Menú
Cómo perder peso después del parto
Cómo perder peso después del parto

ADELGAZAR

Cómo perder peso después del parto

Durante el embarazo es normal que hayamos cogido peso, el cual podrás perder de nuevo si haces un poco de ejercicio, pero mucho cuidado con restringir demasiado la dieta.

Recuperar tu talla después del embarazo puede convertirse en todo un reto para algunas mujeres. Sin embargo, es un proceso que lleva su tiempo y hay que tener paciencia. Según un estudio elaborado por el Hospital Mount Sinai, de Toronto (Canadá), adelgazar tras el parto puede llevar entre 3 y 12 meses. Por eso, no debes agobiarte. Muchas veces pensamos que recuperar la figura después de dar a luz es sencillo, o al menos eso nos han hecho creer algunas celebrities y modelos que desfilan por la pasarela (con un vientre perfectamente plano) unos meses después de que nazca su bebé. Pero lo cierto que puedes subir un 20% de tu peso normal durante el embarazo.

Así que ya sabes, tómatelo con calma. Durante el parto perderás entre 5 y 7 kilos, procedentes del propio bebé, de la placenta y del líquido amniótico. Hay algunas mujeres que afirman que solo con cuidar del recién nacido pueden perder peso suficiente y que no necesitan de grandes planes para adelgazar tras el embarazo. Esto, como la mayoría de las cosas, es cuestión de genética. Hay algunas mujeres que recuperan la figura sin problemas y otras que tienen que hacer grandes esfuerzos para volver a ser las de siempre.

Si este es tu caso, no desesperes. Tenemos una serie de consejos que harán que te harán perder peso poco a poco y sin poner en riesgo tu salud ( ¡no se te ocurra recurrir a una dieta milagro y menos si estás dando el pecho a tu hijo! ). Lo único que debes hacer es cuidar de tu alimentación y hacer algo de ejercicio. Con un poco de constancia seguro que lo conseguirás.

Hacer ejercicio físico

Después del parto, tu cuerpo aun no está preparado para hacer grandes esfuerzos. Durante el puerperio, el tiempo que tarda el aparato reproductor en recuperarse (entre 5 y 6 semanas) debes evitar el ejercicio intenso. Empieza por salir a pasear con tu bebé por el parque. Dar largas caminatas empujando su carrito te hará ir ganando fuerza y resistencia día a día.

Cuidado con restringir mucho la dieta si estás dando el pecho al bebéCuidado con restringir mucho la dieta si estás dando el pecho al bebé

Cuando haya transcurrido este tiempo, es recomendable que empieces a practicar deportes como el yoga o el pilates. Te ayudarán a fortalecer la zona del vientre, que es la que ha quedado más debilitada sin que tu espalda sufra. La zona abdominal es, sin duda, la que más te costará recuperar. Aunque todo depende de si la trabajabas antes de quedarte embarazada. Si hacías ejercicio con regularidad, volverá enseguida a ser la que era. Si no, tendrás que ponerte manos a la obra.

Si prefieres entrenar en casa o al aire libre, empieza haciendo unos pocos abdominales, con una serie de 10 la primera semana será suficiente. Recuerda que no es necesario elevar todo el tronco, con que levantes los hombros de la colchoneta ya estarás trabajando la zona. Semana tras semana ve aumentando el número de series e incorpora también ejercicios para trabajar los oblicuos y los inferiores. También está el método de los ejercicios hipopresivos, cada vez más populares entre las mujeres que han dado a luz.

En cualquier caso, es posible que no recupere del todo su aspecto anterior. Es perfectamente normal, así que no te sientas mal ni te avergüences. Tu cuerpo guardará algún recuerdo del inquilino que tuvo dentro, y eso no es malo. No te obsesiones con adelgazar a toda costa.

Cuando notes que tu cuerpo va recuperando el tono muscular puedes empezar a practicar deportes algo más exigentes. La natación puede ser una buena alternativa para perder peso, también montar en bici o caminar en la elíptica. Es mejor que todavía no corras, el suelo pélvico aun puede estar débil y podría ser contraproducente.

En unos meses podrás recuperar tu actividad física habitual. Si no hacías nada de deporte, ¿no crees que ya ha llegado el momento de llevar una vida más sana? Puede que ahora tengas menos tiempo, pero te vendrá bien relajarte durante dos o tres horas a la semana practicando alguna actividad que te guste. No tiene que ser puramente deportiva, si te gusta bailar, ¡baila! Pero muévete.

El estudio mencionado anteriormente, elaborado por el Hospital Mount Sinai, demuestra que si pasado un año desde el parto no has vuelto a tu peso anterior corres el riesgo de desarrollar ciertos factores de riesgo relacionados con la diabetes y con algunas enfermedades cardíacas.

Cuidar la alimentación

Respecto a la dieta, si vas a dar el pecho a tu bebé, esta tiene que ser sana y equilibrada y además aportarte un extra de calorías. Piensa que tu alimentación influye en la leche que produces y está tiene que llevar todos los nutrientes necesarios para el pequeño. Tu médico será quien te aconseje al respecto. En cambio, si has decidido darle el biberón podrás ponerte a dieta de forma más estricta, reduciendo la ingesta de calorías, pero nunca haciendo planes restrictivos para adelgazar que puedan afectar a tu salud.

Puedes perder peso haciendo ejercicio, pero empieza con poco a pocoPuedes perder peso haciendo ejercicio, pero empieza con poco a poco

Bastará con que consumas una mayor cantidad de frutas y verduras, limitando la cantidad de grasas. No te olvides de las proteínas, pero tómalas en su cantidad justa porque habitualmente tendemos a pasarnos. Elige aquellas que tienen menos grasa como las del pescado y las carnes blancas.

Otro truco que funciona a la hora de adelgazar de manera saludable es reducir la cantidad de aceite que usas al cocinar. Seguro que sin darte cuenta estás poniendo aceite de más a tus platos y eso hace que perder peso sea más difícil. Nunca debes privar a tu cuerpo de los alimentos que necesita para rendir en el día a día o durante la actividad física. Hay dietas que se basan en la eliminación de los hidratos de carbono de la dieta y eso es un error. Comer pasta, arroz... es indispensable.

En general, debes reducir las cantidades de comida que tomas habitualmente pero sin renunciar a ningún alimento. Lo más saludable siempre es comer alimentos de todos los tipos en cada comida jugando con sus proporciones. Por eso, un plato que combine arroz o pasta, verdura y unos trocitos de carne es el mejor aliado para llevar una alimentación sana y a la vez adelgazar.

No desesperes muy pronto, tu cuerpo volverá a ser el mismo que era antes del embarazo.

Te puede interesar