En verano hay animales que aparecen más y están presentes en nuestro día a día, sobre todo si vamos al campo, a la playa o en zonas donde haya flores y plantas. Las abejas son uno de estos insectos y, aunque son inofensivos, si se ven atacadas o se sienten molestas pueden atacar a su víctima con tal de defenderse. Debemos tener en cuenta que solamente pican si creen que la situación es extrema, ya que después de picarte mueren instantáneamente.
Por eso, no debemos vivir asustados de estos animales ni matarlos si no nos suponen un peligro, ya que no nos atacarán sin razón alguna y son muy necesarios para el buen funcionamiento del medio ambiente en nuestro planeta.
Sin embargo, los niños no son todavía conscientes de que algunos animales para defenderse pueden picarles y hacerles daño, por lo que depende de nosotros que no se hieran o que podamos reaccionar lo antes posible para paliar el dolor y poner una solución ante una posible picadura.
En Bekia te contamos qué reacción tener ante una picadura de abeja en niños, para que puedas ayudar a tu pequeño a sobrellevar la situación con el menor dolor posible y sin que se sienta abrumado por la experiencia.
Las abejas atacan solo si se ven amenazadas, porque después de picar, muerenQué reacción tener ante las picaduras de abeja en niños
Lo primero que debes tener presente es que no debes perder la cama. Es esencial que te mantengas tranquilo en todo momento, ya que de ti dependerá que el niño se ponga más o menos nervioso y no pierda la calma. Además si estás tranquilo podrás tener la mente más clara para tomar la decisión que sea necesaria, haciendo así que todo salga mejor y con mayor tranquilidad. El niño será un espejo ante tus reacciones, por lo que deberás inspirarle confianza y que tienes la situación controlada.
Si sabes que tu niño es alérgico a las picaduras de abeja deberás llevarlo a hospital lo antes posible para que puedan atenderle de urgencias. Quizás no hayas detectado esta alergia antes en él, por lo que esta primera picadura os sirva de experiencia. Sabrás si tu hijo tiene alergia a las abejas si tras su picadura empieza a hincharse, le aparecen manchas rojas en la piel o, lo más peligroso, no puede respirar adecuadamente. Ante todos estos casos que le sucedan a los niños deberás tener una rápida reacción y correr al hospital, porque la asistencia médica será crucial lo antes posible.
En el caso de que el niño no sea alérgico a las abejas no tienes porqué preocuparte tanto. Simplemente deberás observar si en la picadura hay un aguijón dentro o no. En caso afirmativo será porque le ha picado una abeja y no una avispa, pero en caso negativo y viendo al insecto podremos saber si fue una abeja, además de que podremos ver al animal muerto cerca de la zona donde le picó al niño.
Sacar el aguijón
En algunos casos el aguijón puede quedar dentro de la piel también con las abejas, por lo que deberemos retirarlo lo antes posible. Si nos cuesta mucho deberemos pedir ayuda, ya que mientras antes lo saquemos menos tiempo estará dentro del cuerpo del niño y el veneno no le hará tanto efecto, por lo que reducirá en gran medida el dolor que este puede ocasionarle. A continuación procederemos a limpiar bien la zona con agua y jabón. Recuerda no frotar demasiado fuerte ya que le dolerá bastante, sino simplemente a dejar la zona limpia con un jabón neutro e hipoalergénico. Podemos colocarnos una bolsa de hielo para bajar el hinchazón y hacer que el dolor sea más soportable.
Después de quitar el aguijón y limpiar la zona, debemos acudir a un médicoDespués será el momento de acudir a un médico o farmacéutico para que nos recomiende cuál será el mejor tratamiento para dicha picadura de abeja. Quizás esté más hinchada de lo normal o le cause dolor extremo al niño, por lo que solamente el médico podrá determinar cuál es la medicina más adecuada para aliviar el dolor o si se debe tomar un antinflamatorio para ponerle remedio al hinchazón.
Recuerda que el niño puede estar muy nervioso y tener una mala reacción al no comprender qué le está pasando, además las picaduras de abeja pueden ser muy dolorosas, por lo que de ti depende que pueda llevar la situación lo mejor posible sin que le genere una muy mala experiencia. Simplemente, ten paciencia e intenta hacer todo lo que esté en tu mano para paliar su dolor, después los profesionales de la salud podrán aliviar sus síntomas y darle el tratamiento adecuado para que la picadura desaparezca, gradualmente, lo antes posible y sin tanto sufrimiento para el niño.