinfín de videojuegos para mayores de 12 años que puedan interesarles, y si escogemos uno de mayor edad, debemos de hacer sabiendo qué se pueden encontrar y qué no, por ello es bueno pedir consejo de quienes conocen los juegos.
Para cada rango de edad existe un sinfín de opciones de juegos a escogerPor ejemplo, a un menor de 18 años podemos dejarle jugar a 'Call of Duty', que es muy popular y es un juego básicamente de pegar tiros (el llamado género shooter) en una guerra. Podemos dejar que juegue, porque un niño, especialmente adolescente, sabe diferenciar perfectamente entre la realidad y la ficción, y es nuestra educación como padres la que le debe enseñar a no resolver las situaciones mediante la violencia.
Sin embargo, un 'Grand Theft Auto (GTA)' no es un juego recomendable para menores de 18 años, debe ser un juego que compre él cuando sea mayor de edad.
¿Cuándo le doy libertad para elegir?
Generalmente, a partir de los 16 años nuestro hijo ya puede elegir a qué jugar. Sin embargo, si es más pequeño, no nos debiera extrañar si en una tienda no le permiten adquirir un título que es para mayores de 18 años sin el permiso de sus padres.
No sólo controlamos el qué, sino el cuánto
Por último, es importante recalcar un punto clave sobre cómo educar a nuestros hijos para que sean responsables con el uso de los videojuegos: se trata del tiempo que puedan jugar al día. Los niños deben ver la consola como un tipo de ocio más, como la tele, el cine, el salir al parque, etc. Deben realizarse con un tiempo limitado y con unos horarios fijos. Esto ayudará a que nuestro hijo o hija aprenda a tener una rutina, unas obligaciones, y a cumplir unos horarios, lo que le hará más responsable y organizado en el futuro.
Los videojuegos se pueden jugar por semana un rato, pero siempre después de las obligaciones, como son, por ejemplo, los deberes. Muchos padres optan porque la consola se utilice sólo los fines de semana, eso es a gusto personal, pero lo importante es que se haga con unos horarios fijos y marcados, para no dar lugar a discusiones e intentos de negociación por parte de los niños cada día.
Tener de niños unos horarios marcados para jugar les hará, además, coger con más ganas la consola y verla como un premio. De mayores recordarán sus momentos con el mando y la pantalla con mucha nostalgia por ser algo por lo que esperaban, ya sabemos que "lo poco gusta y lo mucho cansa".
En Zonared también podéis ampliar este tema en un reportaje dedicado a la primera consola de nuestros hijos: ¿cuál es la correcta?