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La meningitis en niños
La meningitis en niños

INFECCIÓN DE LA MENINGITIS

La meningitis en niños

La meningitis es una de las enfermedades que más preocupan a los padres, y es que el 80% de los casos se dan en niños y jóvenes.

Madre llamando al médicoAnte la mínima sospecha de meningitis debemos de llamar a urgencias

La meningitis es una de las enfermedades más peligrosas que existen sobre todo en los primeros años de nuestra vida. De hecho, se conoce que alrededor de 1.200 personas lo padecen cada año en España y el 80% de estos casos son niños menores de 5 años y jóvenes menores de 30. Por todas estas razones es una de las enfermedades infecciosas que más preocupan a padres y médicos, que intentan tener un diagnóstico lo más precoz posible -la meningitis puede extenderse en menos de 24 horas- para que el tratamiento pronto y seguro y la recuperación sea absoluta o prácticamente absoluta. Porque además de ser una enfermedad peligrosa que puede llegar a causar la muerte, son muchos los casos en los que los afectados acaban con daños y secuelas irreparables como puede ser la sordera.

Pese a los datos, no hay que alarmarse, ya que a pesar de ser peligrosa, se cuenta con su existencia desde el principio de nuestras vidas, y por ello en todos los calendarios de vacunas infantiles existen inyecciones para todos los tipos y derivaciones de esta enfermedad causada por infección casi en la totalidad de los casos.

¿Qué es la meningitis?

Entrando en materia, debemos comenzar sabiendo que la meningitis es la inflamación de las meninges, que son aquellas membranas que existen en el cuerpo para cubrir el cerebro y la médula espinal y a la vez son las encargadas de generar el líquido cefalorraquídeo. Cuando por algún tipo de infección de oído o garganta por ejemplo, los virus consiguen llegar a estas pequeñas membranas se produce la infección. Pero no es la única causa, sino que también puede llegar a producirse por hongos, alguna reacción alérgica a medicamentos o parásitos.

Mirando la fiebre a un niñoLa fiebre alta y la rigidez del cuello son síntomas de meningitis

La razón de que los niños sean la mayoría de los pacientes diagnosticados de meningitis es que su sistema inmunológico no está aún del todo desarrollado y por tanto son más propensos y vulnerables a este tipo de infección. Además, el contagio es mucho más fácil en estas edades ya que tienen mucho menos cuidado y un trato diario con otros niños en la guardería. De hecho, una de las formas de contagio más frecuente es a través de la tos, ya que de esta forma de expulsan mocos, saliva y otras secreciones de la garganta, que son las portadoras de dicho virus.

El simple hecho de educar a nuestros hijos para colocarse la mano delante de la boca con cada tos, podría prevenir muchos contagios de estas y otras enfermedades víricas, además de otros hábitos como lavarse las manos antes y después de comer; y no compartir vasos ni cubiertos con otros niños por muy amigos que sean.

Síntomas de la meningitis

Pese a que son muchos los síntomas que pueden aparecer antes de diagnosticar la meningitis, puede resultar complicado, sobre todo en niños pequeños. Una de las razones es el poco conocimiento que estos tienen sobre su cuerpo y que si no hablan, algunos de los síntomas tendrán que ser observados y estudiados por nosotros mismos. También hay que tener en cuenta que algunos de estos síntomas son iguales que los de otras enfermedades mucho menos graves, como una simple gripe pasajera.

Los primeros síntomas que pueden aparecer son los propios de un constipado, como son fiebre, dolores de cabeza y articulares. También puede haber otros síntomas como nauseas, vómitos, mareos, convulsiones y algo muy característico como es la rigidez en la nuca.

Para saber si de verdad existe esa rigidez, lo más útil es pedir a los niños que intenten mover el cuello. Debido al dolor local de la zona de la cabeza y a la posible inflamación, les molestara la flexión. Otros síntomas menos físicos y visibles son la irritabilidad, el cambio en los niveles de conciencia y en el estado mental o la sensibilidad a la luz.

Niño en el hospitalEl tratamiento sólo puede realizarse en el hospital

En bebés mucho más pequeños que sufren una meningitis por inflamación de la zona craneal puede existir un síntoma evidente y es el abombamiento de las fontanelas. En recién nacidos, los huesos de la cabeza aún no están del todo formados porque el cerebro tiene que crecer todavía un poco, por lo que se puede atisbar algunos huecos blandos entre esos huesos. Estos huecos son las conocidas como fontanelas. Si se ha producido una inflamación de las meninges, puede ocurrir que estas fontanelas sufran una pequeña deformación debido a la inflación del interior, dejando ver un pequeño bulto que sobresale.

Ante el más leve pensamiento de que por los síntomas que padecen nuestros niños podría tratarse de un caso de meningitis lo mejor es acudir inmediatamente a un hospital, ya que la meningitis bacteriana es reconocida como una urgencia médica. Una vez en manos de un asistente médico, éste realizará un estudio basándose, además de en los síntomas, en la extracción de una muestra del líquido cefalorraquídeo a través de una punción lumbar.

Tratamiento de la meningitis

El único tratamiento posible en el caso en que se haya diagnosticado de meningitis es la administración de antibióticos, que variará según el tipo de meningitis, y la hospitalización.

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