Los hongos, son unos parásitos que se viven y se reproducen en lugares húmedos y cálidos, por eso en verano aparecen más a menudo. Hay diferentes tipos de hongos en los pies que afectan a los niños. Los tres son peligrosos y conviene saber porque se producen y el aspecto que presentan.
1. Pie de atleta. Este tipo de hongos da lugar a un pie descamado, enrojecido, sensación de quemazón y grietas, ampollas y picor. A parece comúnmente entre los dedos y tiene aspecto de costra blanquecina. Huele muy mal. Puede extenderse a otras partes del cuerpo si no se paran, como a las manos, por eso es importante que el niño acuda al pediatra si después de un par de semanas de cuidados e higiene no desaparecen.
2. La paroniquia. Es un tipo de hongos que afecta las uñas de los pies principalmente. La piel que rodea la uña adquiere un aspecto rojizo e hinchado, se acaba destruyendo la cutícula de las uñas y produce dolor. También pueden aparecer ampollas con pus. Este tipo de hongos aparecen como consecuencia de lesiones en esa zona. Por ejemplo, en el caso de las manos muchos niños se muerden las uñas o se las cortan demasiado. De esta forma es más común que los hongos aniden en esa zona con la herida al descubierto y se produzca una infección. Aunque es más común en manos también pueden aparecer en los pies cuando se extiende.
3. Tiña ungueal. Afecta a las uñas de los pies. Suele aparecer en la pubertad aunque algunas veces también antes. La uña adquiere un aspecto amarillento o verdoso en franjas. Esto da lugar a uñas quebradizas o rotas y con un engrosamiento anormal. Se producen por una higiene deficiente de la zona aunque también por ir a piscinas públicas sin un calzado adecuado.
Causas de los hongos de los pies en niños
Las infecciones debido a hongos suelen ocurrir porque hongos parecidos al moho anidan en el tejido muerto de los pies, ya que hablamos de una zona húmeda y cálida. Los calzados cerrados, que no dejan transpirar el pie son una fuente de infecciones, también el uso de las duchas o piscinas públicas sin un calzado acondicionado a ello.
Respecto a los hongos relacionados con las uñas, haber tenido una lesión anterior en la zona es un predisponente.
De todos modos, las principales vías de transmisión es mediante contacto con otras personas en duchas y piscinas , o mediante animales: perros, gatos y conejos.
Tratamiento de los hongos en los pies
Dependiendo de la infección el tratamiento puede variar, por eso hay que ir al pediatra para que nos prescriba la mejor solución. A veces el tratamiento es antifúngico, en forma de cremas si principalmente es la piel la que está afectada. En estos casos se deberá frotar una crema antifúngica en los pies mínimo dos veces al día y ser constante hasta que desaparezca la infección. Es un proceso que suele llevar tiempo.
Si la zona afectada son las uñas o es una infección bastante extendida se deben administrar a los niños fármacos orales. En estos casos los fármacos deben darse acompañado de las comidas para una mejor asimilación del componente.
Otras veces, en caso de infección de uñas el médico puede decidir que la mejor opción es retirar la uña, esto ocurre cuando después de haber tomado la medicación oportuna, vuelve a aparecer una y otra vez la misma infección. Realmente el tratamiento de la onicomicosis es largo porque aunque en más de la mitad de los casos desaparece, solo es de forma temporal, pudiendo reaparecer en el futuro. Por eso, es necesario que los niños sigan tomando la medicación incluso una vez pasadas dos o tres semanas tras su desaparición. Si no se siguen estas indicaciones, es probable que pasado un tiempo aparezcan los hongos de nuevo. A veces, el médico también receta unos polvos que se echan por dentro del zapato y del calcetín del niño, esto mantendrán secos los pies parando la proliferación bacteriana.
Por otro lado, los hongos en los pies producen un gran picor, por eso seguramente tu hijo no podrá evitar rascarse. Si es necesario córtale las uñas para que no se haga daño, podría sangrar. Además los hongos pueden contagiarse y pasar a las manos. Si no puede evitar rascarse deberéis enseñarle a que a continuación se lave las manos con una buena cantidad de agua y jabón. De la misma manera, mientras dura el episodio bacteriano es recomendable que utilice chanclas en espacios públicos como piscinas o duchas, y sobre todo no compartir utensilios de higiene como toallas cortauñas con el fin de no contagiar a otros.
Remedios contra los hongos
Para combatir los hongos, podemos probar algunos remedios naturales que acabarán con ellos gracias a sus propiedades:
- Aceite de ajo : el ajo tiene propiedades antibacterianas por lo que se recomienda frotar la zona afectada varias veces al día.
- Vinagre rebajado en un poco de agua : te vale cualquier tipo de vinagre, aunque para estos casos suele usarse el blanco. Disuelve en agua el vinagre y pon a remojo sus pies durante un cuarto de hora mínimo. Después, sin aclarar, seca muy bien los pies. Repite una vez al día todos los días hasta que desaparezca la infección. Como el olor no será muy agradable se aconseja hacerlo por la noche.
- Limón : prueba a echar un buen chorro de limón en la zona dañada, incidiendo entre los dedos principalmente. Escocerá pero debes decirle que lo deje actuar durante unos minutos. Después se puede aclarar y secar los pies con una toalla exclusiva para él.
Cómo prevenir la aparición de hongos en los pies
Como es más fácil prevenir que curar a continuación te dejamos con algunos consejos para evitar esta incómoda situación.
- Seguir una adecuada higiene, de manera que es importante lavar bien los pies todos los días, sobre todo si el niño tiende a sudar por esa zona. Después hay que secarlos adecuadamente.
- Usar chanclas en lugares públicos : piscinas, gimnasios, saunas, etc.
- Retirar el calzado sintético. Las fibras sintéticas impiden la transpiración de la piel y la persona genera mayor sudor. Si usamos materiales que dejen transpirar el niño se sentirá más cómodo, fresco y sudará menos, por lo que hay menos posibilidades de tener hongos.
- Usar calcetines de algodón, que dejen transpirar los pies. Además es preferible que se cambie de calcetines dos veces al día.