Las pesadillas son un evento que ocurre al dormir, más concretamente durante la fase REM del sueño. No se sabe muy bien la causa aunque se sospecha que está relacionada con el estrés y ansiedad que vivimos por el día, como una forma de seguir dando vueltas a algo que nos preocupa.
En los niños tener pesadillas es lo más normal del mundo, sobre todo entre los 3 y los 6 años, que es cuando empieza a desarrollarse la imaginación de los niños. En estas fases del crecimiento también es normal que aparezcan otros fenómenos relacionados con el desarrollo de la imaginación como los amigos imaginarios o los juegos de rol (jugar a médicos y enfermeras, a las familias, etc).
¿Por qué aparecen las pesadillas?
Como ya dijimos, no podemos predecir al 100% las pesadillas porque hay varias causas, sin embargo, es más probable que aparezcan cuando el niño está viviendo una situación estresante. Lo primero que debes hacer es preguntarte si ha estado viviendo una situación que le preocupe:
-¿Tiene algún tipo de problema en el colegio? ¿Últimamente suspende?
-¿Estás pasando por un proceso de separación o divorcio?
-¿Os estáis mudando de barrio o de ciudad?
-¿Recientemente uno de los padres ha tenido que separarse del niño recientemente (enfermedad, encarcelamiento, etc)?
-¿Ha vivido algún otro tipo de evento estresante últimamente?
Interésate por lo que ha soñado, pregúntale y saca tus propias conclusiones, puede que solo sea por algo que ha visto en la televisión o no tenga importancia. Si las pesadillas son continuas y repetitivas durante la semana habrá que descubrir el motivo que hay de fondo porque seguramente hay algo que realmente le esté preocupando y haya que destaparlo.
Las situaciones estresantes pueden generar pesadillas en los niños y niñasControlar los factores ambientales al dormir
Lo primero que hay que hacer para evitar que los niños tengan pesadillas es tener controlado todos los factores que pueden impedir que los niños descansen adecuadamente, son pautas muy sencillas que siempre se recomiendan en los trastornos del sueño, independientemente de cuál se trate.
1) Mantén los mismos horarios. Es decir, acuéstalo y levántalo siempre a la misma hora todos los días, incluso cuando no tenga que madrugar intenta que no haya un desfase muy grande.
2) Sigue una rutina de sueño. Antes de ir a dormir tiene que seguir los mismos pasos siempre, de manera que sean predecibles y el niño sepa lo que va a ocurrir a continuación. Por ejemplo: baño, pijama, cena, lavarse los dientes y por último leer un cuento antes de dormir.
3) Asegurarse de que la habitación es "acogedora", es decir, que no hay zonas excesivamente oscuras o figuras que con la oscuridad puedan proyectar sombras desagradables. La imaginación de los niños es desbordante.
4) No dejarles hacer actividades estimulantes antes de dormir, por ejemplo ver la televisión o jugar a la consola. Si es fin de semana y vais a ver una película de noche intenta que sea temprano para que luego podáis hacer otra cosa antes de dormir, como charlar un rato o leer un cuento.
5) Evitar las bebidas estimulantes y alimentos pesados durante la cena.
Que podemos hacer nosotros
1) No te rías de sus emociones. Nunca ridiculices a tu hijo por tener pesadillas durante el sueño. Aunque a ti puedan parecerte ridículas o exageradas ellos lo viven con mucha intensidad, por eso debes compartir siempre sus miedos y hacerle ver que su miedo es normal. Después dile que es muy valiente porque a pesar de que ha tenido la pesadilla lo está llevando muy bien y que te sientes orgulloso de él.
2) Explícale cómo funciona el sueño. No se trata de que le des un seminario pero coméntale que las pesadillas no son reales y que las creamos nosotros cuando nos preocupamos mucho por algo que nos ha pasado. Pregúntale si le ha pasado algo últimamente en clase o que le preocupe.
Puede dormir con un peluche que le de seguridad y tranquilice3) Usa el dibujo como método de catarsis. Por la tarde, muchas horas antes de ir a dormir, pídele que te haga un dibujo de lo que ha soñado, sin embargo, tiene que dibujar la escena de que le gustaría que pasase, es decir, como le gustaría que terminase la pesadilla, darle un final diferente. Por ejemplo, si tu hijo sueña que le persigue Freddy Kruedger, puede imaginar que viene Batman y que juntos consiguen acabar con él.
4) Juega con él o ella. Mientras jugáis podéis representar la escena de cómo os gustaría que acabase el sueño, para que si tiene miedo en mitad de la noche se acuerde y piense en ese final alternativo. Por otro lado, hay personas que desde niños pueden despertarse en medio del sueño, se dan cuenta de que algo no va bien y se despiertan solos cuando empiezan a tener miedo, lógicamente no es lo común pero si le dices que intente despertarse solo (por ejemplo agitándose dentro del sueño) no volverá a tener miedo porque al tener el control de sus sueños se relajará y la ansiedad desaparecerá.
5) Acompáñale hasta la cama. Lo ideal es que le cuentes un cuento que le guste o que estés un rato hablando de que tal le ha ido el día. Tiene que ser un momento agradable donde disfrute y que note que te gusta estar con él. Si has tenido un mal día o no estar de humor es mejor que lo haga tu pareja porque ellos lo notarán y no es nada tranquilizador estar con otra persona que no muestra un interés real.
6) No te quedes a su lado hasta que se duerma. Es mejor que salgas antes de que se quede dormido del todo. Primero porque es mejor que no se acostumbre a que estés tu presente para que pueda dormir porque entonces asociará el no tener pesadillas con que estés tú "vigilando", y segundo, porque si se despierta y no te ve a su lado sentirá que le has engañado y que si ha tenido la pesadilla es porque tú te has marchado a dormir a tu habitación y le has dejado solo. Para facilitar tu marcha puedes dejarle un peluche con el que se sienta cómodo (a modo de guardián) o una pequeña luz de noche en la mesita.