Lo más importante es que perciba la menstruación como algo naturalLa menarquia o primera menstruación de una chica es un momento tan importante para ella como para su madre. Incluso lo es más para la progenitora que ve en este cambio el paso de niña a mujer de su hija. La primera regla supone la entrada en la pubertad, en la adolescencia y en definitiva en la edad adulta. Son muchos los cambios que la joven vivirá en unos meses y es importante que su madre la acompañe en ese proceso.
No tiene que ser algo traumático ni conflictivo. Y su madre ha de ayudar a que sea lo más natural posible. Es algo esperado y como madre has de estar preparada para este cambio y ayudar a tu hija en todo lo que irá descubriendo a partir de su primera regla. Así que lo mejor es que estés preparada para cuando ocurra, porque la menstruación llega sin avisar.
No obstante es algo que llegue a todas las chicas, más tarde o más temprano. Los 12 años es la edad media en que se tiene la menarquia o primera regla, por lo que un par de años antes la madre ya puede empezar a pensar en cómo afrontar este cambio. En ocasiones la menstruación es más temprana y hace acto de presencia cuando tiene 9 años y otras veces se retrasa gasta los 16. En el artículo de hoy de Bekia te contamos cómo ayudar y guiar a tu hija en esta etapa.
La pubertad y la regla
La pubertad es un proceso largo, dura varios años, en que se produce el cambio de niña a mujer. Los primeros signos de esta nueva etapa comienzan con un importante estirón y, después, el desarrollo de las mamas, la aparición de vello púbico y más adelante llegará la menstruación. Son varios los síntomas que te van indicando que su primera regla está por venir. Puedes ir preparándola.
Las niñas de hoy en día tienen mucha más información que nosotras sobre lo que es la pubertad, la menstruación, el deseo sexual y las relaciones de pareja. Son temas que se tratan con normalidad. Ya no son tabú ni en la familia ni en el colegio. Y eso es importante, porque tu hija asumirá la llegada de la menstruación con la normalidad que debe.
Podemos asesorar a nuestra hija sobre el uso de compresas y tamponesSi no has hablado con tu hija de estos temas es importante que lo hagas. Introduce la conversación poco a poco y hazlo con la naturalidad que corresponde. Antaño las niñas se llegaban a asustar al ver que sangraban y no sabían el motivo por el que lo hacían. Por suerte ya no existe esa ignorancia y es un alivio para todos, para la madre y para la hija.
Cuándo hablarle de los cambios
La conversación sobre la pubertad, la menstruación y los cambios que experimentará tu hija debe ser introducida también como algo natural, no organizar un espectáculo ni un drama en torno a ello. Debes hacerlo en un momento en que ella se sienta cómoda y tranquila -una buena opción es en la intimidad del hogar- y puedes contar con el apoyo de sobrinas, tías o hijas mayores para que el ambiente sea más distendido.
Introduce el tema con normalidad, hablando, por ejemplo, de que si la menstruación os hace sentir hinchadas, si tenéis que comprar compresas o tampones porque os va a venir o de si habéis calculado si os toca o no cuando os vayáis de vacaciones.
La cuestión es que tu hija vea que la menstruación no es nada traumático, que es un proceso natural por el que pasa toda mujer y que lleva parejas una serie de consecuencias. Uno de los temas que más preocupa a una chica cuando le va a venir su primera regla son los dolores que pueda tener y las limitaciones.
Háblale de ello con normalidad, que es natural que tenga dolor en los ovarios y los pechos o que le duela la cabeza. Si tú también los sufres cuando te viene la menstruación a buen seguro que ya los conoce y que [quotei]Nuestra hija debe ver que puede confiar en su madre para cualquier tema[/quotei]no se siente tan extraña. Lo mismo ocurre con la hinchazón que muchas experimentamos cuando tenemos la regla o los cambios de humor que podemos tener en esos días. No te limites a decirle que es normal que los tenga, sino que debes hablarle también de que son todo consecuencias del cambio hormonal que está viviendo. Y sobre todo tranquilízada. La regla es algo por lo que todas las mujeres pasamos una vez al mes sin crear dramas.
Las infusiones, la aplicación de calor, el reposo o los anti inflamatorios son una ayuda extra para sobrellevar el síndrome pre menstrual y se convertirán en sus aliados, igual que lo son tuyos. Es habitual también que coincidiendo con su primera regla tu hija sufra una bajada de hierro. Consulta con el médico y si lo cree necesario que le recete algún complemento vitamínico.
Cambios psicológicos
La llegada de la primera regla, la pubertad en su máximo esplendor y la llegada de la adolescencia hace que la relación entre madre e hija se resienta. Ella se siente mayor y quiere ser más independiente de sus progenitores. Es normal, si haces un poco de memoria recordarás que tú pasaste por algo parecido. Y también que fue una etapa.
En este tiempo has de ser más comprensiva y sobre todo tener paciencia para evitar conflictos innecesarios. Tiene que ver en ti una aliada, no a una enemiga. Esto no significa que tengas que transigir con todo lo que tu hija diga o haga, solo que habrás de levantar más la mano y buscar acercarte a ella mediante el diálogo.
La menstruación viene seguida de cambios físicos y psicológicosTienes que ser capaz de ganarte la confianza de tal modo que cuando tenga alguna duda o problema recurra a ti porque sabe que vas a ayudarla, no a reñirla o a enfadarte. Alcanzar ese nivel de confianza es clave para que tanto tú como ella mantengáis una buena relación durante su pubertad.
La primera regla
También es importante que exista esa complicidad entre madre e hija para cuando le venga su primera regla, que sienta que puede contarte cómo se encuentra y qué cambios está experimentando. Compra con ella compresas y tampones para que vea que es algo normal, nada de lo que avergonzarse o ante lo que sentir rechazo.
Consúltale cuáles prefiere y recomiéndale las que crees que mejor le van en función del flujo y la actividad que realice. Al fin y al cabo tú eres la experta y seguro que se deja aconsejar. Haz que se sienta segura consigo misma y con los productos de higiene íntima que vaya a utilizar. Uno de los mayores temores que tiene una chica cuando le viene la regla es que los demás se lo noten, que llegue a manchar la ropa o que vean que lleva una compresa en el bolso. Para evitarlo explícale que lo mejor es llevar una de reserva en el bolso y tratar con discreción los asuntos íntimos.
Por último no olvides que la menstruación puede ser algo inestable. Puede tener su primera regla y luego no saber nada de ella durante meses. Explícale que es normal, pero que es algo que hay que conocer para acudir al médico en caso de detectar algo irregular.