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Cómo introducir la carne en la dieta de los bebés
Cómo introducir la carne en la dieta de los bebés

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Cómo introducir la carne en la dieta de los bebés

Cuando los bebés empiezan a tomar papillas, alrededor de los 6 meses, podemos ir poco a poco introduciendo diferentes carnes, ¿cómo hacerlo?

padre dando de comer al bebéA partir de los 6 meses los bebés pueden ir probando la carne en purés

Cambiar la papilla por alimentos sólidos en la dieta de los bebés es un paso muy importante en su nutrición. Dentro de estos alimentos sólidos está la carne, que aportará a tu hijo o hija proteínas necesarias para su óptimo crecimiento. A los padres os dará muchas más posibilidades con las que alimentar a los bebés, pudiendo probar más cosas además de la leche o de las papillas de cereales y verduras.

¿Cómo introducir la carne en la dieta de nuestro bebé?

Lo ideal es empezar a introducir la carne en la papilla, para que el bebé vaya acostumbrándose a su sabor y digestión. Según los pediatras la edad más conveniente para este proceso es a partir de los 5 meses, que es cuando los bebés ya empiezan a necesitar el zinc y el hierro que contiene la carne, además de la leche que consumen en su día a día. Si estás dándole el pecho a tu bebé es mejor continuar haciendo sólo eso hasta los 6 meses. Por supuesto, cada bebé se desarrolla a un ritmo diferente, por lo que lo mejor será consultar al pediatra.

Sin embargo, cuando el bebé ya haya crecido un poco y lleve un tiempo tomando la carne triturada en la papilla puede dar el siguiente paso y empezar a comer carne sólida en su dieta. Encontramos algunos signos que nos pueden decir que el niño o la niña ya está listo para ello: por ejemplo, si su peso se ha multiplicado desde su nacimiento o llega casi a los 6 kilos, sostiene su cabeza recta mientras está sentado y no rechaza las cucharadas cuando se introducen en la boca.

niño comiendoEs mejor empezar por el pollo y el pavo e ir poco a poco introduciendo nuevos tipos de carne

Al comienzo trituraremos la carne con el resto de alimentos. A medida que pasa el tiempo y el bebé va tiendo dientes, iremos mezclándola en trozos pequeñitos para prevenir posibles atragantamientos. No empieces a dárselo a comer así hasta que ya haya probado varias veces otros alimentos sólidos con texturas más fáciles de ingerir. Para poder masticarlas como es debido, el niño o niña necesitará tener algunas muelas desarrolladas. Si a tu bebé no le gusta la carne o le es complicado masticarla no significa que tengas que dejar el alimento a un lado; vuelve a probar al cabo de unas semanas. El pavo y el pollo suelen ser las carnes con las que se introduce primero a los bebés en la ingesta de este tipo de comidas, una vez estén acostumbrados a ellas se puede pasar a las carnes rojas.

¿Cómo preparar la carne para la dieta de nuestro bebé?

Como ya hemos apuntado, la mejor forma de introducir la carne en los bebés es mezclándola con la papilla o puré. Podemos fabricar nuestra propia papilla batiendo trocitos de pollo o pavo y mezclándola con otros alimentos ricos en nutrientes como legumbres (frijoles, guisantes o lentejas), patata o verduras. Para que a la hora de batir la carne nos resulte más fácil y al mismo tiempo se aporten propiedades beneficiosas para la dieta del bebé, podemos bañar la carne con caldo casero. También podemos optar por los potitos preparados que contienen carne.

Durante este periodo tienes que asegurarte de que la carne esté muy bien cocinada, ya que si no lo está puede derivar en una intoxicación. De igual modo, y para evitar que la carne esté cruda no es nada aconsejable que se cocine en el microondas, porque será muy probable que se cocine la capa superficial pero no el interior. Algunas carnes que se deben evitar en estos primeros meses de vida son las carnes procesadas como el jamón, las salchichas de Frankfurt y el fiambre, porque contienen un alto porcentaje de sal, de aditivos y muchas de ellas están cocinadas con leche, que puede perjudicar a los bebés sensibles a este ingrediente.

bebé comiendo papillaPodemos mezclar la carne con otros alimentos en las primeras papillas

Se recomienda servir la comida al bebé cuando se enfríe lo suficiente para que pueda comer sin quemarse, es decir, cuando la papilla alcance una temperatura tibia. Luego podemos guardar las sobras en la nevera o el congelador, dependiendo de cuándo vayamos a usarla la próxima vez. Sólo habrá que seguir las reglas que todos sabemos respecto a la comida congelada : sacarla del congelador unas horas antes para que se descongele a temperatura ambiente y no volver a congelar una vez descongelado.

Una vez pasado el tiempo, y cuando el niño o niña ya haya cumplido entre 8 y 10 meses podemos empezar a darle trocitos pequeños de carne sólida. Por supuesto, esta no deberá de tener ningún tipo de hueso y deberemos de quitar la grasa, en caso de que tenga. Introduce estos alimentos nuevos poco a poco. Por ejemplo, dale un poco de pollo al bebé y sigue con él durante unos días para ver cómo responde. Al cabo de una semana más o menos prueba introduciendo en su dieta un poco de ternera, y así sucesivamente con diferentes tipos de carnes. Lo más normal es que acepte algunas y rechace otras, si este es el caso prueba de nuevo al cabo de un tiempo.

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